No permitas que después de la boda, termine el noviazgo
Mucho se habla de cómo reconquistar a tu pareja, pero muy poco de cuál es el origen de esa necesidad. Una pareja feliz es aquella capaz de seguir con ese enamoramiento de novios, aún después del matrimonio.
Erika Gaytán
“Al casarte, termina tu noviazgo y con él, toda su magia”, comentaban un grupo de chicas en una cafetería. La relación sufre un cambio, es cierto, las preocupaciones y las actividades se modifican, sin embargo la falta de enamoramiento no debe ser una consecuencia. Mi amiga Dalia es un claro ejemplo de esto.
Ella y su esposo se casaron a temprana edad, tuvieron a su primer hijo y siete años más tarde ya eran padres de tres; esto les llevó a trabajar duro y aprender muy rápido a ser padres. Los dos siempre caminaron juntos con sus hijos, su casa y sin descuidar nunca su relación de pareja. No se repartían los roles, los intercambiaban apoyándose uno del otro en todo lo que hacían.
La confianza de ambos, no solo en el tema amoroso, sino en todos los aspectos, ha sido pieza fundamental en sus más de veinticinco años de muy feliz matrimonio, así como el apoyo mutuo, en todos los ámbitos. Los besos, detalles, comunicación y cortejos siguen estando presentes. En el momento en que sus hijos crecieron, ella decidió retomar sus estudios con apoyo de su familia y, a pesar de todas estas actividades, su matrimonio sigue siendo un noviazgo eterno, todo gracias a que ellos mismos no han permitido que se acabe esa “chispa”.
¿Qué puedes hacer para tener un noviazgo eterno?
1. Transfórmate en novia
Cuando te pretendía tu ahora esposo, no importaba la hora o lo cansada que te encontrabas, siempre lucías deslumbrante. Así que deja a un lado los pretextos de los hijos, los tiempos, el cansancio, el trabajo y el quehacer. ¡Explota tu belleza! Recuérdale cada día por qué se enamoró de ti.
2. Ponte en forma
Para que te sientas mejor contigo misma, primero te debes gustar a ti misma. Así que búscate un tiempo para ejercitar y sentir bien tu cuerpo. No se trata de querer estar con la misma figura de soltera, porque no sería lo óptimo. Solo haz que tu cuerpo se sienta vivo, con mucha energía; para ello, el ejercicio es tu mejor opción.
3. Sorpréndelo con detalles
Es tu oportunidad de decirle, sin palabras, lo mucho que lo amas. Recurre a pequeños regalos, un libro que puedan leer juntos, compartir un helado, ir a lugares que solían visitar de solteros. Prepara cenas especiales en tu recámara con luces tenues y un ambiente aromatizado, dale mensajes cariñosos, hazle piropos, y, ¿por qué no? ¡Usa lencería sexy!
Ponle un poco de pimienta a tu matrimonio
4. Paseos de pareja
Una actividad común y agradable es asistir a reuniones juntos, pero al tener hijos ya no se disfrutan igual, porque tienes que estar atenta a todos sus movimientos. Sin embargo, son necesarias para no perder esa “magia”, así que haz una cita o llévalo a una fiesta donde puedas bailar, mirarlo a los ojos, tomarle de la mano, besarlo, ¡en fin! Todo lo que hacía de sus salidas algo maravilloso.
Por qué nunca debes dejar de salir en citas
Haz un recordatorio de lo que antes hacías con tu pareja y que disfrutaban al máximo. Recuerda aquellas cosas de las cuales te quedaste con ganas de hacer y realízalas ahora. ¡Podría ser fantástico!, tu imaginación será el único limitante. No termines el noviazgo con tu marido, mejor haz que sea mejor y perpetuo.