La pornografía puede empezar en la escuela. ¿Tu hijo está seguro?
No es suficiente proteger nuestra casa, puesto que en la escuela de nuestros hijos también se encuentra la amenaza.
Denhi Chaney
Muchos expertos afirman que la pornografía es la gran plaga de nuestra generación. Por lo mismo, es fácil asumir que tal vez la primera vez que nuestros niños son expuestos a esta basura, es en la computadora de nuestro hogar. Este dato no es correcto: las estadísticas muestran que en la mayoría de los casos, nuestros hijos tienen su primer contacto con la pornografía dentro de las paredes de la escuela, a través del celular de u compañero, no por medio de una computadora. De hecho, en niños y adolescentes es el celular el que se ha convertido en el arma más poderosa de la industria pornográfica, puesto que es ahí en donde encuentran acceso de forma fácil y privada.
Ahora, como padres podemos llegar a pensar que no tenemos forma de proteger a nuestros hijos cuando están es la escuela pues no estamos ahí con ellos para aconsejarlos y distanciarlos de esta horrible plaga. No obstante, esto no indica que no los podamos proteger pues la realidad es que el protegerlos empieza en casa. De esta forma te ofrezco algunos consejos para proteger a tus hijos ANTES de que pongan un pie en la escuela y se vean vulnerables.
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Una conversación seria. Es más que importante: es vital que tengamos una primera conversación con nuestros hijos acerca de sexualidad y pornografía entre los ocho y diez años de edad (si queremos aumentar la protección, a los ocho es mejor). Tal vez pienses que son muy jóvenes, y lo son, pero no lo demasiado para no haber sido expuestos de alguna u otra forma a esta amenaza. ¿Sabías que la edad promedio que un niño ve pornografía por primera vez son los diez años de edad? Y como es promedio tenemos que asumir que muchos empiezan desde antes, es por esto que te tienes que tomar el tiempo de explicar lo que es una sexualidad sana y cómo la pornografía no lo es.
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Un celular protegido. Muchos padres tal vez lo vean como extremo, pero el peligro es demasiado grande para darle a nuestros hijos celulares con acceso a internet y diferentes aplicaciones que en realidad NO NECESITAN. Si por lo menos su celular no tiene acceso a esta basura ya tendremos una pequeña batalla ganada.
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Tomar acción con otros padres. Es esencial que tengamos comunicación con los otros padres de familia y les informemos de estos datos para que ellos tomen acción con sus propios hijos. No podemos forzarlos a que hagan lo que consideramos que es lo mejor, mas sí podemos darles la información que tenemos, y eso ya es ventaja (incluso puedes hablar con el director o directora de la escuela de este problema para que la escuela misma tome acción).
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Pláticas continuas. Este es el último punto ya que la primera conversación sabemos bien que no es suficiente. Tenemos que hablar con nuestros hijos acerca de cómo ellos perciben la sexualidad, el cambio de sus cuerpos, y en especial si ya han sido expuestos a estos videos, que nos digan cómo se sienten para así poder orientarlos. Repito, la primera conversación no es suficiente estas pláticas se tienen que convertir en algo importante en la relación que tiene con nosotros para que así él se sienta cómodo de preguntarnos cosas y no buscar la información con sus compañeros de clase.
Mientras exista la avaricia existirá la pornografía, y esta se puede encontrar tan fácilmente que puede llegar a ser desalentador en nuestro rol como padres. Sin embargo, la protección empieza desde casa y de esa forma nos podemos sentir un poco mejor cuando vayan a la escuela y se topen con la decisión de ver o alejarse, es mi esperanza que con estos consejos puedan decidir la segunda opción.
Denhi Chaney
Denhi Chaney es egresada de la Universidad de Brigham Young con maestría en Terapia de Matrimonio y Familiar. Denhi también es esposa y madre de un niño. Puedes contactarla en .
