3 cosas en las que tú debes invertir tu dinero
Tus necesidades personales y familiares se verán solventadas correctamente si tienes bien definidas las prioridades. La mejor manera de administrar la economía familiar es tu responsabilidad.
Elitania Teresa Ruvalcaba Blancas
Gastos imprevistos de mantenimiento de la casa y el automóvil; seguir con esas ganas de visitar lugares lejanos que conoces gracias a los trípticos de las agencias de viajes y por más que has hecho no has logrado concretar esa excursión; emergencias médicas que hacen tronarte los dedos porque te agarran sin fondo. Éstas son situaciones muy comunes y cotidianas a las que estás expuesta. Lo peor es que son tan frecuentes, que uno termina por estar tan acostumbrada a ellas, que vas dejando el tiempo pasar sin hacer algo al respecto. Y sí: todas estas situaciones tienen un común denominador: para realizarlas se necesita dinero.
Como ama de casa, madre de familia y trabajadora no puedes perder de vista la administración de los recursos monetarios que entran al hogar. Ya sea únicamente que se conformen de lo que percibe el jefe de familia o que se complemente con lo que tú aportas por trabajar. Cualquiera que sea el caso, el invertir el dinero de manera consiente y responsable te permitirá en su momento cubrir todas tus necesidades particulares y de familia. Por eso te recomiendo invertir en 3 cosas principalmente:
1. Tu cuidado personal
Hay una frase que dice: “Así me veo y así me siento”. El semblante y arreglo personal dicen más que 100 palabras. Por esto ten especial cuidado en tu persona: no escatimes en proveerte de lo necesario para sentirte segura, bella y sobre todo sana. Independientemente de que tengas a la mano lo necesario para tener una imagen pulcra. Es prioritario cuidar la salud, así que invierte en hacerte revisiones periódicas, piensa que la prevención implica menos gasto que el tener una enfermedad crónica declarada.
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2. Casa y familia
Tu hogar debe ser el lugar más seguro y confortable para ti y tu familia, el llegar a casa y tener la seguridad de que se cuenta con lo necesario para el descanso y confort no tiene precio; y la familia, conforme va creciendo, va modificando las necesidades de cada miembro. Por ello es primordial invertir en mobiliario y servicios que brinden bienestar a tu familia y funcionalidad a tu casa. Y para evitar gastos de reparación emergentes siempre será recomendable tengas un calendario de mantenimiento del hogar, para efectuar remodelaciones, revisiones y corrección de los problemas que se comiencen a crear antes de que el gasto pueda ser más grande. Ten muy presente que también cada miembro de la familia requiere de revisiones médicas periódicas como parte de la prevención de enfermedades, en esto tampoco debes escatimar.
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3. Ahorro
Este punto es muy importante y básico, el tener un ahorro te permitirá realizar en su momento hacer lo pertinente para cubrir los puntos anteriores (tu cuidado personal y la inversión en tu casa y familia). Acostumbra guardar una parte de la entrada monetaria y tenerla disponible para emergencias y cosas imprevistas. Tal vez pensarás que para salir de esto las tarjetas de crédito son la mejor manera de solventar estas situaciones, pero créeme que una tarjeta mal manejada puede ser una pesadilla inacabable. Mejor créate el hábito del ahorro.
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Tus necesidades personales y familiares se verán solventadas correctamente si tienes bien definidas las prioridades. La mejor manera de administrar la economía familiar es tu responsabilidad.
