Herencia sin problemas: Beneficios y pasos a seguir para hacer un testamento.
El mayor beneficio de dejar un testamento claro y preciso es proteger y evitar las fricciones entre los miembros de tu familia.
Elizabeth González Torres
¿Alguna vez hemos escuchado ese famoso dicho: “Lo único que tenemos asegurado en esta vida es la muerte”? Con seguridad, en más de una ocasión nos hemos sorprendido pronunciando esta frase sin prestar de verdad atención a su contenido total.
Vivimos en una época en que se ha buscado con mayor insistencia encontrar respuestas y formas de aceptar la muerte como una etapa más de la vida. Hombres y mujeres, en sus diferentes áreas de estudio, se han encargado de investigar a profundidad el tema de la muerte como un proceso natural por el que todos, tarde o temprano, tendremos que pasar. Se ha hablado mucho de terapias creadas para enfrentar el dolor, la depresión, el enojo, la frustración y un sinfín de emociones que experimentamos al ver morir a un ser querido e incluso, al vernos morir a debido a alguna enfermedad.
De la misma manera, a menudo solemos escuchar la importancia que tiene el que dejemos un testamento antes de morir y el gran problema que con ello le evitaríamos a la gente que amamos. Sin embargo, ¿cuántos estamos verdaderamente conscientes de la relevancia y lo propicio que es dejar un testamento antes de nuestra muerte, o la de alguien más?
Probablemente, cuando hablamos de un padre, una madre de familia o incluso de una persona soltera que cuenta con cierta cantidad de bienes que proporcionar a quienes le rodean tras su fallecimiento, es por completo trascendental el pensar en cuál podría resultar la mejor forma de repartir sus bienes y a quién dejarlos.
La mayoría de las personas evitamos pensar en esta realidad, ya sea porque tenemos cierto temor a la muerte o porque nos parece demasiado complicado, costoso y tedioso el hecho de asistir ante la autoridad facultada para que nos auxilie en la elaboración de un testamento. Si pudiéramos ver los cientos de expedientes que se abren cada día al interior de los juzgados por falta de un testamento, si pudiéramos conocer de antemano los desgastantes resultados que deja un juicio derivado de dejar intestada una casa, un terreno y muchos otros bienes, comprenderíamos que realizar un simple gasto e invertir un poco de tiempo, pueden ahorrarles años, dinero, enfrentamientos, peleas e incluso separaciones a nuestra propia familia.
De modo que hablemos de manera concreta sobre cuáles son los pasos a seguir para dejar una herencia sin problemas:
Hagamos un análisis de la repartición que haremos de nuestros bienes, de tal forma que no generemos mayores conflictos. Tomémonos el tiempo necesario para saber de qué manera debemos distribuir nuestras pertenencias entre la gente que formará parte de nuestro testamento. Por lo regular, los padres de familia que cuentan con más de dos hijos se enfrentan a la dificultad de tener que repartir de manera equitativa los mucho o pocos bienes con los que cuentan. En su afán por querer ser justos y dejarles a todos sus descendientes por igual, en más de una ocasión terminan creando conflictos innecesarios. Debido a esto, se recomienda que no se herede un mismo bien a más de una persona, sin importar si son hermanos, ya que pueden surgir diversas inconformidades y problemas a la hora de tomar posesión del mismo. Quizás decretar la venta del bien o los bienes dentro del mismo testamento y la repartición equitativa del dinero que genere, podría ser una opción un poco menos complicada.
Seamos cuidadosos con la redacción que le demos a nuestro testamento. Podríamos pensar que la redacción que le demos a nuestro testamento es en lo que menos debemos poner atención. Sin embargo, muchos problemas que se presentan al momento de tratar de hacer cumplir un testamento son las ambigüedades, confusiones o diversas interpretaciones que se le pueden dar a las palabras mal empleadas y a las ideas incorrectamente expresadas. Es por eso que tenemos la obligación de asegurarnos que nuestras palabras escritas manifiesten con claridad nuestra voluntad.
Consultemos a un abogado una vez que tengamos el contenido y desarrollo de nuestro testamento. Nunca está de más que consultemos a un abogado que sea de nuestra absoluta confianza en cuanto al contenido y desarrollo de nuestro testamento. Sus conocimientos jurídicos pueden ayudar a esclarecer y precisar nuestras ideas, de tal forma que el testamento quede acorde con lo que dictan las leyes del país en el que vivimos.
Investiguemos con detenimiento quién es la autoridad facultada para auxiliarnos y darle validez a nuestro testamento. Dependiendo del lugar en el que vivamos tenemos que asegurarnos de que la autoridad ante la que estamos recurriendo para plasmar nuestro testamento esté plenamente facultada para darle validez. En México, por ejemplo, existe la figura del notario público, que es la autoridad facultada para poder conferirle fe pública a los testamentos, es decir, darles certeza y seguridad jurídica.
Sepamos los tipos de testamentos que se acomoden a nuestras necesidades y economía. Igualmente, dependiendo del país en el que nos encontremos debemos tratar de conocer cuáles son los tipos de testamentos que contempla la legislación del lugar en el que vivimos y cómo cada uno de ellos se ajusta mejor a lo que deseamos, e incluso a nuestro presupuesto. El Código Civil Federal mexicano contempla diversos tipos de testamentos, tal como el cerrado, el público, el privado, etcétera, los cuales exigen diferentes tipos de requisitos para que se decrete su validez.
Por último, es necesario mencionar que la selección cuidadosa de las personas a quienes haremos saber sobre la existencia y ubicación de nuestro testamento será un resguardo que, en cierta medida, puede contribuir a una mejor protección y su pronto cumplimiento.
Elizabeth González Torres
Es abogada egresada de la Universidad Autónoma Metropolitana. Actualmente estudia una licenciatura en Creación Literaria en la Universidad Autónoma de la Ciudad de México. Considera que el mayor tesoro que tiene en la vida es su familia.
