Tu bebé está a punto de nacer. ¿Tu casa está lista para recibirlo?

La llegada de un bebé a casa cambia nuestro mundo y nuestra manera de ver la vida. Aquí te doy 6 consejos para preparar tu casa para la llegada más esperada: la de tu hijo.

  • Por Maia Fernandez

Hay mujeres que apenas se enteran que están embarazadas se disponen rápidamente a preparar las cosas para el bebé. Otras dedican todo su embarazo a hacerlo. En mi caso estaba a mediados de mi embarazo y ya tenía casi todo listo: la cunita, sabanitas, toallas, ropita de todo tipo y el bolso para la maternidad. Pero había algo más que preparar: la casa. Si bien una casa siempre debe estar limpia, más aún cuando está por llegar un bebé. Además es una manera de distraerse y que el tiempo pase más rápido.

¿Qué cosas podemos hacer?:

  1. Tirar cosas viejas o en desuso: Es importante que nuestro hogar este en armonía, en orden y con espacio necesario para poder vivir lo mejor posible. Luego que nacen los niños es difícil ocuparse de otra cosa que no sea de ellos; así que el embarazo es el momento ideal para ordenar y deshacernos de todas aquellas cosas que están ocupando espacio. Cuando lo hacemos surgen cosas nuevas. Guardar y acumular cosas está muy relacionado con actitudes mentales de guardar y acumular. Es renovador hacer limpiezas y nos trae nuevas energías a nuestra casa. En mi hogar tenemos una regla, si hay algo que no usamos por más de un mes lo donamos o regalamos a alguien que lo necesite. Por otra parte la llegada del bebé trae consigo la llegada de nuevos elementos: juguetes, sillitas, cuna, cochecito, etc y se necesita espacio para guardarlos.
  2. Colocar en las rejillas trampas para bichos como alacranes u arañas. Las defensas de los bebés son más débiles y una picadura que a nosotros no nos causa nada, a ellos les puede afectar más seriamente.
  3. Evitar las alfombras. Son una solución para los ambientes con mosaicos pero hay que tener en cuenta que en ella se juntan ácaros que pueden producir alergias. Si ya tenemos una en casa es importante que la limpiemos bien una vez por semana.
  4. Preparar la habitación. Es conveniente terminar con el trabajo lo antes posible. Así el nacimiento no nos encuentra trabajando con la pintura u otros arreglos y la habitación logra airearse lo suficiente como para que desaparezca el olor a pintura. Que sea una habitación que le de buena luz. Si vamos a pintarla, te recomiendo utilizar una pintura que sea lavable, por si a tu pequeñito se le da por dibujarlas.
  5. Asegurar que los sistemas de ventilación y calefacción funcionen bien. Recuerda que un bebé necesita estar bien calentito en invierno y en verano bien fresquito para evitar los golpes de calor.
  6. Preparar un lugar cómodo para usar como cambiador. Es importante tener a mano los pañales, cesto de residuos, y elementos de limpieza. Debe tener la altura adecuada para que no estemos en posturas incómodas al cambiar a nuestro bebé y además ser seguro para él.

Y para finalizar: es importante que nuestra casa este limpia pero esto no significa que tenga que quedar todo aséptico. Además trata de compartir esas actividades con tu marido, familia o alguna amiga dispuesta a ayudarte ya que durante el embarazo no puedes hacer muchos esfuerzos.

Si no lograste armar la habitación soñada recuerda que lo más importante es preparar todo con amor y brindárselo a tu hijo. El te amará tanto como tú a él y lo más importante es disfrutar cada etapa, independientemente de lo material ya que lo que más necesitan los bebés es a su mamá, mucho amor, ternura, abrazos, abrigo y alimento.

Maia Fernández vive en Argentina con su esposo e hija. Considera fundamental la educación de los niños y al arte en sus diferentes manifestaciones como un componente irremplazable de la misma.

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