10 formas en las que los hombres te cambian en las peores y mejores formas… para siempre

Generalmente son las relaciones que nos causan dolor las que más nos marcan y cambian para siempre, pero puedes usar ese dolor como el motor que te impulsa a salir adelante.

Zaida Libertini

Todos tenemos alguna vez en la vida una relación que nos cambia para siempre. Se marca un antes y un después, basado en esa experiencia. Lamentablemente por lo general son las relaciones que nos duelen las que nos marcan y nos cambian para siempre. Sin embargo, estas mismas relaciones son las que nos pueden ayudar a buscar lo positivo en cada circunstancia y reconocer la lección aprendida. Cuando amamos a alguien intensamente, es como si le diésemos un control universal sobre nuestras emociones, con la esperanza de que tomen buen uso de él. Cuando ésto no pasa, sufrimos mucho, pero también aprendemos grandes lecciones que guardaremos por el resto de nuestra vida.

Estas son las 10 cosas que gracias a un hombre cambiaron en mi:

1. Me rompió el corazón

Logre conocer la hermosa etapa al comienzo del amor, y el desgarrador sentimiento de saber que a pesar de todos tus esfuerzos, si la otra persona no está en la misma página, no hay nada que puedas hacer para que tu amor sea recibido y valorado.

2. Pero ésto me ayudo a darme cuenta que todo sana

Me di cuenta que mi corazón realmente es muy resistente, y que con el tiempo sabe sanarse y renacer más fuerte. Lo mejor de todo fue darme cuenta de que a pesar del daño, mi corazón seguía puro y siendo capaz de amar y perdonar.

3. Me lastimó emocionalmente

Después de una entrega total, que a veces es ingenua, quedas con moretones internos muy difíciles de sanar.

4. Pero me hizo la piel dura

Gracias al dolor que pasaste, algo cambia en ti, y te vuelves más selectiva. No es porque te hayas vuelto dura, si no porque valoras y resguardas tus sentimientos como un tesoro.

5. Me hizo sentir desconsuelo y miedo

Ese miedo aterrador cuando estás enfrentada al dilema de ¿Ahora que haré? Por un tiempo, no logras ver la solución a tu situación y crees que la felicidad en tu vida se terminó .

6. Pero me ayudó a ser valiente y enfrentar obstáculos

A pesar del miedo y la incertidumbre, comienzas a dar pasos, al principio pequeños. Pero pronto te das cuenta que cada vez es más fácil, y cada vez eres más fuerte, y los obstáculos que parecían imposibles, ahora ya no lo son tanto.

7. Me hizo sentir desvalorada

En cierto momento entras en depresión ya que llegas a creer que tu valor personal depende de cómo te traten los demás.

8. Y después aprendí a valorarme a mi misma

¡Pero un día abres los ojos! Y te das cuenta que la manera en como otros te tratan refleja lo que piensan de si mismos y no tiene nada que ver con tu persona. Aprendes a ver tu increíble valor por tus propios ojos y no por los ojos de los demás.

9. Me lastimo intencionalmente

Esa persona que un día tanto amaste, ahora no cansa en buscar la manera de hacerte sentir mal. Te ha lastimado mucho, y lo sigue haciendo, pero te das cuenta que tu ya no reaccionas igual.

10. Pero aprendí que perdonar purifica

Has aprendido que el perdón es más beneficioso para ti que para la persona a la que se lo entregas. Purificas tu alma de todo rencor y eres capaz de decir: “Te perdono por todo lo que me has hecho y por todo lo que todavía intentaras hacerme.” Estas en paz contigo misma, porque todo el dolor que sentiste fue el motor que te impulso a salir adelante.

Y después de que logras todos estos cambios, finalmente puedes decir: “Gracias por hacerme más fuerte.”

Zaida Libertini

Zaida Libertini es originaria de San Pedro Sula, Honduras y actualmente reside en el estado de Utah, Estados Unidos. Escribe por placer y es ama de casa, esposa y madre de un pequeño de cinco años.