Cómo desarrollar la motricidad de un bebé mayor a 5 meses

Nuestra labor como madre es estimular al bebé adecuadamente para que pueda potenciar su capacidad motriz e intelectual.

Paola López Martínez

Los bebés, además de ternura y amor, traen incluido hierro, ácido fólico, DHA y sesiones de música instrumental desde el vientre. Todo ello, maravilloso en la medida justa, ha venido a enriquecer el desarrollo de los pequeños. Dice mi mamá: “Los niños de ahora ya no son como los de antes; los de hoy están más despiertos que nunca”.

Si tienes un bebé de cuatro meses o más edad te habrás dado cuenta de que tiene mayor control de su cabeza y tronco. En esta edad ya tiene una mejor coordinación entre su visión y el movimiento de la cabeza. Si se le muestra un juguete lo sigue con la mirada y agita sus brazos en señal de querer alcanzarlo; si llora y le hablas desde lejos, se calmará e intentará identificar de dónde proviene el sonido, inclusive logra balbucear; pasa más tiempo solo y en calma o jugueteando con manos y pies.

Justo en esta etapa tenemos que reforzar la estimulación para conseguir un desarrollo viso-motriz adecuado, y para ello aprovecha al máximo la mejor herramienta: la curiosidad de tu bebé. Te sugiero que continúes con la estimulación que ya venías realizando en los meses anteriores, y que además pongas en práctica estos nuevos ejercicios que potencializarán las capacidades de tu bebé:

1. Pecho tierra

Coloca a tu bebé boca abajo, muéstrale un juguete llamativo para que intente levantar su cabeza y sostener contacto visual con el objeto; después, sitúalo sobre la cama, a una distancia cercana a tu bebé. Se agitará y hará todo lo posible por llegar a él. El objetivo es que al principio pueda extender sus manos para intentar alcanzarlo, y que mantenga su cabecita erguida. Conforme madure y tenga un mejor manejo de su cuerpo logrará alcanzar el juguete. Cuando alcance la distancia previa debes alejar el juguete cada vez más.

2. Posición vertical

Es bueno cargar a los bebés. No tengas miedo de acostumbrarlo a tus brazos, es mejor tenerlo cerca de ti que darle independencia cuando aún no la necesita. Sostenlo en tus brazos de manera vertical, de modo que sostenga su cabeza; cada vez lo hará mejor. En cuanto tenga un mejor control de ella, puedes ponerlo de frente, tu bebé es curioso y toda su perspectiva cambia cuando observa todo lo que hay a su alrededor ya sin estar acostado.

Advertisement

3. Ven a mí

Mientras el bebé esté acostado boca arriba, agita las manos o aplaude para que llames su atención; llámalo por su nombre e invítalo a que vaya a ti; tómalo de ambos brazos y con suavidad levanta su tronco, de manera que quede sentado en una posición de 45°. Déjalo así por cinco segundos y vuelve a acostarlo, pues su espalda aún no está lo suficientemente madura como para que permanezca sentado él solo. Conforme el bebé vaya acostumbrándose a este juego ejercerá mayor fuerza en su abdomen y redoblará esfuerzos para levantarse y sostenerse. Alrededor de los siete u ocho meses ya podrá mantenerse sentado.

4. Pedaleo

Mientras permanece acostado toma una de sus piernas y ayúdale a pedalear; haz 20 repeticiones suaves y marcadas en cada pierna. Luego, que pedalee con ambas piernas, mientras una sube, la otra baja.

5. Rueda-rueda

Coloca a tu bebé sobre la cama, y enséñale a girarse. Si vas a girarlo hacia su lado derecho, primero coloca su brazo derecho hacia arriba, a un lado de la cabeza, de manera que al moverse no le estorbe. Poco apoco gíralo hacia el costado derecho, mientras estiras su brazo izquierdo para que sepa que puede ayudarle a impulsarse. Déjalo boca abajo por cinco segundos y regresa. Ahora haz lo mismo, pero del lado izquierdo.

6. Caminata

Sostén al bebé poniendo ambas manos bajo sus axilas, él debe quedar de pie; sus pequeño dedos deben rozar la superficie plana, al sentirla los moverá y tratará de dar pasitos hacia adelante. No permitas que cargue todo su peso, ni lo mantengas de pie por mucho tiempo; con diez segundos por ejercicio será suficiente para desarrollar su motricidad. Sin embargo, aún no es tiempo de que se mantenga en pie por sí solo.

7. Sigue jugando

Permite que interaccione con juguetes que sean de diferentes tamaños, texturas y colores, porque ya puedo tomarlos, sostenerlos, soltarlos y jugar al “bebé lo tira, mamá recoge”; déjalo que lo haga, no te imaginas lo mucho que esto le divierte y favorece su motricidad.

Advertisement

Recuerda que mientras juegas con él y lo estimulas debes hablarle con ternura, llamarlo por su nombre, e incluso cantar. Si tocas sus manos dile que se llaman “manos”, o “pies”, o “dedos”. Si lo vas a sentar, dile: “Siéntate”, o si lo vas a girar, “A girar”. Recuerda que ya tiene un mejor dominio de sus cinco sentidos y gradualmente querrá aumentar la velocidad o la intensidad de los juegos. Cada niño es diferente, no lo apresures, deja que él decida el ritmo.

Ah, y un último consejo: disfruta el hacer estos ejercicios y juegos con tu hijo, nada vale más la pena que verlo sonreír y crecer junto a ti.

Para consejos sobre estimulación de bebés de 0 a 4 meses lee este artículo.

Toma un momento para compartir ...

Paola López Martínez

Soy Licenciada en Psicología por la Universidad Autónoma de Tamaulipas y tengo dos diplomados, uno en Orientación Familiar y otro en Asistencia Social y Voluntariado y desde hace un año doy terapia psicológica mi email es plopezmtz@hotmail.com