Simplifique su vida en la cocina y disfrute a su familia
Toda ama de casa se pregunta qué va a hacer de comer. Ya sea que se trate de algo rápido o más elaborado, he aquí siete consejos para ayudarle a organizar su menú semanal o mensual.
Janint Young
Una preocupación constante en toda ama de casa es qué va a hacer de comer. Ya sea que usted se quede en casa atendiendo a la familia, o trabaje desde casa o fuera de ella, por medio tiempo o tiempo completo, esto es algo que nunca terminará, pues todos los días la familia come.
Ya se trate de algo de cocción rápida o de preparación más elaborada, le presento aquí siete consejos para ayudarle a organizar su menú semanal o mensual:
1. Vea el calendario junto con su familia y determine en cuáles días hay más actividades extracurriculares. Por ejemplo, días en que hay clases de piano, lección de kárate, práctica de fútbol soccer o actividades en su iglesia, etcétera. Con base en eso elabore un menú que sea fácil de hacer. Coordine horarios de trabajo. A veces, el esposo o la esposa estarán trabajando hasta tarde y tal vez comerán en el trabajo o fuera de casa. En ese mes, pregúntese, ¿habrá algún evento familiar fuera de casa? ¿Saldremos de paseo por el fin de semana? Es importante saberlo para planificar bien.
2. Una vez que sabe que días estará más ocupada, enliste los alimentos favoritos de su familia: algo que usted sabe que todos van a comer y no habrá necesidad de preparar dos platillos principales. Si a veces no sabe qué cocinar, vaya a la biblioteca pública y revise revistas de cocina, o busque recetas en internet, que cuenta con una gran cantidad de sitios especializados en ello. Vea qué frutas y verduras están de temporada y, por lo tanto, más baratas. Lea las ofertas de la semana en el periódico y planée su menú partiendo de allí. Intercambie recetas con amistades y/o familiares. Una vez al mes, si su presupuesto lo permite, programe un descanso y salga a comer fuera con la familia. Si hay alguna ensalada, pasta o guisado especial que le gusta de ese restaurante al que van, ponga atención en los ingredientes e inténtelo más adelante en su hogar. De este modo podrá usted añadir sabor y variedad a su menú semanal.
3. El paso siguiente es coordinar los días de la semana con los guisados según el nivel de actividades. Si está consciente de que los martes y jueves su hijo tiene práctica de fútbol, entonces piense en un guisado fácil y rápido para ese día y luego use lo que sobró del miércoles para los alimentos del día jueves. Haga su vida práctica y fácil. Si los domingos todos están en familia, ese día los alimentos pueden ser más elaborados, e incluso pueden platicar sin tener apuros de que el tiempo se acaba y hay que hacer otra actividad.
4. Ahora viene el momento de hacer la lista de compras para sus comidas
Algo recomendable es que las frutas y verduras se utilicen en los primeros menús. Si usted va de compras los sábados, utilice las frutas y verduras dentro de los primeros tres o cuatro días siguientes, a fin de que sus alimentos tengan ingredientes más frescos, o evitar que se echen a perder. Asegúrese de ver su calendario para que, si va a salir de la ciudad, no deje descongelando el pescado o la carne y, a su regreso, lo encuentre en descomposición. De este modo evitará desperdiciar comida.
5. Cocine en cantidades grandes y utilice las sobras para preparar desayunos y lunchs
Por ejemplo, si le queda puré de papa del día anterior, prepare unas quesadillas de papa para el desayuno o el lunch. ¿Le quedaron frijoles refritos? Acompañe unos ricos huevos en el desayuno con esos frijoles o haga unos panes con frijoles, agrégueles queso y al horno; sírvalos con una salsa de jitomate, cebolla y chile picados.
6. Que uno de sus días sea un día de comer “el recalentado” de la semana
o preparar alimentos como si se tratara del desayuno. Una amiga utiliza los jueves para dar de cenar todo lo que quedó de la semana. O sea, estilo buffett. Si no quedó nada, ella prepara huevos, hot cakes, pan francés o algún otro alimento típico del desayuno.
7. Coordine el día en que pasa el camión recolector de basura para limpiar su refrigerador. Mi amiga coordina esto los mismos jueves, pues lo que ya nadie se comió y se está echando a perder en el refrigerador se irá a la basura, que pasa los viernes. Aproveche también este día para ver qué alimentos ya caducaron, como la leche, la crema, los quesos, el jamón, etcétera. A veces abre uno los recipientes para comer algo y se encuentra con hongos y un terrible olor a descomposición.
Como siempre, lo más importante es no desesperarse y pensar que estos cambios se hacen de la noche a la mañana. Hay semanas en que mis comidas están planeadas con sumo cuidado, y hay días en que unos buenos sandwiches y una sopa de lata me ayudan a salir del paso. Lo más importante es tener una experiencia agradable con su familia. En estos días en que todo es rápido, perdemos de vista que comer es uno de los grandes placeres de la vida y disfrutar este tiempo con nuestros seres queridos es mucho mejor. Dése tiempo para planear un menú y coordinar sus actividades. A veces no es fácil, pero tampoco es imposible. ¡Buen provecho!