El mal hábito de salir de casa sin probar alimento
¿Sabías que si no desayunas, engordas? Lee aquí para enterarte de eso y más detalles.
Lizette Morante
Si tu familia es de las que acostumbra no desayunar, llegó el momento de revertir ese mal hábito. Recuerda que la primera comida del día tiene múltiples beneficios que tal vez no conozcas.
De acuerdo con el Instituto de Nutrición y Salud de Kellog desayunar nos ayuda a reponer la energía que gastamos durante la noche y, por ende, nos permite realizar las primeras actividades del día con más fuerza. Nos ayuda asimismo a mantener el peso ideal (alejándonos de la obesidad y enfermedades relacionadas con ella), y en los niños mejora su rendimiento escolar al elevar su nivel de concentración y creatividad.
Quizá creas que esto es imposible si en las mañanas la casa es un caos y apenas hay tiempo de bañarse, vestirse y salir para el trabajo o la escuela. Sin embargo, solo necesitas entre 15 y 30 minutos para que toda la familia comience bien el día.
Tampoco necesitas ser un chef profesional ni hacer platillos elaborados para consentirlos. Nada más basta un poco de organización y elegir los ingredientes adecuados, al menos de tres grupos distintos de alimentos (frutas y verduras, de origen animal, leguminosas y cereales), o lo que se conoce como ‘El plato del bien comer’.
Además de los tradicionales hot cakes, el cereal con leche y el plato de avena, existe una gran variedad de opciones. Por lo pronto te dejo cinco menús sencillos y saludables:
Menú 1
-1 manzana.
-2 rebanadas de pan integral con mermelada y crema de cacahuate.
-1 vaso de leche con miel.
Menú 2
-1 taza de papaya.
-2 piezas de pan integral a la francesa.
-1 vaso de leche con chocolate.
Menú 3
-1 plátano.
-1 huevo revuelto con jamón de pavo y queso fresco.
-1 rebanada de pan integral.
-1 vaso de jugo de naranja.
Menú 4
-1 manzana.
-1 o 2 quesadillas de queso con champiñones.
-Guarnición de frijoles refritos.
-1 vaso de jugo de durazno.
Menú 5
-1 taza de fruta picada.
-1 mollete.
-1 vaso de leche.
(Estas porciones son para niños en edad escolar. Para adolescentes o adultos las cantidades deben aumentar).
Si crees que en la mañana te presionas mucho para preparar el desayuno, gánale al tiempo y adelanta algunas actividades por la noche (o incluso desde el domingo), como picar la fruta, poner la mesa o seleccionar los menús para toda la semana.
Toma en cuenta también que si en tu familia no se tiene el hábito de desayunar, es recomendable que en lo que se acostumbran, intenten dormir un poco antes para que no les cueste tanto trabajo despertar antes.
Ya no hay pretexto, pues además de los beneficios ya mencionados, esos minutos que pasa la familia reunida en la mesa al inicio del día constituyen una gran oportunidad para fortalecer los lazos y la comunicación. Así que, ¡a desayunar se ha dicho!
Lizette Morante
Lizette Morante es mexicana y egresada de la Escuela de Periodismo Carlos Septién García. Entre sus pasatiempos están leer, escribir, los deportes y disfruta mucho estar con su familia y su perro.
