5 eventos con los que te enfrentarás al vivir en pareja
Vivir en pareja presenta una serie de eventos que pocas personas te comentan; conoce 5 de ellos.
Arturo Leonardo
Eso de vivir en pareja es más o menos como lo de ser padres, o mejor dicho, como simple y complicadamente “vivir”. Esto es, que nadie tiene un manual con la razón absoluta de cómo se debe hacer correctamente. Sin embargo, hay guías importantes y algunas situaciones en común que sin duda se van a enfrentar. Los novatos que están a punto de dejar la casa y el cuidado de mamá deben saber estas cosas cuanto antes.
Es más, el que a uno le expliquen las situaciones mínimas con las que se enfrentará en la experiencia de vivir en pareja, debería ser considerado como materia obligatoria a partir de cierta edad. Algo así como tomar una preespecialidad en alguna materia.
Con algunos años ya en este asunto de compartir oxígeno con alguien más, te quiero compartir las cinco situaciones mínimas a las que se enfrentan las nuevas parejas; claro que existen muchas más, pero éstas son como las de rigor.
1. Residuos capilares en lavabo y regadera
Vamos a llamar las cosas por su nombre, los pelos que se dejan en esos lugares, por acciones propias de cada cuerpo, no es algo a lo que todas las personas puedan sonreír. Vivir en paz significa tener plena conciencia de todo esto.
2. Visitas familiares
Durante el noviazgo, el quedar bien con la nueva familia ocupa un tiempo importante de las actividades. Ya al dar el siguiente paso, la programación evidentemente cambia y entonces se vuelve necesario llevar algo parecido a una agenda. Es muy importante tener en cuenta que, no es obligatorio ver a los familiares cada semana (claro, en el entendido de que no haya situaciones adversas o muy especiales).
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3. Lo de las fiestas con amigos
Vivir en pareja no significa en lo absoluto el dejar la vida social; esto incluso sería contraproducente, pero sí vale la pena tener en mente que después de un día complicado de trabajo, que se junta con la semana de pendientes en la casa, quizá lo que menos desea tu pareja es tener la música a todo volumen. Además, se vuelve un tema de “bienvenido a la realidad” cuando eres quien organiza las fiestas y por ende te toca tirar tres bolsas de 15 kilos de basura al día siguiente.
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4. El uso del baño en general
La primera prueba digamos ya pasó, pero ahora viene ese escabroso asunto de la tapa arriba del inodoro o que el papel higiénico ya se acabó, o que la pasta de dientes no está cerrada. También pasa que el baño se utiliza casi como refugio antibombas y no hay poder humano que pueda abrir la puerta, cosa grave cuando hay un solo baño y la otra persona lo necesita. Como ley de sana convivencia está el darle un uso y cuidado adecuado al baño, tomando en cuenta a nuestra pareja; sin embargo, de esto no platicamos cuando andamos de novios.
5. El tiempo a solas
La más importante de todas, es el definir que vivir en pareja significa el dar un paso para evolucionar como seres humanos, no para querer dominar a otro de nuestra misma especie. Habrá momentos en los que no necesitarás verlo o verla sino solamente querrás a leer sin decir nada; hacer esto también formará parte de una buena convivencia.
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Al principio las cosas pueden no ser muy fáciles, cada uno tiene sus costumbres y manías. Lo que no debes olvidar es que tienes que ser considerado y comprensivo. Habla con tu pareja para que comprenda por qué algo te molesta, en lugar de imponerle tu forma de hacer las cosas porque estás seguro que tienes la razón; tal vez conversando tú te des cuenta que al final su forma de hacer las cosas tiene una lógica. En todo caso, en la pareja ninguno debe estar por encima del otro y como dice el dicho: “hablando se entiende la gente”. Lleguen a un acuerdo mutuo y llénense de paciencia.