Un matrimonio fuerte como el diamante
La base para la familia es la relación matrimonial. Aquí puedes encontrar algunos consejos para que tu matrimonio llegue a ser fuerte, brillante, transparente, eterno, como un diamante.
Gabriela Zuñiga
En nuestros días la vida es muy agitada; demasiadas cosas requieren nuestro tiempo; hay mucho por hacer y aprender, pero a pesar de todas las actividades que demandan nuestras energías y atención, hay algo mucho más importante que cualquier trabajo o estudios, es el fortalecer nuestra familia. Para cumplir esta meta, debemos recordar que los padres son la clave del éxito de la familia.
Debes recordar que, como en la medicina, es mejor prevenir que remediar: es mejor empezar a fortalecer tu matrimonio desde el primer día de casados y no esperar a que haya problemas, o a que sientas que tu matrimonio se desmorona, para dedicarle tiempo y atención. Recuerda también que para tener un matrimonio fuerte son necesarios:
Hacer un esfuerzo continuo
La frase: “Roma no se hizo en un día”, ¿te suena familiar? Pues bien, una familia debe durar mucho más que una vida, sino por la eternidad, entonces debes poner un granito de arena cada día para que tus esfuerzos se vean reflejados en la convivencia.
Tener paciencia
Nada que valga la pena va a ser muy fácil de lograr. Si al intentar tener actos de bondad no ves muchos cambios, te sugiero esperar con fe e insistir en esos pequeños detalles generosos. Tus esfuerzos, a la larga, siempre serán recompensados en el momento indicado.
Actuar con sabiduría
Como dijo en alguna ocasión el doctor Joe J. Christensen: “Cualquier pareja inteligente tendrá diferencias de opinión. Nuestro cometido es estar seguros de saber cómo resolverlas. Esto es parte de hacer que un buen matrimonio sea mejor”.
Cada semana tomamos una noche para poder dialogar sobre temas de familia, y buscar convivir más. Fue gracias a esa hora familiar, donde pudimos conversar sobre éste tema con mi esposo, que vimos siete cosas que nos ayudarían a fortalecer nuestro matrimonio. Comparto esos siete puntos con ustedes:
1. Recordar constantemente nuestros mejores momentos:
Incluso aquellos momentos que ocurrieron antes del matrimonio. Recordar los sentimientos que tuvimos en el pasado hace que de alguna manera se renueve nuestro amor.
2. Ser longánime:
Es decir, aprender a ver las cosas desde el punto de vista de tu esposo o esposa, lo que se llama empatía. Eso te ayudará a entender los sentimientos y la forma de actuar, de tu pareja. A comprenderle, por lo que te será más fácil dar un consejo, llegar a acuerdos, o incluso solucionar conflictos con tu pareja. Además, ella se sentirá valorada y respetada.
3. Aprender de tu pareja:
Todos tenemos virtudes, por lo cual puedes aprender de las de tu pareja, pero esto no solo se refiere a cualidades morales, espirituales o de carácter, sino en todo aspecto. Por ejemplo, mi esposo y yo estudiamos informática, por lo que hemos tenido algunas diferencias al hablar sobre estos temas de los sistemas y la tecnología, con el tiempo aprendí que debo escuchar y siempre tengo algo que aprender. Debo admitir que en ese aspecto mi esposo ha sido muy paciente conmigo.
4. Tener diferencias en el matrimonio es normal:
Si ves a tus amigos, amigas, o familiares todo el tiempo felices, no es porque su matrimonio sea perfecto, sino que han aprendido a solucionar sus diferencias. Hay días buenos y malos, lo importante es saber bailar bajo la lluvia. No te desanimes si tus desacuerdos son muy frecuentes: si ambos se esfuerzan, con el tiempo las cosas serán mejores: acepta que hay desacuerdos y aprende a sobrellevarlos con amor.
5. Notar las cualidades positivas de tu cónyuge:
Usualmente al ser novios, mostramos lo mejor de nosotros. Después, al casarnos, vemos que tal vez no era como pensábamos, pero eso pasa con todos. Seguramente tú también ocultaste muchos pequeños defectos. Ayuda a tu pareja a mejorar, pero no pierdas la paciencia, y cada vez que quieras renegar, respira hondo y piensa en los motivos por los cuales te enamoraste. Es un consejo que mi esposo me dio: seguramente lo usa mucho conmigo.
6. Pasar tiempo juntos con regularidad:
Usar los momentos libres para divertirse juntos, te ayudará a tener más momentos bonitos para recordar. Su amor crecerá de manera exponencial, si dedican tiempo de esparcimiento a su pareja. Jugar, reír, correr, ejercitarse y hacer estas cosas ambos, seguramente fortalecerá su matrimonio.
7. Demostrar amor:
Decir “te amo” a diario, o quizá escribirlo en el espejo, en una nota dentro de la billetera de tu esposo, esconder algunos dulces, chocolates o tarjetas en la maleta del trabajo, preparar su postre favorito, cantarle o hacer algo para hacerle sonreír, son algunas de las cosas que hago para demostrar mi cariño a mi esposo. A veces pensamos: “Mi pareja sabe que le amo”. Pues bien, nunca está de más tener un detalle para hacérselo saber.
El matrimonio es como una flor, necesita cuidado constante, paciencia, y mucho amor. Tú, ¿Qué cosas hiciste para fortalecer tu matrimonio? ¿Puedes compartir con nosotros algunas ideas, o aplicar éstos consejos y hacernos saber cómo te ha ayudado con tu pareja? Recuerda que la fortaleza que exista en la relación con tu pareja, hará que la familia tenga éxito y que pueda permanecer unida ante cualquier adversidad.