Mateando con tata Dios. La Semana Santa celebra a Jesús vivo, no muerto

Apronta el mate y desayuna en Su Presencia, deja que esta semana sea tan especial como el amor que Jesucristo te tiene.

Marta Martínez Aguirre

La Semana Santa está llena de imágenes contrapuestas. Se puede ir del ruido y el bullicio de la entrada triunfal en la ciudad de Jerusalén a la silenciosa y grisácea derrota de la piedra obstruyendo una tumba prestada. Al menos esto es así para quienes todavía no comprenden que el triunfo de Jesús nada tiene que ver con las ideologías del mundo. Mateando con tata Dios. La Semana Santa celebra a Jesús vivo, no muerto.Por eso, te traigo estas meditaciones para que te prepares y seas testigo presencial del amor de Dios, y reflexiones sobre esta última semana de Jesús en la tierra:

Jueves 17 de abril

La última cena, Getsemaní, traición de Judas y arresto de Jesús (Mt 26:17-19; Mr 14:12-52; Lc 22:1-23:56)

Deja de lado la urgencia y los preparativos en casa porque vas con los discípulos a preparar la Pascua. Quieres que todo esté listo, la mesa, los alimentos, el ambiente, la ropa, pero lo más importante es saber que estarás a su lado, cenando con Él.

Reflexión. ¿Recuerdas a Judas? No quieres ser la que lo entregas, pero ¿lo cambias por cosas que son efímeras, porque quieres ser aceptada en este mundo consumista? Jesús te ha invitado a cenar, su amor es tan grande que te mira con ternura y te llama amiga. Te dice que te ha elegido, y parte el pan, te da un trozo y te da de su copa. Te invita a compartir su destino, a demostrar con tus hechos que le crees hasta el final de los tiempos.

Aplicación. Con el gesto del pan y de la copa me invitas a partirme por amor a los demás, como tú lo has hecho. Me llamas a darme a los que tienen hambre y sed de amor, de justicia, de paz y de acogida. Me dices que tú convocas, reúnes, ¿seré igual?, o por el contrario, ¿seré de las que dispersan con sus comentarios negativos?, ¿mis palabras serán amables?

Advertisement

Jesús se acercó a los despreciados, a los rotos y pecadores; en sus comidas incluyó a aquellos que en su tiempo eran rechazados y excluidos. ¿Hago distinciones en mi familia?

Quiero que este jueves sea distinto, voy a acercarme a aquellos con los que hace tiempo no tengo contacto; voy a hacerme pan y voy a darme.

Viernes 18 de abril

Juicio, crucifixión y sepultura de Jesús (Mt 26:20-27:61; Mr 14:53-15:47; Lc 22:54-23:55)

En esta mañana te invito a detenerte para meditar sobre el amor de Dios. Imagina qué dolor debe haber tenido al ver morir a su único Hijo. La muerte de Jesús es un regalo que el Padre te hace.

Reflexión. Te ha dicho, con ese dolor tan grande, que te ama. ¿Eres capaz de cantar con Él un “himno de esperanza”? Porque aunque la cruz sea grande, no está todo perdido en los momentos de dificultad. Cuando te oprime la ansiedad y los miedos oscurecen tu cielo, ¿lo invitas a entrar en tu vida, pones tu confianza en sus promesas?.

Advertisement

Aplicación.No voy a poner mis ojos solamente en la imagen dolorosa del sufrimiento de Jesús, sino que pondré atención a su alto precio redentor. Es esa redención pagada en sangre la que me debe llenar de una viva esperanza. En este día me invitas a recorrer un camino de fe y esperanza, porque ese es el verdadero camino espiritual.

Hay momentos en los que parece que una roca inmensa se corre sepultándome en medio de mis angustias más profundas, pero hoy me dices que te haces presente, lo cual me revela que tienes todo bajo control.

Sábado 19 de abril

Jesús en la tumba (Mt 27:62-66; Lc 23:56)

Deja de lado el activismo para quedarte a su lado, contemplando en el silencio la entrega de Jesús. Es el día que Dios eligió para hacer silencio y acariciar tu alma.

Reflexión. Seguro que sabes bien el sufrimiento de la espera, velar duele, saber que esa vida que tanto amas ha partido y no estará al menos por un tiempo a tu lado. ¿Eres capaz de esperar ese lapso con fe?, ¿te unes al sufrimiento de amigos y vecinos, o eres de las que prefieren evadir el dolor ajeno?, ¿mantienes la fe en la espera al ver pasar los años y que el milagro no sucede?.

Advertisement

Aplicación.En medio de la noche más silenciosa te espero y espero, junto a miles de cristianos despiertos, que la vida triunfe y nos cuentes cómo es llegar a la orilla de la libertad y la paz infinitas.

Tu gracia sublime es parte de este silencio donde la roca no vence, voy a creerlo, sin duda alguna. No estás muerto, aunque el mundo diga lo contrario y quieran decir que has sido derrotado, yo decido aferrarme al amor y a la esperanza. Enséñame hoy, en medio de este silencio, a celebrar la vida y a darme en obras a los que me rodean, para regalarles tu triunfo, que será proclamado en horas.

Domingo 20 de abril

La resurrección (Mt 28:1-16; Mr 16:1-20; Lc 24:1-53)

El Padre eterno es un Dios de sorpresas. La resurrección de Jesús es una invitación a participar aferrados a la esperanza y a la alegría, porque con ella tus seres queridos vivirán para siempre y podrás volver a verlos.

Reflexión. Frente a tus alegrías cotidianas, que son efímeras y frágiles, ¿este milagro te refuerza la fe y sabes que no has puesto tu esperanza en un muerto, sino en un Dios vivo? Te preguntas en este gesto, ¿cuáles son tus sueños sepultados?, ¿hay tal vez metas que dejaste de soñar?, ¿horizontes que no quieres cruzar por miedo al fracaso? Quizás es tiempo de recorrer la roca de los temores y fijarte nuevas metas, y empezar a creer que todo es posible.

Advertisement

Aplicación. Me dices que tenga esperanza en los imposibles, por eso voy a luchar por mi familia y por todo aquello que parezca marchito. Voy a quitarle el polvo a las fotocopias de ese examen que demoro en dar, voy a decidirme por esa tarea que me ofrecieron y tuve miedo. Es otoño y, sin embargo, me dices que llene mi vida de brotes nuevos.

¿Saben, amiga lectora y amigo lector? Celebrar esta semana es celebrar que fuimos creados para vivir y sentir con gozo el amor más grande del mundo, y que la resurrección no es una tímida promesa de Dios para seducirnos.

¡Verdaderamente Cristo ha resucitado!

===

NOTA: El punto de vista del autor no necesariamente representa la opinión editorial.

Advertisement
Toma un momento para compartir ...

Marta Martínez Aguirre

Marta Martínez es de Uruguay. Posee una licenciatura en Psicología, y un posgrado en Logoterapia. Ama todo lo que hace y adora servir. Es especialista en atención psicológica domiciliaria. Contacto: