Protege a tu hijo del abuso: no le obligues a complacer a los adultos

¿Que tus hijos no son "amables" con tus amigos adultos? Es lo mejor que puede pasar. Lee éste artículo y sabrás por qué.

Erika Otero Romero

Lo que voy a tratar a continuación es un tema que a mí no se me había ocurrido que fuera posible, pese a eso, que no se hable de ello no lo hace menos cierto. Es más, me atreveré a decir que ésta es una de las razones por las cuales muchos adultos sienten que pueden abusar de los niños, sí, de niños como tus hijos.

Podría apostar que en algún momento de tu vida como madre, te has encontrado en una situación como la que describiré a continuación: Vas con tu hijo de 4 años al parque infantil de tu localidad. Entonces, te encuentras con algunas amigas y conocidas, quienes al ver lo guapo y grande que está tu pequeño, quieren alzarlo en brazos y “comérselo” a besos. Tú notas que tu hijito se siente incómodo, ya que se revuelve con desespero y cero deseos de estar en los brazos de quien lo tiene alzado. Tú reaccionas de inmediato y le dices a tu amiga: “Lo siento, pero no está acostumbrado a que personas que no conoce lo tengan en brazos”. Estiras tus brazos y él con premura se abalanza para que tú lo cargues. Acto seguido tus amigas y conocidas se quedan mirando absortas, dicen dos o tres cosas más y luego se van del lugar, despidiéndose de manera rápida.

La anterior, como muchas otras situaciones similares, te pone entre la espada y la pared; te llena la cabeza de preguntas acerca de la capacidad para ser social de tu niño, o lo que pueden llegar a pensar las personas que los conocen acerca del tipo de educación que le estás dando. Te diré algo: nada que haga que tu pequeño se sienta incómodo, es correcto. Por lo tanto, es tu derecho y obligación como madre proteger a tu niño de algún adulto que quiera obligarle a hacer algo que no quiere, sin importar lo que opinen o piensen los demás.

¿Por qué defender a tu hijo de quienes le incomodan?

Partamos de la siguiente pregunta: ¿Te gusta que te fuercen a hacer algo que no quieres? Supongo que la respuesta es no. Bueno, igual les pasa a los niños. Quizá tú tengas a favor que eres mayor y puedes imponerte con algo de fuerza física, si el momento lo amerita, pero tu niño no. Enseñarle a que complazca a los adultos en sus “caprichos”, los hace vulnerables al abuso físico, sexual o emocional, y estoy segura que no quieres hacer esto. No forzarle a complacer los deseos de otros, no es ser mezquino o mal educado, es un acto de protección para tu pequeño.

Razones para no obligar a tus hijos a ceder frente a los deseos de los adultos

Ya he hablado algo al respecto en el párrafo más arriba, sin embargo, detengámonos un poco y ampliemos esos puntos:

Protección frente al abuso

Quizá de todas las explicaciones posibles, esta sea la de más valor. No te engañes, aunque sea difícil de creer hay más posibilidades que tu hijo sea abusado por tus conocidos y allegados, que por desconocidos. Así que es primordial enseñarle a tu pequeño que nadie tiene por qué obligarlo a hacer algo que no desea.

Desarrollar capacidad de discernimiento

Así es, el niño debe empezar a reconocer los bueno, malo y lo feo de la sociedad y las personas que lo rodean. Eso los colma de herramientas para que sepan qué personas deben elegir para relacionarse a lo largo de la vida.

Respeto a sí mismo

Cuando un niño sabe lo que quiere y se hace respetar, desde ningún punto de vista va a permitir que desconocidos o conocidos pasen por encima de él. Desde luego, así su autoestima será mayor. Debes recordar que tus hijos son dueños de sus cuerpos, de sus sentimientos y emociones, por lo tanto, es libre de demostrar afecto cuando él así lo quiera y a quiénes él elija.

Cómo puedes ver, hoy más que nunca es necesario que tus hijos sepan decir “No” cuando se sienten molestos o incomodos con las exigencias de los adultos. No es malo, desde ningún punto de vista, permitir que tu hijo desde pequeño elija a quien mostrar afecto, de quien desea un abrazo o quién quiere dar un beso. Es importante porque así reduces mucho las probabilidades de que tus hijos sean víctimas de los abusadores.

Erika Otero Romero

Psicóloga con experiencia en trabajo con comunidades, niños y adolescentes en riesgo.