El tesoro más valioso que puedes tener: tus hijos
¿Qué es lo que tienes que hacer para que tus hijos sean personas de bien? Aquí cuatro consejos para lograrlo.
Erika Otero Romero
Umberto Eco dijo de la paternidad que: “En lo que nos convertimos, depende de lo que nuestros padres nos enseñan en los ratos perdidos, cuando no están tratando de enseñarnos.”
Después de una noticia en la televisión, mi madre, hermana y yo empezamos a hablar acerca de cómo la crianza de los hijos ha cambiado de cuando nosotras éramos niñas en comparación a los tiempos actuales. Y es que basta con que abras la página de algún periódico en Internet para que te des cuenta de noticias que te hacen cuestionarte sobre lo que está pasando con las familias de ahora. Para ejemplificar lo que he dicho te comparto un caso que se repite en todo el mundo. El año pasado en Dinamarca, Lisa Borch, de 15 años junto con su novio, asesinaron a la madre de la menor. Ahora ambos pagan cárcel por el delito cometido. Y claro: esas notas rojas infestan el ciberespacio.
Por otra parte, existen casos que hacen que se tenga un poco de fe en la humanidad, parecerá raro que una foto tan simple donde se observa a un padre empapado por la lluvia, protege con un paraguas a su hijito, sin importar lo mojado que él va. Aunque no lo creas la foto se hizo viral en cuestión de minutos, porque es tierna, conmovedora, y nos da un ejemplo perfecto de lo que es ser un padre de familia. Es la manifestación más clara de la capacidad de sacrificio, amor, entrega y cero egoísmos de parte de un padre hacia su pequeñín.
¿Por qué ese contraste tan marcado entre estos casos? En buena medida, lo que pasa es que los hijos no obedecen ni respetan a sus padres porque éstos no ponen límites, normas y disciplina por temor a hacer sufrir a sus hijos. Muchos padres de ahora temen dar el correctivo adecuado a sus hijos por miedo a los reproches que puedan venir de ellos o algún familiar que no vea con buenos ojos la educación y disciplina que han elegido para corregir a sus hijos.
¿Qué se puede hacer para criar hijos felices que sean adultos de bien?
1. Cuida tus pasos
No hace mucho vi un dibujo que muestra a un ratón adulto, quien lleva de la mano a su pequeño hijo ratoncito. Agarrada a su colita una serie de trampas para ratones. En la leyenda de la imagen el padre le dice a su hijo: “Cuida por donde caminas”, y el hijo responde: “Ten cuidado tú. Recuerda que yo sigo tus pasos”. Eso es justo lo que te digo yo ahora, cuida tus pasos, tus hijos están al tanto de tus errores como de tus aciertos para tomarlos de ejemplo. Corrige tus errores y enséñales que si tú te has caído, no existe necesidad para que ellos repitan tus mismas faltas.
2. Corrige a tiempo
Muchos padres dejan acumular falta tras falta a la espera de que sus hijos cambien. Esto es un error, ya que si no corriges a tiempo, tu hijo no sabrá que está haciendo mal, y cuando venga la reprimenda va a preguntarte quizá de manera airada la razón por la cual lo estás corrigiendo ahora, si antes no lo habías hecho. Es acá donde es importante que hables claro y eduques a tiempo antes que la educación de tu hijo se salga de tus manos.
3. No amenaces
Así como es malo prometer y no cumplir, es un gran error amenazar con castigar y jamás hacerlo. Si caes en esta práctica, pronto tendrás a un pequeño tirano que sabrá la manera de manipularte y salirse con la suya cada vez que quiera. Toda acción, buena o mala, amerita consecuencias. No temas, en tanto tú eres la madre, es tuyo el poder, el deber y el derecho de criar hijos de bien.
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4. Comparte tiempo de calidad
Te toca trabajar duro. Eso es de reconocerse. Sin embargo, lo justo es que trabajes el tiempo que reglamente tu empleo: 8 o 9 horas diarias de lunes a viernes, o sábado hasta el mediodía, el resto de tiempo dedícalo a las únicas personas que van a estar contigo hasta el final de tu tiempo, tu familia.
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Amar no es solo procurar comodidades materiales, lo más valioso que puedes dar a tu familia es tu presencia, ejemplo y tiempo de calidad.