Si quieres saber cómo ser más feliz, lee esto

Si sufres por tus problemas del pasado y tu futuro es incierto, descubre acá la manera de ser feliz a pesar de las dificultades valorando tu presente. Hallar la felicidad: la tarea diaria de cada persona. Tu tarea diaria es hallar la felicidad.

Erika Otero Romero

El relativo concepto de felicidad difiere de persona a persona. Muchos seres humanos vinculan la felicidad con la posesión de una mayor cantidad de bienes materiales y dinero posibles, algunos son felices si poseen salud y equilibrio emocional; otras personas no necesitan más que lo justo para pasar cada día sin sentir el apremio de acumular objetos materiales y de esta manera son felices y otros tantos son plenos ayudando a quienes lo necesitan, su prójimo o animales incluso. ¿Ya ves que es muy relativo?

La medida de tu felicidad eres tú

Así las cosas, quiero plantearte una “unidad de medida” que en lo personal utilizo para calcular si soy feliz o estoy en camino de serlo: pregúntate cada cierto tiempo si eres feliz, cuestiónate acerca de si podrías morir tranquilo justo en este mismo momento. Esto te ayudará a ubicarte en TU espacio y TU tiempo, yte llevará a reflexionar acerca de las cosas que importan, en lo que te hace pleno a pesar de todas las adversidades de la vida.

Hallar la felicidad a pesar de, y con los retos de la vida diaria

Muchos estarán pensando ahora que no se puede ser feliz si se está lleno de problemas. Ante esto, hay que resaltar que numerosas dificultades que como personas o familias tenemos son de índole mental, y a continuación explico el por qué: Si has visto la película Kung Fu Panda te habrás fijado que tiene grandes enseñanzas, en especial esa parte en la que Shifu, el anciano maestro Oogway, le enseña a Po (el panda) acerca del pasado, el presente y el futuro, justo en el momento en que él se va a dar por vencido de alcanzar su sueño de ser un maestro del kung fu. Estas son las palabras exactas que el maestro Oogway le dice: “El ayer es historia, el mañana es un misterio, pero el hoy es un obsequio, por eso se llama PRESENTE”.Amo esa frase y debo atribuirle el cambio en mi actitud respecto a la vida y el cómo me sentía respecto a mis logros.

Escuchar esa frase fue como recibir un balde de agua helada. Solía ser de esas personas que sufría por lo que suponía que mi familia pensaba de mí, quería sobremanera que mis padres se sintieran orgullosos de mis logros y me sentía frustrada por eso; mis fracasos pesaban sobre mí de manera terrible, me lamentaba a diario de las metas que no había logrado y (según yo) que ya no tenía tiempo de llevar a cabo.

Cuando nuestra mente es nuestro enemigo

Todo lo anterior estaba sujeto a una serie de elementos imaginarios que solo tenían vida en mi mente, pues no era consciente de que mientras tuviera vida podría alcanzar mis metas y, por lo tanto, ser feliz a mi manera. Para colmo de males, no me daba cuenta de que con mi actitud perjudicaba a mi familia, pues no había palabra de consuelo de parte de mi madre que me confortara.

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Al caer en cuenta de lo errada que estaba mortificándome por el pasado, preocupándome por un futuro incierto y no tener mis cinco sentidos puestos en el presente, disfrutando de lo que la vida me regalaba, me percaté que estaba perdiendo muchas posibilidades de ser feliz con quienes me amaban y con lo que tenía.

Lucha por tus sueños, se feliz disfrutando de lo que tienes ahora, agradece lo que tienes y por tu familia, pero por sobre todas las cosas, respeta a quienes te rodean, porque tus derechos y libertades culminan donde empiezan las de tu prójimo. Si hay respeto hacia los sueños de los demás, entonces podrás ser feliz, pues esa plenitud deja de ser algo personal para volverse una situación de la que podrán sacar provecho quienes te aman. No olvides que se es mucho más feliz cuando se es consciente y agradecido con el presente.

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Erika Otero Romero

Psicóloga con experiencia en trabajo con comunidades, niños y adolescentes en riesgo.