Tú también eres hermosa

Mamá, amiga, consejera, enfermera, profesora... y mujer, ¿cuándo? Tú también puedes ser una mujer hermosa.

Diana Brante Morales

Cada vez que asistía a una reunión de mi hija menor, me sentía obsoleta, pasada de moda, anticuada. Veía a las otras mamás, que tienen alrededor de veinte años, mientras yo estaba llegando a los treinta. A mi alrededor veía jeans ajustados, blusas que mostraban el ombligo, maquillaje al estilo Hollywood. Yo me sentía cada vez más mal, no me daban ganas de salir de casa, y menos de asistir a esas veladas. Por mucho tiempo estuve sintiendo lástima de mí misma, hasta que decidí hacer un cambio: tomé la ropa que me quedaba mal y la regalé, me corté el cabello y comencé a preocuparme por mi apariencia personal.

Para verse bien, hay que sentirse bien con una misma. Muchas veces la manera en que te ven los demás no es sino el reflejo de lo que tú proyectas. A fin de mostrar la hermosa mujer que se encuentra escondida en tu interior, te comparto algunos pequeños consejos que a mí me ayudaron:

Cuida tu higiene personal

• Para sonreír tranquila, tu sonrisa siempre debe estar perfecta, limpia.

• Los malos olores que podemos emanar “absorben” nuestra personalidad y nos hacen sentir observadas por todos. Cuida la higiere corporal y perfúmate, te hará sentir mejor.

• Mírate al espejo antes de salir. A una gran amiga le ocurrió que por salir apurada de su casa, no se dio cuenta que tenía una prenda del día anterior enganchada en el pantalón, hasta que se lo dijeron en la calle.

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Busca qué estilo favorece tu cuerpo

La ropa que uses debe ir de acuerdo a tu tipo de cuerpo y edad. Siéntete cómoda con lo que elijas. No sigas la moda a ciegas, sino escoge lo que te favorezca. Los expertos recomiendan que debemos identificar a qué figura geométrica se asemeja la silueta de nuestro cuerpo y entonces definir nuestro estilo al vestir. Identifica tu tipo de cuerpo y echa un vistazo a estas recomendaciones:

• Triángulo: Utiliza pantalones lisos, escotes profundos, blusas sin mangas o con rayas horizontales.

• Triángulo invertido: Acintúrate con pantalones pata de elefante o faldas con volumen en el vuelo.

• Reloj de arena: No uses ropa demasiado ajustada ni mucho estampado, destaca sólo una parte de tu cuerpo (superior o inferior).

• Rectangular: Enfatiza la cintura. Por nada del mundo vistas pantalones a las caderas.

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• Ovalado: Busca tu talla exacta sobre todo en ropa lisa, sin estampado. Te beneficia el escote en V.

Emplea adecuadamente el maquillaje

Preocúpate por destacar tus virtudes, de acuerdo con la forma de tu rostro. En esta era de la tecnología, siempre puedes encontrar tutoriales de maquillaje si no sabes cómo usarlo. Para ello, es bueno tener en mente el dicho de Coco Chanel: “Menos es más”. También hay colores de maquillaje que te quedarán mejor según el tono de tu piel y ojos:

• Ojos azules: Evita el color azul, utiliza tonos cítricos que iluminen tu mirada.

• Ojos verdes: Si eres de piel blanca, usa tonos lilas, violetas. Si tu piel es más bronceada, trigueña o morena, busca tonos dorados, marrones o castaños.

• Ojos marrones: Inclínate por los tonos rosas para suavizar la mirada. Para realzarla, usa colores como el chocolate o marrón intenso.

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El cuerpo es el templo del alma

• Cuida tu cuerpo con una rutina diaria de ejercicio. No es necesario que te inscribas a un gimnasio, con sólo 30 minutos de caminata diaria ayudas a tu organismo a estar mejor.

• Protege tu salud con vitaminas. Come frutas y verduras todos los días. Combina tus comidas para consumir idealmente alimentos de cinco colores diferentes.

• Mídete. Eres lo que comes. Vigila que tus comidas no sean excesivas, que no contengan mucha grasa ni aderezos. Una dieta equilibrada permite mantenerte alerta y activa todo día. Aumenta tu calidad de vida, no la disminuyas.

Ámate

Sin duda, esto es lo más importante porque permite que brille tu belleza interior.

• Sonríe. Una mujer feliz, ilumina a quién la mira. Contagia tu alegría.

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• Halágate. Mírate al espejo y resalta todo lo bueno que ves en ti. Repite “Soy hermosa, soy hermosa, soy hermosa e inteligente”.

• Acepta los elogios de quien te ama. Muchas veces nos cerramos en “Estoy fea”, “Estoy gorda” y no escuchamos lo que nuestra pareja, amigas y familia nos quieren decir.

Muchas veces tendemos a sentir que no somos atractivas. Entonces pasan los años, uno ve fotos antiguas y dice:”¡Qué hermosa era! ¿Cómo no fui consciente de ese don que tuve?” Por lo mismo, te sugiero que tengas presentes estas palabras de George Sand, escritora francesa: “La belleza exterior no es más que el encanto de un instante. La apariencia del cuerpo no siempre es el reflejo del alma”.

Diana Brante Morales

Me gusta comenzar cada día como un nuevo día, darme la oportunidad de ser feliz y sonreír por las cosas básicas. Dar sin esperar nada a cambio. Siempre sorprenderme.