Navidad inolvidable con poco presupuesto

¿Te sientes desanimado porque llegó Navidad y tienes problemas económicos? Tranquilo, en este artículo encontrarás la manera de pasar una Navidad maravillosa sin requerir mucho dinero.

Jackeline Ledezma

¿Quién dijo que es necesario mucho dinero para pasar una Navidad inolvidable? ¿Acaso te cobran por reír, abrazar, conversar, reflexionar y compartir en familia?

Comprendo que tal vez es difícil percibir la Navidad de este modo, pues los medios de comunicación y el comercio nos bombardean con información contraria, animándonos a consumir sin medida, con promociones y descuentos en estas fechas, con publicidad en la que la familia feliz es aquella que celebra la Navidad con una mesa desbordante de comida, muchos regalos y ropa cara y de marca. Pero hagamos caso omiso a lo que dicta la sociedad y escuchemos nuestro corazón, actuemos de acuerdo con lo que Dios quiere y de seguro esta Navidad será inolvidable.

Si tienes posibilidades económicas para comprar un estreno, hacer una cena e intercambiar regalos con tu familia, adelante, eso es hermoso. Pero si esta Navidad enfrentas una situación económica difícil, no te desanimes, el dinero no compra felicidad. En concordancia con esto a continuación cito algunas ideas para celebrar con poco presupuesto:

Reúne a tu familia para una cena

Lo más importante si quieres disfrutar de una Navidad inolvidable es reunir a tu familia; habla con tus hijos, tus hermanos o familiares que vivan cerca para que pasen la fecha en una misma casa. Preparen la cena entre todos, no tiene por qué ser el banquete de un rey para que sea motivo de celebración, cocinen algo con lo que tienen en casa, el mejoringrediente es el amor, ese sí no puede faltar y, saben qué, lo mejor es que es gratis.

Reflexionar y orar

Una de las virtudes que más enriquecen la vida, es la gratitud. Te sugiero que después de la cena, una vez que todos están en la mesa, dispongan de un espacio para reflexionar acerca de las cosas positivas que les ha dejado el año; uno por uno mencione las bendiciones recibidas, puede ser el nacimiento de un hijo, la noticia de un embarazo, el trabajo, la recuperación de una enfermedad, un nuevo amor o ganar el curso lectivo. Recordar lo bueno que hemos vivido anima el corazón y nos llena de gozo y gratitud. Una vez que todos comparten sus experiencias se termina con una oración de agradecimiento.

Presentaciones artísticas

Si en la familia hay más de un creativo, una práctica que puede resultar muy entretenida es realizar presentaciones artísticas; si son muchos, hagan grupos, si no lo hacen de manera individual. Canten, escenifiquen obras de teatro, lean un poema o toquen algún instrumento; la cuestión es dejar volar la imaginación. En mi familia lo hicimos una Navidad y resultó muy divertido: mi cuñado llevó la guitarra y cantamos, y mi hermana y su novio improvisaron una obra de teatro que nos hizo reír mucho. Aquí te comparto algunos divertidos juegos de Navidad para toda la familia. ¡Adelante! ¡Anímense!

Intercambio de chocolates

Si el dinero no alcanza para un intercambio de regalos, organicen un intercambio de chocolates; lo divertido del asunto es el momento de compartir. Antes de dar el chocolate hagan una pequeña descripción de la persona a la que tienen que darle, para que los demás traten de adivinar de quién se trata, así será más divertido.

Disfruten de una película navideña en familia

La noche es larga, así que, por último podrían disponer de un espacio para disfrutar juntos de una película navideña, con un mensaje positivo. Si no les es posible alquilarla consulten con tiempo la programación de ese día, por lo general los canales de televisión abierta transmiten ese tipo de películas en la Noche Buena.

Recordemos que Jesús nació en un pesebre, de la manera más sencilla posible, siendo todo un Dios, dejándonos claro que la riqueza más grande no está en lo material, sino en lo espiritual. Que esta Navidad sea esa nuestra referencia y no la que nos inculca la sociedad de gastar sin medida. Vivamos este 24 de diciembre guiados por el verdadero sentido navideño de felicidad en el hogar: meditar y compartir en familia, lo cual es gratis.