Cuidemos a nuestros niños del ‘grooming’, el nuevo peligro en la red
El fenómeno del grooming casi no se conoce, es un nuevo modo de atrapar a menores de edad con el fin de producir pornografía, secuestrarlos y prostituirlos, necesitamos información al respecto para proteger a nuestros niños.
Daniela Lopez
Hoy en día la tecnología y el internet están al alcance de todos, esto ha hecho posible que durante los últimos años nos hayamos familiarizado con términos como sexting y ciberbullying. Como padres, necesitamos estar siempre al tanto de lo que pasa en la red, por lo cual el objetivo de este artículo es hablarte de un fenómeno de reciente aparición, del cual se sabe poco: el grooming.
¿Qué es el grooming?
Este término en inglés hace referencia a las acciones que lleva a cabo un adulto por internet para ganarse la confianza y amistad de un niño, haciéndose pasar por otro niño o niña, con el objetivo de pedirle imágenes o actos de contenido sexual o erótico para satisfacerse sexualmente.
Esto se presenta a través de redes sociales, chats, correo electrónico, teléfonos móviles y webcam. Basta con un clic en cualquiera de estos medios para que los niños o jóvenes sean enganchados.
Como podemos notar, esto da inicio en el ciberespacio, pero desafortunadamente puede trascender al mundo “real” y convertir a los niños en víctimas de trata y prostitución, pornografía infantil o cualquier otro tipo de maltrato.
De acuerdo con el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), la captación de menores en la red con fines sexuales puede llevar unos minutos, horas, días o meses, según los objetivos y necesidades del agresor así como a las reacciones de los niños.
Según las estimaciones de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), cada año, cerca de 1.2 millones de niños, niñas y adolescentes son víctimas de trata en el mundo. Es el tercer delito más lucrativo, después del narcotráfico y tráfico de armas, generando entre USD 8,000 millones y 10,000 millones al año.
Según investigaciones de la Organización de las Naciones Unidas, algunos delincuentes llegan a tener hasta 200 conversaciones con menores de edad en su lista de chats, redes sociales o mensajería instantánea.
Las técnicas que emplean estos delincuentes son muy seductoras, se involucran de manera tal con las víctimas, que logran convertirse en sus amigos, brindándoles confianza, conociendo sus gustos, sus conflictos, y así consiguen que les proporcionen datos personales que pueden utilizar para extorsionar al niño; obtienen todo lo necesario para permanecer cercanos a los menores y lograr su objetivo.
Una vez que son atrapados, comienza el acoso, amenazando a la víctima con hacer daño a su familia o publicar las imágenes enviadas para obtener cada vez más material pornográfico o buscan también encontrarse físicamente con el menor para abusar sexualmente de él.
¿Qué puedes hacer para prevenir que esto le ocurra a tus niños?
1. Mantente informado
Lo básico para prevenir el grooming es estar informado, ya que los riesgos son grandes. Es indispensable ayudar en la difusión de este tema comenzando con los que nos rodean: hijos, sobrinos, compañeros de escuela, maestras, etc.
2. Habla con tus hijos
De nada sirve mantener a los niños aislados de las redes sociales y la tecnología. Recordemos que pueden tener acceso a Internet en cualquier lado, lo mejor es explicarles qué es el grooming y sus consecuencias. Por ejemplo: un punto muy importante es decirles que no deben compartir fotos o videos personales en la red, mucho menos acceder a enviar fotos o a encender la webcam para quitarse la ropa.
3. Ayuda a tus hijos a cuidarse a sí mismos
Es importante que los niños y jóvenes adquieran las herramientas necesarias de autocuidado en Internet, enseñándoles que no contacten con gente desconocida en las redes sociales, no proporcionen datos personales como por ejemplo: nombres de los padres, escuela a la que asisten, si tienen hermanos, números de teléfono, entre otros. Este corto video te muestra un caso espeluznante.
4. Escucha a tus hijos y si es necesario, denuncia
Es muy importante que los niños sientan la confianza para hablar si algo como esto les llega a suceder. Si la situación se presenta, no culpes a tu hijo, confía en él, cree en lo que te cuenta y de inmediato haz una denuncia a través de la policía cibernética del país donde te encuentras o ante las autoridades competentes.
Recuerda que desde casa formamos la autoestima de los niños platicando con ellos, brindando momentos de calidad, confianza, respeto y amor. Sólo así podemos darles herramientas para que no caigan en las manos de gente sin escrúpulos y aprendan a cuidar de sí mismos. Todos podemos convertirnos en adultos protectores que cuiden y vigilen el sano desarrollo de los niños. Mira este video de la Unicef.