Cuida a tu familia. No la arriesgues

La falta de sentido de vida puede llevar a muchas personas a involucrarse en conductas de riesgo, exponiendo su vida y la de su familia; aquí engrano ese tema con unas pautas sobre cómo cuidar la vida.

Diana Cantor Martinez

Cuando veo una carrera automovilística o a un deportista extremo lanzarse de un puente, o en parapente, me digo, “son sensaciones extremas que jamás experimentaré”; por una sencilla razón: amo mi vida y a mi familia. Pero los deportes extremos son tan solo un ejemplo de cómo muchas personas, de manera inconsciente, ponen en riesgo sus vidas y las de sus seres queridos.

Existe una extraña atracción por el riesgo en algunas personas. Por lo general ni la misma persona sabe por qué le atraen actividades y comportamientos en la que peligra su vida, y no hablamos tan solo de deportes extremos, nos referimos a textear mientras se maneja, la adicción a las drogas y el alcohol, etcétera. Una de las causas más recurrentes es la falta de un sentido de vida; sin embargo, esto podría cambiar de manera sustancial al conformar una familia y ser padres. Sin duda muchos han encontrado en sus hijos el motor para seguir adelante.

Nuestra vida y la de nuestra familia es el más preciado regalo que nos ha sido encomendado por el Creador, por lo cual debemos cuidarla y preservarla, evitando exponernos a riesgos inútiles; lee a continuación cómo:

El alcohol, un mal consejero

. Una de las conductas más nocivas en las que se involucran ciertas personas es el consumo desmedido y descontrolado de licor. Muchos lo consumen hasta quedar en un estado alterado de conciencia, en el que no pueden controlar lo que hacen. Hay quienes llegan a agredir de gravedad a su familia y, lo peor, es que al día siguiente no recuerdan lo sucedido. Si se siente identificado, busque ayuda.

Las señales de tránsito

Es un asunto que parece obvio; sin embargo, desafortunadamente hay quienes infringen de forma constante las señales de tránsito, y algunos las cumplen por evitar la multa pero ignoran su verdadero propósito, “proteger su vida y la de los demás”. Esto aplica tanto para conductores como para peatones: cruce por el paso de cebra (paso peatonal), use el puente peatonal, no conduzca embriagado, no dé vueltas prohibidas, no rebase los límites de velocidad; en fin, sea responsable con su vida, la de su familia y la de su comunidad.

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La seguridad en casa

. Es vital garantizar a sí mismo y a su familia un lugar seguro para vivir. Hace días visité a un joven que aspiraba a ingresar a trabajar a una entidad financiera en mi ciudad; al entrar a la vivienda identifiqué de inmediato varios riesgos a los que estaban expuestos sus hermanos menores, de 4 y 6 años, incluso él mismo; su casa está ubicada en una loma, y en la sala se apreciaban dos ventanales inmensos que daban casi a un precipicio, que no tenían rejas y ni un vidrio de seguridad. A esto me refiero cuando hablo de la seguridad en casa, evalúe los riesgos: conexiones de energía averiadas, objetos que puedan caer. Los niños pequeños experimentan por naturaleza, así que no deje nada a su alcance con lo que puedan lastimarse. Antes de dormir revise que las puertas y ventanas estén bien cerradas y dé vuelta a la llave del suministro de gas. El artículo “Consejos para enfrentar una situación de emergencia” contiene útiles ideas en caso de emergencia.

La seguridad en la calle

. Si bien es casi imposible controlar la inseguridad a la que nos enfrentamos día tras día en la calle, lo que sí podemos hacer es asumir comportamientos seguros: evite salir a altas horas de la noche solo, no permita que sus hijos adolescentes salgan o regresen tarde a casa, no transite por lugares oscuros y poco concurridos, aléjese de riñas callejeras, cuando camine por la calle voltee de forma periódica a mirar, así podrá reaccionar a tiempo en caso de ser seguido por alguna persona extraña; en la calle nunca suelte de su mano a sus hijos menores de cinco años, y no luzca sus joyas en la calle.

En el automóvil

. No deje a sus hijos pequeños ni a sus mascotas solos dentro del automóvil, ni siquiera por un momento. Las mujeres deben ubicar su cartera debajo de la silla delantera del vehículo, para evitar tentaciones al ladrón; nunca se baje del auto dejándolo prendido, y al momento de estacionarlo en su garaje cerciórese de saber dónde se encuentran sus hijos, más aún si son pequeños. Lamentablemente hace muchos años en mi ciudad un hombre atropelló a su bebé de dos años al intentar estacionar el automóvil en reversa.

Transacciones financieras

. Evite hablar a otros acerca de sus finanzas. Cuando se disponga a hacer algún retiro importante de dinero solicite el acompañamiento de la policía (en mi país hay este servicio); nunca retire dinero de un cajero a altas horas de la noche o solo, y jamás cuente el dinero en la calle.

No confíe sus hijos a otras personas

Algunos permiten que sus hijos pequeños salgan de paseo con amigos o familiares; en mi concepto ningún padre debería permitir que su hijo menor de cinco años salga en plan de diversión con otras personas, a menos de que se trate del núcleo familiar, abuelos o tíos. He sabido de muchos casos con desenlaces fatales.

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De vacaciones

. Tal vez recuerde sus vacaciones antes de tener hijos, quizás bronceándose en la playa o en una cabaña frente a un lago; de seguro ahora que es padre sus vacaciones son más divertidas y gratificantes, pero exigen mayor atención y cuidado en especial en la playa o en la piscina.

Visite regularmente al médico

y haga que sus hijos y en general su familia lo hagan, recuerde aquel viejo adagio: “Es mejor prevenir que lamentar”.

Enseñe a sus hijos pequeños el nombre completo

, el suyo propio, la dirección y el número telefónico de casa, pues en caso de extravío le será altamente útil.

Alguien pensaría que puede ser paranoia, pero no, la vida es valiosa y hay que cuidarla. En lo que a mí respecta, por último, jamás permitiría que mi hijo se aficione a la práctica de un deporte extremo.

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Diana Cantor Martinez

Hay un momento de la vida en que descubrimos que necesitamos un cambio para poder avanzar y crecer reconoce el momento y no pierdas la oportunidad.