Deja atrás la suplencia o el segundo lugar

La costumbre indica que los primeros lugares son los únicos que merecen ser recordados en la historia, pero nadie cuenta que para llegar a ser el primero en algo, a veces hay que saber ser el segundo.

Arturo Leonardo

Alguien dijo por ahí (quien tenga el dato histórico coméntelo, colabore en la mesa de discusión), que “la historia únicamente reconoce a los ganadores”. Tristemente esta sentencia no está muy alejada de la realidad. En el deporte y en la vida, el segundo lugar o el suplente, constantemente es relegado al olvido. Se le paga menos y no se le reconoce casi nada. Es momento de pensar que cada quien es dueño de su destino y es posible cambiar etiquetas laborales, o incluso familiares.

Steve Young es un buen ejemplo para esto. Young fue un mariscal de campo que logró lo que hasta ahora nadie ha hecho, en la mejor liga de ese deporte, la NFL: el quitarse el estigma de suplente y llegar a lo más alto. Si tienes cerca a un compañero, amigo o familiar al que le guste el futbol americano, pregúntale sobre Steve Young, te dirá que ganó el Súper Tazón 29 con los 49´s de San Francisco, pero quizá pocos recuerden que Young era la banca de un monstruo de los emparrillados: Joe Montana.

Los segundos lugares en la NFL

En este apartado quiero romper con la máxima del primer párrafo, los segundos lugares en la NFL también tienen nombre y apellido. Bart Starr fue el primer mariscal ganador de Súper Tazones, en las ediciones I y II, Zeke Bratkowski era su suplente. Babe Parilli fue banca de Joe Namath en el Súper Bowl III, mientras que Mike Livingston cuidaba las espaldas de Len Dawson ante los Vikingos. Earl Morall y Sam Havrilak apoyaron a Johnny Unitas contra los Vaqueros en el Súper Bowl V.

En la versión original de este artículo te citaba muchos, muchos ejemplos de los deportistas que funcionaron como apoyo de los grandes protagonistas deportivos. ¡Son tantos que te quedarías asombrado de cuántos son! Son tantos, que no vale la pena citarlos en detalle para no aburrirte, si acaso no eres fanático del futbol americano.

Trabajo, la clave del éxito

Claro, no estoy descubriendo el hilo negro con ese subtítulo, pero la lección que nos deja Steve Young es que nunca hay que dejar de intentarlo. Ser banca de un hombre que lo ganó todo no era nada fácil, pero siempre confió en sus capacidades.

Advertisement

Para muchas personas, el suplente quizá no exista, pero es una parte fundamental para que la empresa tenga mayor competitividad. Ahora bien, en la familia, quizá por momentos existan ciertos “roles” entre hermanos que nos parezca difícil romper. Sin embargo, piensa que nunca es tarde para cambiarlos y así apoyarse unos a otros para ser mejores.

Toma un momento para compartir ...

Arturo Leonardo

Comunicador fanático de sus hijos a quienes les relata día a día sus aventuras de música y deportes, gusta de leer lo que se cruce en su camino, piensa que el acto más revolucionario que puede existir es el de reír.