La totalidad de la vida vista desde siete reflexiones espirituales
¿Buscas a Dios solo cuando lo necesitas? Es importante tener una vida espiritual que te ayudará en momentos difíciles. La totalidad de la vida vista desde siete reflexiones espirituales.
Erika Otero Romero
Semana Santa siempre es un buen momento para reflexionar; para reconocer la importancia del acercamiento a Dios, no solo en momentos de angustia y dolor. Es un momento para agrandar la fortaleza espiritual no solo de uno como individuo, sino de toda la familia.
Esa parte espiritual personal —que a veces se descuida por la cantidad inverosímil de ocupaciones diarias— ese reconciliarse con Dios, nos ayuda a enfrentar las embestidas de la vida sin tener que esperar hasta el domingo, o fechas especiales como la Semana santa.
Por esa razón me atrevo a invitarte a orar siempre, no solo para pedir favores, sino para agradecer la fortaleza y las bendiciones diarias. Hago esto para asegurarte que cuando busques a Dios lo vas a encontrar, siempre y cuando te mantengas firme en tu deseo de no volver a caer, de estacionarte en esa firmeza y de encontrar consuelo en medio del caos y el dolor. Da gracias al amor infinito de Dios, que te ayudará a crecer y a ser mejor ser humano cada día.
Me tomaré también el atrevimiento de regalarte siete reflexiones espirituales que espero que te ayuden a tener esperanza en medio de las dificultades, y que encuentres la luz al final del camino:
1. “Cuanto más grande eres en humildad, más cerca estás de la grandeza”
¿Cuántas caídas has tenido a causa de tu orgullo y tu prepotencia? Reconócete débil, acepta con humildad tus triunfos y pide ayuda en medio del fracaso, solo así estarás cada vez más cerca de encontrar que muchas situaciones dependen de ti, pero tantas otras dependen de Dios o de otras personas.
2. “No todo lo malo que te pasa es porque lo merezcas… A veces necesitas cosas malas y tropiezos en la vida para madurar y crecer como ser humano”
No culpes a Dios por lo malo que pueda llegar a pasarte. Todo, absolutamente todo lo que ocurre tiene un propósito del que siempre saldrás fortalecido y al cabo de un tiempo serás más feliz.
3. “Toda obra de amor llevada a cabo con el corazón siempre logrará acercar a la gente a Dios”
(Madre Teresa de Calcuta). O, dicho de otra manera, “quien no vive para servir, no sirve para vivir”. ¿Recuerdas la última vez que ayudaste a alguien? ¿Cómo te sentiste? Has nacido para crecer, para ser feliz y para ayudar a tu prójimo, solo así se reconoce el verdadero valor de ser un buen ser humano.
4. “Lo que logres de pie, agradécelo de rodillas. Lo que no consigas hablando, hazlo orando. Lo que tú no puedas hacer, deja que Dios lo haga por ti”
Recuerda que no todo está en tus manos. Infinidad de decisiones requieren de una guía sabia, y esta se encuentra en una comunicación efectiva con Dios.
5. “No bajes tus brazos, siempre habrá una puerta de salida, una luz de esperanza para el que cree en Dios”
La vida no es un estado de vegetación. Si luchas por alcanzar sus metas, aunque en un principio fracases, encontrarás la forma de alcanzarlas con la ayuda divina.
6. “Después de la tempestad viene la calma”
En lo personal, es una frase que me da el impulso que necesito para resistir las mareas más duras de la vida, ya que tengo la certeza de que siempre, tras una dura lucha, viene el descanso, y que invariablemente tras una gran nube está el sol.
7. “Piensa como adulto, vive como joven, aconseja como anciano y nunca dejes de soñar como niño”
El ser humano en edad adulta se encuentra en un estatus mental óptimo para comportarse de la forma más sabia posible, y qué mejor sabiduría que mantenerse responsable como los adultos, gozar de la plenitud de la vida como un joven, aconsejar con responsabilidad como los ancianos y soñar con un futuro delicioso como los niños.
No descuides tu vida espiritual, esta necesita ser alimentada con servicio y oración a fin de que puedas estar preparado para afrontar las duras épocas que trae la vida.
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Erika Otero Romero
Psicóloga con experiencia en trabajo con comunidades, niños y adolescentes en riesgo.
