¿Dejarás a tu esposa por una mujer más joven que ella?

No te dejes llevar por lo superfluo y el físico, porque eso se acaba. Valora el amor de tu esposa.

Diana Cantor Martinez

Carlos y Ana María llevaban 16 años juntos entre su noviazgo y matrimonio. Él tenía cerca de 48 años y ella 43. Con el paso de los años y las ocupaciones, Ana María se olvidó un poco de sí misma, había subido de peso y ya no se preocupaba mucho por su arreglo personal. El trabajo fuera de casa y las tareas del hogar la habían consumido. Por su parte, Carlos quién también trabajaba fuera de casa, se quejaba constantemente de que Ana María ya no era la misma mujer de la que él se había enamorado.

En las reuniones familiares y de amigos se les veía distantes y aburridos, era fácil notar que algo entre ellos no iba bien. Un día Ana María me pidió que nos encontráramos para conversar. En nuestra larga conversación de esa tarde me confesó, muy conmovida, que Carlos salía con una mujer mucho más joven y bonita que ella.

El tiempo pasó y el divorcio vino inevitablemente. Yo acompañé especialmente a Ana María en su duelo afectivo. Salíamos de compras, a tomar café o al cine, tratando de distraerla un poco del dolor que la acongojaba. Ana María tenía más tiempo libre que antes, así que decidió inscribirse en un gimnasio; bajó de peso, decidió hacer un cambio de imagen y compró algo de ropa nueva. Se le veía diferente, más bonita, aunque con una tristeza infinita en la mirada.

Yo no tenía mucho contacto con Carlos, pero a través de amigos en común me enteré de que vivía en pleno romance con aquella chica joven.

Pasaron dos años, y durante este tiempo vi renacer a Ana María, creo que al principio impulsada por su dolor, y luego porque encontró en sí misma un motivo para seguir con la vida. Siempre admiré que no se refugiara en ningún hombre para superar su tristeza: sólo caminó y sigue caminando fortalecida en Dios. Desde hace dos meses, Carlos la llama todos los días para pedirle perdón. Ana María sabe que necesita sanar su corazón antes de tomar una decisión.

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¿Qué motiva a un hombre a fijarse en una mujer más joven que su esposa?

Recientemente escribí un artículo titulado “Un hombre que abandona a su familia siempre se arrepiente“. Mientras lo escribía pensaba en los motivos que llevan a un hombre a abandonar a su esposa y a sus hijos. Entre esos motivos encontré que un alto porcentaje de hombres maduros se inclina a abandonar a sus esposas por mujeres más jóvenes. ¿Por qué sucede esto? ¿Es que falta amor en sus vidas? ¿Es esa la motivación real?

  • Los hombres suelen ser muy visuales y fácilmente se sienten atraídos por la belleza física o exterior de una mujer.

  • Tal vez sienten que la juventud de esta mujer les imprime energía y vigor.

  • Algunos otros hombres se sienten orgullosos y exhiben a la chica como un trofeo, mostrando al mundo que ellos todavía tienen dotes de conquistadores.

Pero en la mayoría de los casos, toda esta novedad y sentimientos infundados pasan pronto y entonces viene el vacío y es cuando el hombre mira atrás tratando de recuperar a su esposa. Este es el punto de reflexión.

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“Mi esposa no es la misma mujer de la que me enamoré”

En mi historia, éste era el argumento de Carlos. En realidad no comprendo por qué un hombre espera que su esposa de 40 años se vea tan linda físicamente como cuando tenía 24 años y no tenía hijos ni marcas en su piel causadas por los años, los sufrimientos, las dificultades, quizás por las lágrimas de alegría y de tristeza. Se necesita ser maduro para entender que todos, sin excepción, envejecemos, y que con el paso de los años sólo queda la belleza interior. ¿Qué puedes hacer si te ves enfrentado a esta situación?

Las mujeres valoran la vulnerabilidad de un hombre

Cuando un hombre es capaz de sincerarse ante su esposa y decirle lo que está sucediendo, ganará su corazón para siempre. Exprésale a tu esposa lo que sientes, háblale con amor y dulzura acerca de lo que quisieras ver en ella, quizás quieres volverte a enamorar de ella misma, pero necesitas estar motivado.

En ocasiones, como en el caso de Ana María, es muy difícil reparar el daño. No te dejes llevar por lo superfluo y el físico, porque esto acaba, aprende a valorar el amor de tu esposa, sus intereses y logros en común y lo que ella es como ser humano, porque es esto lo que la acompañarán para siempre, mientras para ti y para ella las marcas del tiempo aparecerán inevitablemente. Hay un momento de la vida en que descubrimos que necesitamos un cambio para poder avanzar y crecer. Reconoce el momento y no pierdas la oportunidad.

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Diana Cantor Martinez

Hay un momento de la vida en que descubrimos que necesitamos un cambio para poder avanzar y crecer reconoce el momento y no pierdas la oportunidad.