4 metas de Año Nuevo que puedes proponerte sin que queden en el olvido
Este Nuevo Año te será más fácil cumplir tus propósitos, solo tienes que leer este artículo y confiar en ti.
Adriana Acosta Bujan
Por muchos es conocida la tradición que el último día del año la mayoría de las personas escriban una lista con todas las metas y propósitos que desean cumplir para el Año Nuevo. Generalmente son doce, ya que cada una representará un mes del año.
Así que son doce nuevos propósitos, que, con muchas ilusiones, alegría, fe y esperanza se esperan concretar porque el entusiasmo está a todo lo que da. Usualmente, el primer mes es cuando se toma la iniciativa para comenzar con los nuevos hábitos o planes, pero conforme van pasando los meses, la mayoría de las metas se van quedando en el olvido y nunca llegan a realizase.
Tal vez sucede así porque olvidamos ser perseverantes, constantes y pacientes, o porque ya las metas que escribimos son obsoletas, fuera de lo real, o porque ya cambiamos de parecer, entre otras cosas. Pues al final de cuentas, son nuestros propios propósitos, que si no los cumplimos no pasa nada; así vamos año tras año sin concretar y sin cumplir muchas de nuestras metas.
Iniciando y finalizando con éxito
Sin duda, comenzar un nuevo año es lo ideal para poder encontrar la motivación que necesitamos para iniciar con nuestras metas; así que aprovechemos ese ímpetu y energía, ya que tras el correr de los meses será difícil volver a tener esas ganas; pues sabemos que al finalizar el año volveremos a proponernos las mismas cosas o parecidas.
Pero la realidad es que no se trata de escribir año tras año las mismas metas, sino de concretarlas y trabajar constantemente hasta lograrlas. Por ello sería menester replantearte tus metas, tal vez, ya no te interesen y por eso es que no te esfuerzas por lograrlas. ¿Lo has pensado así?
Entonces, ¿Qué metas puedes proponerte o replantearte para que no se queden en el olvido?
1. Comer saludable
Casi la mayoría de las personas se proponen bajar de peso año con año, ya que desean comenzar a quitarse esos kilitos de más. Ahora bien, si quieres realmente cumplir con esa meta sin que se quede en el olvido, comienza a cambiar tu manera de pensar, es decir, elimina de tu mente las palabras o ideologías relacionadas con: hacer dietas, dejar de comer, hacer horas y horas de ejercicio.
Será mejor replantearte o reformularte tu meta pensándolo de esta manera: lograr un cambio de hábitos alimenticios para aprender a comer saludable, así te sentirás mejor y cuidarás tu salud.
2. Encontrar el amor de una pareja
Aunque no lo creas, este es el propósito y meta de muchas personas, encontrar el amor de una pareja. Sin embargo, por alguna extraña razón o cosa del destino, el amor aparece casi siempre sin buscarlo.
Así que te invito a replantearte esa meta y pensar reformularla en otra dirección, por ejemplo, comenzando con el amor propio. De esa manera verás que encontrarás cosas que no habías visto en ti misma, harás cosas que creías eran imposibles para ti, te dedicarás a reír y a consentirte, porque así será la manera en cómo encuentres el amor.
El verdadero amor primero lo encuentras en tu interior. De esa manera podrás proyectar amor y por ende las personas querrán permanecer a tu lado, porque brillarás como las estrellas en la noche.
3. Tener más trabajo
Lamentablemente, algunas personas suelen creer que por tener más trabajo se tendrá más dinero, pero no siempre es así. Muchas personas se la pasan trabajando largas jornadas y siguen ganando igual.
Para que puedas cumplir la meta de obtener dinero y ser próspero por medio de tu esfuerzo y trabajo, cambia tu manera de pensar. Será mejor que tu meta sea aprender nuevas técnicas espirituales o de reprogramación mental para que vivas en abundancia y prosperidad.
4. Concretar proyectos
Muchas personas tienen sus metas claras en cuestión a sus proyectos, unos los tienen escolares, otros de trabajo, otros solo de mejoramiento personal, etc. El problema es que muchas veces esas metas dejan de tener un valor especial, porque se vuelven parte de nuestro día a día.
Para que tus metas no pierdan la emoción, lo ideal es que te pongas metas pequeñas a corto plazo, por ejemplo: si tu meta es terminar tus estudios, será ideal que una meta a corto plazo será terminar el semestre con una nueva habilidad dentro de mi área de estudio.
La idea es que seas más claro y específico en tus metas, así no caerás en el aburrimiento o las dejarás en el olvido. Recuerda que todo lo puedes lograr si te lo propones, concéntrate, esfuérzate y enfócate en lo que quieres.
Ten en mente que no solo el Nuevo Año representa un nuevo comienzo, sino que el está en tu interior las ganas de cambiar y no en un calendario o fecha determinada.