El sobrepeso y la obesidad se combaten desde casa
¿Sabías que los índices de obesidad están aumentando gravemente cada día? Te invito a leer cómo poder combatir este mal que nos atañe a todos.
Camila Ignacia Gómez González
La obesidad y el sobrepeso no son problemas nuevos. Lamentablemente son una realidad cada vez más común entre nosotros. Aunque los niños son la principal preocupación de médicos y especialistas en el área de la nutrición, porque cada día se incrementan los casos de pequeños con enfermedades que antes eran contraídas solo si se contaba con una predisposición genética, los adultos no estamos exentos de este padecimiento.
Estos datos, que pueden parecer incluso exagerados, los debemos tener en cuenta como padres y adultos, a fin de lograr formar jóvenes activos, con alta autoestima, deportistas, sanos y felices.
Si no sabes por dónde empezar, te cuento:
Di NO al sedentarismo
Si tu hijo pasa muchas horas al día frente a una pantalla (televisión, computadora, tableta, videojuegos, etcétera), sentado en la escuela o haciendo sus tareas, es imperante que comiences a disminuir los tiempos de estas actividades y que progresivamente comiencen a realizar algún deporte, caminatas o algún tipo de ejercicio que vaya de acuerdo con su edad.
Revisa la dieta familiar
Muchas veces no notamos la cantidad de grasas saturadas y carbohidratos que consumimos como grupo familiar. Comienza a anotar lo que han consumido en la semana y luego verifica cuán nutritivo es.
Compra más fruta y verdura
A veces es muy complicado que los niños acepten las verduras y las frutas, pero si se las ofrecemos en diferentes presentaciones lograremos crear el hábito de la alimentación saludable.
Dale las porciones justas
Con frecuencia cometemos el error de encontrar muy delgados a los niños porque solemos compararlos con los que ya están obesos, y como consecuencia los obligamos a comer en exceso. Por esto te invito a averiguar cuánto debe comer en realidad tu hijo, regulando así las porciones que le sirves en cada comida.
Compartan al menos una comida diaria en la mesa
Esto ayuda a ver cómo se están alimentando los niños y si hay algún trastorno alimenticio en ellos.
Envía colaciones saludables al colegio o escuela
Es importante que sepas que los niños pequeños comen lo que los padres les entregan, y una excelente manera de crear hábitos saludables es prepararles fruta para la hora de la colación. De esta forma te asegurarás de que tu hijo recibe los nutrientes necesarios y acordes con su edad.
Evita usar mucha sal o azúcar
Ambos son enemigos silenciosos que pueden servir de base para desarrollar enfermedades como la hipertensión o la diabetes. Si tu hijo está comenzando a comer es mejor que no añadas ni una de estas dos sustancias, en primer lugar porque los alimentos traen por naturaleza los ingredientes justos que necesitamos para nutrirnos y, en segundo, para que pruebe el verdadero sabor de las comidas.
Incentiva la práctica de algún deporte o actividad física
Con esto no solo verás que tus hijos se mantienen en forma, sino que también los ayudarás a desarrollar la disciplina, fomentarás el buen trabajo en equipo y lo verás más alegre, por tener nuevos amigos con quienes compartir sus triunfos.
Nunca es tarde para comenzar a cambiar un estilo de vida sedentario, y pequeñas modificaciones diarias pueden hacer la diferencia y evitar múltiples enfermedades derivadas de una mala alimentación. Te invito a elaborar un plan en familia para que juntos hagan frente a la tan indeseada, pero cada vez más común obesidad.