¿Una mujer casada puede tener amigos del sexo opuesto?
Muchas personas aseguran que la amistad entre hombre y mujer no existe, pero sí puede darse. Aquí te dejo cinco razones por las que sí puedo tener amigos. ¿Puedo tener amigos del sexo opuesto como mujer casada?
Diana Brante Morales
Desde que era pequeña no he sido muy buena en las relaciones interpersonales con el mismo género, por lo que verme rodeada de hombres se volvió una cuestión normal, llegando al punto de ser yo “uno más”. En esta dinámica siempre se ha mantenido el respeto, intentando utilizar un lenguaje adecuado y evitando situaciones que podrían desagradarme. Tanto en el colegio como en la universidad mantuve mi selección de amistades, en especial porque en mi carrera éramos solo tres mujeres.
Cuando me casé, mi esposo estaba al tanto de la situación y, en un principio, no le molestaba. Luego las cosas cambiaron, ya que a veces mantenía conversaciones hasta altas horas de la noche o prefería salir sola con mis amigos que incluirlo en el grupo. Él me hizo notar mis equivocaciones y después de un tiempo logré corregirlas, la gran mayoría al menos, por lo que pude obtener un listado de algunas acciones básicas para mantener una buena relación de amistad con personas del sexo opuesto sin que esto se convierta en un problema en el matrimonio. A continuación te enumero cinco reglas esenciales:
1. La confianza es primordial en una relación
Los cuatro cimientos de una relación son el amor, la confianza, el respeto y la comunicación; si alguno de ellos se debilita, todo lo que hemos construido comienza a derrumbarse. Por ello, alimenta la confianza con tu pareja por medio de una relación fluida, donde prime la verdad y el respeto entre ambos. Si tu pareja es insegura o celosa, procura nunca darle razones para desconfiar de ti.
2. El respeto no se puede dejar de lado
Cuando escribo “el respeto” me refiero a todas las instancias de éste, ya sea hacia tu pareja, hacia ti mismo o hacia tus amigos. Una relación de amistad donde no existe respeto entre los involucrados puede llegar a malinterpretarse por los constantes abusos de confianza. Si no te respetas a ti misma y permites que te pasen a llevar, entonces no son amigos de verdad.
3. Mantener una buena comunicación con la pareja
Una buena comunicación se basa en entender lo que escuchas y emitir una opinión respetuosa al respecto. Quizás no siempre estarán de acuerdo, por lo que esforzarse por no herir a quien nos escucha será el mayor desafío en la comunicación.
4. Generar límites bilaterales
Es el clásico “rayado de cancha” o “poner los puntos sobre las íes”, es decir, dejar claro los límites de la relación para que no se produzcan confusiones desagradables. Por ejemplo, una amistad es sana si no interfiere con tu matrimonio; está bien recibir piropos, pero si te trata de “amor” o con “demasiado afecto” lo más probable es que a tu pareja le moleste.
5. La verdad como tu mejor escudo
No es anormal escuchar comentarios de maridos celosos que sospechan de todos (sí, todos) los amigos que tienes: todos tienen segundas intenciones y te ven como un objeto de placer, pero casi siempre los piropos de tus amigos se enfocan en subirte el ánimo y no buscan seducirte. ¿Cómo hacerle entender eso a tu esposo? Simple, con la verdad. La verdad será tu mejor aliada para disminuir los celos en tu pareja y mantener una buena relación marital.
Las amistades van cambiando con el tiempo, ya sea por las etapas que vas pasando o por los problemas que vas enfrentando. Un verdadero amigo (o amiga) se mantiene en el tiempo, te apoya aun cuando sabe que estás equivocada, pero te hace ver tu error, se preocupa por ti, por tu familia y tus hijos, por lo que nunca intentará generar deterioro en tu relación. Mi consejo final es que procures mantener cerca a aquellos amigos que de verdad merecen dicho título y no a aquellos que van únicamente a donde calienta el sol.