4 acciones que delatan a una persona que te envidia y qué hacer
Descubre lo que hay detrás de las actitudes envidiosas y cómo poner un alto a esas personas que obstaculizan tus sueños.
Adriana Acosta Bujan
“Te tengo envidia de la buena”, es común escuchar esta frase, incluso muchos de nosotros la hemos dicho a nuestros amigos o familiares cercanos. La envidia es un sentimiento que se genera de manera espontánea y normal, puesto que dentro de uno mismo se desea lo que el otro tiene; tal vez, pueda referirse a la suerte o al éxito.
Cuando la envidia es “sana”, se puede entender como admiración hacia los demás; esta nos impulsa y motiva a mejorar y trabajar aspectos en uno mismo, es la que nos revela los dones y talentos innatos que todavía tenemos por desarrollar.
Por ejemplo: puede ser que tus hijos no obtuvieron tan buenas notas como sus compañeros, entonces esa situación la podrás analizar y trabajar; tal vez, te motive a investigar o involucrarte más en las tareas escolares de tus hijos. Otro ejemplo, puede ser que envides el cuerpazo de tu vecina, y eso te haga reflexionar sobre tus malos hábitos alimenticios.
Muchas veces no nos enteramos de lo que realmente pueden envidiarnos las personas que conviven con nosotros, ya que estamos enfocados en nuestra propia vida. Sin embargo, ese sentimiento existe de manera mala y egoísta, es corrosivo, deshonesto, inmoral y a lo que tienden siempre es a derrotar y a hacer caer al envidiado.
Lo que nadie te dijo de la envidia
La envidia es el deseo que no se posee, lo que provoca tristeza o desdicha al observar el bien ajeno; lo que nos impulsa a creer que ese alguien tiene algo que anhelamos. Un estudio realizado Solomon E. Asch, confirmó que la envidia se genera por la falta de autoestima y confianza en nosotros mismos, creyendo que nuestro valor como personas depende de lo mucho o poco que la gente nos valore.
Esta creencia genera un complejo de inferioridad, lo cual hace que nosotros pongamos más atención a nuestras propias carencias, enojándonos por los logros y éxitos de los demás.
Lo que puede hacerte la envida ajena es obstaculizar tus sueños, deseos y metas, así como también lastimar tu autoestima, confianza y seguridad en ti mismo; incluso te excluye y aleja de las personas que realmente te aman.
Qué acciones delatan a las personas envidiosas
La envidia se relaciona con la competencia y la comparación social; como vimos anteriormente forma parte de nuestro propio concepto y autoevaluación; por ello, es que algunas personas al sentirse carentes de autoestima suelen tener comportamientos corrosivos como por ejemplo:
1 Apagan sueños
Tal vez acabas de vivir un acontecimiento estupendo y maravilloso; por fin alcanzaste tus objetivos por lo que tanto te esforzarte. Como es lógico quieres hacerlo público, buscando un reconociendo social. Pero, existirá la persona que envide tus logros personales. Por lo general, son esas personas que se dedican a restarle importancia a tus éxitos, con la finalidad de apagar tu brillo y esplendor.
Será muy difícil que se alegren por tu felicidad, teniendo comportamientos hipócritas. Siempre dirán comentarios como: “felicidades lo lograste, pero te falta….”, “no era para tanto, es muy fácil lo que hiciste”, “cualquiera puede tener lo que tu alcanzaste”; entre otros comentarios.
¿Qué puedes hacer? Alégrate por ti mismo, enfócate en tus emociones y sentimientos, sin buscar la opinión ajena. Analiza todo lo que realizaste para obtener los resultados que esperabas; nunca desvalorices tus sacrificios, perseverancia y voluntad.
2 Elogios y halagos sin sentido
Algunas veces escucharas cumplidos o elogios hacia tu persona, que no son bien intencionados. Lo podrás notar por el tono de voz que utilizan las personas, o por el contexto en el que te encuentres; incluso por sus gestos (comunicación no verbal), esas miradas que te analizan de arriba para abajo.
Una manera cordial para deshacer de la envidia, es dándole la vuelta a esos elogios; me refiero a también halagar a la otra persona, enfocándote en sus virtudes. Esa acción hará que la persona que envidia pueda ver sus cualidades, sin observar tanto las tuyas.
3 Te ridiculizan y avergüenzan en público
Cuando una persona te tiene envidia, tratará de criticarte y avergonzarte en público, haciendo comentarios negativos de ti, resaltando tus errores, defectos y humillándote, con el único deseo de tener poder sobre ti y sentirse feliz.
Es una forma de celebrar tus fracasos y debilidades, buscando la aceptación y reconocimiento social, para que te des cuenta que él o ella, no es el malo del cuento, sino que todos opinan lo mismo.
Puede ser difícil no sentirse mal por ser el foco de atención de un público y sobre todo cuando se están riendo de ti o de alguna acción equivocada que hayas cometido. Sin embargo, puedes reconocer tus fallas con humor, diciendo que nadie es perfecto y que ahora aprendiste cómo ser mejor cada día.
4 Competencia junto a ti
Son personas que siempre estarán compitiendo contigo, en todos los aspectos de tu vida. Si tienes un esposo amoroso, también querrán que encontrar uno igual al tuyo, si tienes un trabajo, buscarán uno, que si te compraste una blusa, no te sorprendas que también lo hará.
Las personas envidiosas desean cosechar su éxito primero antes que el tuyo, serán arrogantes y muchas veces desearan demostrar su superioridad.
Lo que puedes hacer es alejarte de esa persona, no la involucres en tu vida, en tus decisiones y en nada. En caso de ser un compañero laboral, lo mejor será guardar distancia, enfócate en tus responsabilidades y no compartas tus ideas, inquietudes y proyectos.
En conclusión, sentir envidia es algo natural, es parte de nuestro instinto para motivarnos a mejorar algunos aspectos en nosotros mismos. Sin embargo, debemos aprender a controlar a esas personas que su envidia puede ser perjudicial. Lo más sano será alejarse de ellas y rodearte con aquellos que sean positivos y que tengan los mismos pensamientos y objetivos que tú.