7 consejos para que vuelva el amor a tu matrimonio

A veces, casi siempre por descuido, de manera imperceptible el amor se fuga por la ventana. Si ese es tu caso, este artículo seguro te ayudará.

Oscar Pech

Déjame te cuento una historia muy breve. El sábado pasado, casi por azar, me tocó estar en una boda de una pareja que tenía seis años de vivir en unión libre, y un hermoso niño de cuatro años. Ella estaba hecha un sol que irradiaba felicidad. Su sonrisa era cálida y luminosa: a todos nos quedaba claro que ese era el día en que se cumplían sus sueños. Por su parte, él también se encargó de que todos entendiéramos que estaba allí por obligación: para cumplir con un deber social. Para él, la boda era, como en El cuervo de Poe: “solo eso y nada más”.

Mientras yo los miraba con mucha tristeza y detenimiento desde el fondo de la iglesia, pensé en las palabras que una prima me dijo hace muchas décadas: “Con su puro encanto, una mujer puede retener a su esposo por tres, máximo cuatro años. Después ella necesita emplear mucho la inteligencia”. Y claro, eso va también para los hombres: todos necesitamos tener mucho cuidado de que los deberes, las circunstancias, nuestros anhelos, no nos alejen de nuestra amada. Pero permítanme volver a la idea de mi prima, que en realidad no es nueva.

Alcanzar el Buen Amor

Hace unos quinientos años, León Hebreo, Giovanni Picco della Mirándola y Marsilio Ficino decían, resumiendo libros enteros en pocas palabras, que el amor entra en el cuerpo a través de los ojos (es decir, de la atracción física) y entonces puede viajar a la mente, y se vuelve el “buen amor”, que es del que habla en su libro el Arcipreste de Hita. O por otra parte, decían estos autores, puede viajar hacia el vientre en forma de pura atracción sexual y se vuelve “el loco amor”, un amor destructivo para ambas personas.

Ahora, antes de que alguien levante la mano para decir que hoy día nadie comparte esa postura, veamos hasta qué grado son correctas estas ideas. Es decir, me imagino que tú y yo estamos de acuerdo en que hace siglos se veía a la atracción física entre el hombre y la mujer como un asunto de pecado. Pero una cosa sí es cierta: si en una relación hay solo atracción física y nada más, o bien la belleza aburre, o bien con el tiempo la belleza se acaba, y la relación pierde su encanto, su felicidad, su vida. Entonces, es válido hacer la pregunta:

¿Qué hacer para tener por siempre una buena relación de pareja?

La pregunta tiene diferentes respuestas, a diferentes edades: si se trata de un niño pequeño, enseña a tu hijo a volverse impermeable a la sociedad desechable en que vivimos. Enséñale que, pese a lo que vea con sus amiguitos y en la propaganda de la televisión, esta vida no es una carrera constante por algo nuevo, desechando a lo viejo, sino que uno es más feliz cuando toma cosas y personas para que le acompañen toda la vida.

Advertisement

Si tu hijo es joven, enséñale de nuevo a ir contra corriente: muéstrale que en las relaciones emocionales, tanto de amistad como de noviazgo, nunca será mejor lo superficial que lo profundo. Es decir, lo que trato de decirte es que si la familia como institución está pasando por uno de los peores momentos de su historia, es porque como sociedad estamos cambiando a tal grado, que estamos perdiendo nuestros valores más fundamentales.

Ahora bien, si no se trata de tus hijos, sino de tu caso en particular, hay cosas que puedes hacer para que tu matrimonio no se hunda:

1. Piensa que el amor es una decisión

No es una mera cuestión de sentimientos. Amar implica compromiso, disciplina. En ese sentido:

2. Busca crear unidad con tu pareja

Oblígate a ti misma a interesarte en las cosas que le gustan, y trata de que él se interese en tus cosas. Habla con él para que se comprometa a interesarse en lo que es vital para ti, si es necesario.

3. Siembra amor en tu corazón y en el de él

Habla con él para que logren acuerdos a fin de cultivar la amistad y el amor entre ustedes. Ambos tengan pequeños detalles que los acerquen el uno a la otra. Los pequeños detalles de bondad suelen ser semillas de amor entre ustedes.

Advertisement

4. Busquen unirse más en los desafíos

Pocas cosas unen más, que el saber que uno cuenta con su pareja cuando sobreviene la adversidad.

5. Aprendan a comunicarse efectivamente.

Esto da para mucho, pero si das clic en el enlace, de veras puedes aprender a comunicarte.

6. Perdona y olvida

Así es, por difícil que sea esto, la verdad es que no puedes reedificar un matrimonio sobre cimientos fracturados. Si en verdad deseas que tu relación sane, piensa que debes olvidar por completo cualquier ofensa del pasado. Si no lo haces, estarás edificando sobre cimientos que, al romperse, harán que toda la casa se venga abajo.

7. Disciplínate para ver solo las cualidades buenas de tu pareja

No digo que tengas que negar sus defectos, pero para convivir con alguien toda una vida uno necesita desarrollar esa cualidad: la de dejar pasar el que le huelan los pies, o ronque, o se la pase rascándose las axilas… seguro también tendrá cualidades que compensen esos defectos.

Sí, estoy consciente de que cada uno de estos consejos, da para escribir un libro. Pero mi consejo más importante sería que dialogues con tu cónyuge y juntos tomen aquél punto que sientan que en este momento necesiten más como matrimonio, y trabajen juntos por lograrlo. De una cosa sí estoy más que seguro: cuando ambos están comprometidos y se esfuerzan, no hay relación, por dañada que esté, que no pueda sanar. Y si los problemas van más allá de su capacidad como pareja, no dejen de ir a terapia. Visitar un buen psicólogo es algo que siempre valdrá la inversión.

Advertisement
Toma un momento para compartir ...

Oscar Pech

Oscar Pech ha dedicado su vida a la enseñanza, la lectura, la escritura y la capacitación en diferentes partes de la República mexicana. Es una persona profundamente comprometida con la familia y los valores morales.