5 formas de maltrato que no muchos saben reconocer

“La diferencia entre agresión y maltrato la define su objetivo. Mientras la agresión se define por la lesión que provoca, el maltrato queda descrito con palabras como sometimiento, humillación, dominio, miedo, esclavitud.” Juan Antonio Cobo Plana

Erika Patricia Otero

Hay infinidad de formas en las que las personas nos hacemos daño. Desde una simple palabra, hasta una actitud pueden lastimarnos, aún más si los vínculos afectivos nos unen.

Muchas personas conocen el maltrato físico ya que es el más evidente; sin embargo, el maltrato de tipo verbal y emocional pasa desapercibido. No debería ser así porque este también deja heridas muy profundas en la vida de una persona; unas que muy difícilmente cicatrizan.

Las muchas caras del maltrato

Como decíamos, las personas solo están familiarizadas con dos formas de maltrato: el físico y el verbal. Pese a eso. hay muchas otras maneras de maltratar a una persona. Por mencionar algunas, nombraremos las siguientes cinco:

1 Maltrato psicológico o emocional

¿Te han ignorado por días sin saber por qué? ¿Un día te hablan y al otro simplemente es como si no existieras? ¿Te culpan de cosas que no eres responsable? ¿Te han avergonzado y humillado en público? Bueno, estas son solo unas pocas formas en las que alguien puede maltratarte emocional o psicológicamente.

2 Maltrato sexual

Cuando tu pareja te niega relaciones íntimas o te presionan para que accedas a ellas. Si tu pareja te niega el mismo placer que tú le concedes. Y pues ni hablemos de cuando abusan de ti, que puede suceder incluso en el matrimonio. Las relaciones íntimas deben ser consensuadas y ambos deben procurar el mismo disfrute a su pareja que el que reciben.

3 El maltrato infantil

Es quizás el más típico y normalizado con la excusa de ser un modo de disciplinar a los hijos. Va desde las comparaciones entre hermanos e iguales, hasta los golpes y las humillaciones.

Otra forma de maltrato es el acoso escolar. Ya sea que un profesor humille a un alumno o que sus mismos compañeros sean los acosadores; eso es maltrato.

4 El acoso laboral

Este es un tipo de maltrato del que poco se habla, pero que existe a puerta cerrada en muchos países. Lo pueden aplicar tanto como compañeros de trabajo como el mismo jefe. Van desde las humillaciones públicas, y hasta en algunos países los jefes golpean a sus trabajadores sin ningún tipo de vergüenza.

5 Cyber bullying

Hoy en día muchas personas se ocultan en el anonimato del internet para dañar indiscriminadamente. Desde robar fotos o información importante para publicarla y chantajearte, insultarte porque no les agradas; incluso, incitarte al suicidio.

Es tan grave la situación, que en muchos países se considera delito y tiene una pena carcelaria.

Las secuelas del maltrato

Básicamente una persona maltratada de cualquier manera, tiende que vivir con miedo.

Estos temores se manifiestan ante cualquier situación o actitud que parezca un ataque a su integridad personal. Van a vivir con estrés constante. También es muy posible que prefieran aislarse para evitar agresiones.

Es más, es posible que durante su adolescencia o juventud empiecen a experimentar ansiedad, depresión o ataques de pánico.

Por estas razones, la mejor manera de lidiar con el maltrato es poner límites a tiempo y distanciarse de personas agresivas. No permitir gritos, humillaciones, empujones; este es el primer paso a tomar porque son las señales iniciales de que serás víctima de alguien agresivo.

Pensando en esto, dejaré la siguiente metáfora que habla acerca de cómo el maltrato perjudica a las personas.

La enseñanza del papel en blanco

Este es un relato anónimo que ejemplifica de una manera clara y sencilla lo que el maltrato puede hacer a una persona.

“Contaba un predicador que, cuando era niño, su carácter impulsivo lo hacía estallar en cólera a la menor provocación.

Luego de que esos episodios sucedían, casi siempre se sentía avergonzado y batallaba por pedir excusas a quien había ofendido.

Un día su maestro, que lo vio dando justificaciones después de una explosión de ira a uno de sus compañeros de clase, lo llevó al salón, le entregó una hoja de papel lisa y le dijo:

—“¡Arrúgalo!” El muchacho, no sin cierta sorpresa, obedeció e hizo con el papel una bolita. —“Ahora”—volvió a decirle el maestro— “déjalo como estaba antes”.

Por supuesto que no pudo dejarlo como estaba. Por más que trataba, el papel siempre permanecía lleno de pliegues y de arrugas.

Entonces el maestro remató diciendo:

—”El corazón de las personas es como ese papel. La huella que dejas con tu ofensa será tan difícil de borrar como esas arrugas y esos pliegues”.

Así aprendió a ser más comprensivo y más paciente, recordando, cuando está a punto de estallar, el ejemplo del papel arrugado.

No es difícil de entender que luego de lastimar a alguien, las personas no vuelven a ser las mismas.

Solo me queda señalar que siempre estás a tiempo de salir de cualquier situación donde tu integridad corra peligro. Puedes amar mucho a alguien, necesitar mucho un empleo o gustarte mucho esa escuela o universidad; nada ni nadie merece tu sufrimiento. Recuerda amarte más y ponerte siempre en primer lugar.

Erika Patricia Otero

Psicóloga con experiencia en trabajo con comunidades, niños y adolescentes en riesgo.