Cosas que debe saber todo hombre que ame a su pareja

Lo que nadie te ha contado sobre el síndrome premenstrual y cómo éste influye en tu matrimonio.

Erika Otero Romero

Muchos hombres se quejan de que las mujeres somos una montaña rusa de emociones. Algo así como una variante del doctor Jekyll y Mr. Hyde, pero que sigue el ciclo del hombre lobo. Unos días del mes somos todo amor, mientras que otros podríamos matar, si así lo quisiéramos. No es que esto sea una excusa, pero si quieres entender bien a tu pareja, tienes que conocer qué es el síndrome premenstrual (SPM).

Acá podría señalar una serie de causas hormonales que en realidad no vienen al caso. Lo que pretendo hacer es que los hombres, quienes tienen que aguantar con valentía esas dos caras en un solo mes, sepan cómo lidiar con esa situación y no juzgar a su compañera a la ligera. Y, como un hombre nunca ha experimentado lo que se siente en esas épocas, develaré este misterio.

Los síntomas del Síndrome Premenstrual empiezan aproximadamente dos semanas antes que baje la regla. Unas mujeres más que otras sentirán con mayor poder el atropello hormonal al que normalmente el cuerpo somete mes a mes. Junto con eso debes saber:

Duración del ciclo

El ciclo menstrual varía de 26 a 30 días: cada mujer tiene un calendario diferente.

Síntomas

En el aspecto físico, se inflaman los senos y duelen bastante. Algunas tienen cólicos y otras no, y esto no es igual siempre, en cada ciclo. Se puede llegar a tener diarrea o estreñimiento, calambres abdominales y dolor de cabeza, acné y, algunas más que otras, sienten ansiedad por comer. En el estado de ánimo, hay irritabilidad o llanto, algunas se sienten confundidas o aletargadas y —créanme— a veces uno no tiene ni idea de qué los puede provocar.

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Medicamentos

No hay medicina que “cure” los síntomas del SPM. Se toman medicamentos para reducir el dolor o la molestia física, pero eso no cambia la noria de emociones a las que nos vemos sometidas y no siempre se pueden controlar.

Realidad

NO, no es locura, histeria, somatización o invención. Es una realidad. Por ello algunas mujeres no desean tener relaciones íntimas o salir de fiesta: simplemente se sienten tan incómodas y adoloridas, que lo único que desean es estar en casa, con ropa cómoda y lo más relajadas posible.

¿Por qué es importante que sepas acerca del SPM?

Hombres y mujeres desconocen que muchas relaciones de pareja se debilitan debido a esa dualidad emocional y a las molestias físicas que las mujeres padecen, pues no saben reconocerlas, ni cómo lidiar con ellas.

¿Qué puedes hacer para ayudar a tu pareja en esos días?

Bueno, los hombres que tienen esposas que sufren con más intensidad los síntomas de SPM, se impacientan al no saber qué hacer para ayudarlas o se irritan con ellas porque están tristes o de mal humor. Algunas formas de ayudar a una mujer en medio de una “crisis” de SPM son:

  • Conforme vaya pasando el tiempo, aprende a conocer a tu compañera para así poder darte cuenta de su carácter y temperamento frecuente, y así distinguir cuándo tiene el síndrome pre menstrual y cuándo no.

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  • No temas preguntar la razón de su tristeza o mal humor; si bien es cierto que tu pareja padece el SPM, no todos sus estados emocionales se van a deber a ello.

  • Durante esos días es bueno que estés sensible a los cambios de humor de tu compañera y muestres comprensión: pueden estar provocados por el SPM. Ten en cuenta que el SPM agudiza una tristeza o una preocupación, pero no la genera, además que ella puede estar más sensitiva pero no se inventa esas emociones.

  • Las relaciones íntimas pueden resultarle molestas debido a los síntomas físicos, así que lo mejor es que tengas paciencia. De todas maneras recuerda que toda duda se resuelve con una buena comunicación.

  • Trata de que este cómoda en el aspecto de su salud física, que descanse y, si las molestias físicas son muchas, sugiérele una visita al ginecólogo.

La mujer está diseñada para dar a luz tus hijos, así que el SPM viene en su “paquete hormonal”. Es justo que sepas cómo se siente tu compañera y le ayudes. En últimas, es un aspecto más del mundo íntimo que vive una pareja.

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Erika Otero Romero

Psicóloga con experiencia en trabajo con comunidades, niños y adolescentes en riesgo.