7 irresistibles maneras de decirle cuánto le amas
El día del amor está a la puerta y es probable que aún estés planeando algo especial para compartir con tu pareja, o para enamorar a quien posee cada uno de tus suspiros. Aquí encontrarás siete maneras irresistibl
Mariana Robles
A lo largo de la historia, expresar las profundidades del amor a través de la poesía ha sido un recurso casi ineludible y, por cierto, en muchos casos, infalible cuando de conquistar al ser amado se trata.
Por desgracia, en este mundo ya poco habituado a la contemplación, casi no recurrimos a la poesía. Pero, imagina, ¿y si para lograr el embeleso del amor, contaras con la ayuda de los más grandes poetas? Ellos, pese a haber muerto, nos legaron millones de versos maravillosos para convocar, enriquecer y eternizar el amor. Aquí comparto contigo siete poemas escritos por algunos de los más grandes poetas de habla hispana:
1. Definición del amor, de Francisco de Quevedo (1508-1645)
Francisco de Quevedo (que, créeme, tenía un nombre mucho más largo en realidad) nació en Madrid, España. Fue parte del “Siglo de oro español”. Es especialmente reconocido por su obra poética, por el ingenio y la elegancia de sus versos. Uno de sus sonetos más conocidos es éste, que define el amor:
Es hielo abrasador, es fuego helado,
es herida que duele y no se siente,
es un soñado bien, un mal presente,
es un breve descanso muy cansado.
em,Lee aquí: Definición del amor
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2. Detente, sombra de mi bien… de Sor Juana Inés de la Cruz (1651-1695)
Juana Inés de Asbaje, mejor conocida como Sor Juana Inés de la Cruz, nació en San Miguel Nepantla, hoy Estado de México. Fue una mujer religiosa y quizá la más importante exponente de la literatura novohispana. Probablemente su obra más popular sea aquellas redondillas que inician: “Hombres necios que acusáis a la mujer sin razón…” pero, no temas, también escribió ardientes y bellos poemas de amor. Te comparto uno de ellos, que puedes leer con tu pareja confiando en que no motivará recriminaciones de género entre ustedes.
Detente, sombra de mi bien esquivo
imagen del hechizo que más quiero,
bella ilusión por quien alegre muero,
dulce ficción por quien penosa vivo.
Lee aquí: Detente, sombra de mi bien…,
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3. Amor eterno, de Gustavo Adolfo Bécquer (1836-1870)
Saltamos casi dos siglos de poesía, para llegar a otro poeta español quien fue uno de los últimos escritores pertenecientes al movimiento político y cultural conocido como el “Romanticismo”. Sobre todo después de su muerte, su obra fue reconocida como un referente obligado en la literatura hispana. Es muy conocido por sus bellas rimas, aquí te comparto alguna de ellas:
“Podrá nublarse el sol eternamente;
Podrá secarse en un instante el mar;
Podrá romperse el eje de la tierra
Como un débil cristal.
¡Todo sucederá! Podrá la muerte
Cubrirme con su fúnebre crespón;
Pero jamás en mí podrá apagarse
La llama de tu amor”
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4. ¿Te acuerdas?, de Alfonsina Storni (1892-1938)
Regresamos al continente americano para llegar a esta poetisa argentina (aunque nació en Suiza, siempre se reivindicó argentina). Su obra poética se caracteriza por expresar gran intensidad de sentimientos, que probablemente se deba a su propia experiencia con el dolor (provocado por diversas enfermedades que enfrentó) y el sufrimiento (manifestado con grandes y profundas depresiones) a lo largo de su vida. Pese a ello, el empeño de sus días fue ser feliz, amar y ser correspondida. Aquí uno de sus sonetos:
Mi boca con un ósculo travieso
buscó a tus golondrinas, traicioneras,
y sentí tus pestañas prisioneras
palpitando en las combas de mi beso.
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5. Soneto 89, de Pablo Neruda (1904-1973)
Pablo Neruda, es en realidad el seudónimo de Ricardo Eliécer Neftalí Reyes Basoalto, pero dejémoslo en Pablo Neruda. Es un poeta chileno que no requiere presentación. Escribió a todo lo que amaba: su país, la libertad, la naturaleza, las cosas pequeñas y sencillas y, por supuesto, escribió a Matilde Urrieta, el amor de su vida. El soneto que te comparto es uno de ellos, y habla de un amor intenso y maduro, fundado no en la pasión, sino en la paz de los muchos años juntos.
Quiero que lo que amo siga vivo
y a ti te amé y canté sobre todas las cosas,
por eso sigue tú floreciendo, florida,
para que alcances todo lo que mi amor te ordena,
para que se pasee mi sombra por tu pelo,
para que así conozcan la razón de mi canto.
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6. Centímetro a centímetro, de Rubén Bonifaz Nuño (1923-2013)
Rubén Bonifaz Nuño fue un gran poeta contemporáneo nacido en México. Tiene la asombrosa virtud de expresar sentimientos muy intensos y complejos, a través de palabras sencillas y expresiones coloquiales. Es uno de esos poetas que, cuando lees su obra, no puedes evitar pensar que escribió de manera exacta lo que tú has pensado o sentido muchas veces, y nunca lograste poner en palabras. Centímetro a centímetro, seguro te encantará:
Voy descubriendo a diario, convenciéndome
de que estás junto a mí; de que es posible
y cierto; que no eres,
ya, la felicidad imaginada,
sino la dicha permanente,
hallada, concretísima; el abierto
aire total en que me pierdo y gano.
Lee aquí: Centímetro a centímetro
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7. Fábricas de amor, de Juan Gelman (1930-2014)
Juan Gelman nació en Argentina pero vivió muchos años exiliado en México, donde murió. Vivió las injusticias de la dictadura militar argentina y buena parte de su obra está influenciada por el dolor de esa experiencia. Se le considera uno de los grandes poetas contemporáneos de habla hispana. Comparto contigo este hermoso poema, que sin duda ayudará a fabricar el amor con tu pareja:
Y construí tu rostro.
Con adivinaciones del amor, construía tu rostro
en los lejanos patios de la infancia.
Albañil con vergüenza,
yo me oculté del mundo para tallar tu imagen,
para darte la voz,
para poner dulzura en tu saliva.
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Pues bien, ahora lúcete regalando uno de estos poemas a tu pareja o, mejor aún, lean algunos juntos; deja que el poder de la poesía llene de pasión y romanticismo el aire entre tus ojos y los suyos.