5 formas en las que la INTIMIDAD con tu esposo cambia (para siempre) con el embarazo
Los cambios ocurren en la mente y el cuerpo de los dos. Si los entiendes, podrás tener la mejor intimidad de tu vida.
Mariel Reimann
Nada cambia más la intimidad con tu esposo que los embarazos y la maternidad. Para que estos cambios (en su mayoría desafiantes) no dañen tu relación, debes conocer qué le sucede a tu cuerpo y cómo lidiar con él.
Los deseos bajan y suben
Gracias a nuestras amigas las hormonas, en primer gran cambio sucede durante el primer trimestre del embarazo.
Los cambios hormonales que se provocan mientras tu cuerpo alberga una nueva vida (siendo su preocupación principal), sumado a los malestares típicos del primer trimestre, hacen que tus deseos bajen impresionantemente. Esto puede impactar tremendamente en tu relación de pareja, pero afortunadamente los cambios siguen ocurriendo y en el segundo trimestre, el deseo sexual pasa a primer plano.
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Las cosas vuelven a bajar en el tercer trimestre mientras tu cuerpo se prepara para el cambio más importante de tu vida. Sin embargo, la excepción, es la regla con cada mujer.
“Las mujeres informaron pasar por un enorme espectro de experiencias sexuales durante sus embarazos”, dicen Anne Semans y Cathy Winks en su libro Sexy Mamas, basado en un estudio hecho con la participación de 700 mujeres embarazadas.
Tu esposo también sufre los cambios
Aunque la mujer es quien carga al bebé, tu esposo sufre algunos de esos cambios que a lo mejor tú crees que sólo te están sucediendo a ti.
Los hombres no son sólo un espectador que participó en concebir a tu bebé. Ellos desde afuera, también sufren un proceso de adaptación, a través del cual, sus cuerpos y mentes tratan de absorber la nueva información, tratan de saber cómo actuar y de entender algo que ellos nunca sentirán.
Un estudio realizado en Sueciaen el que se estudió el comportamiento de 112 parejas embarazadas, llegó a la conclusión que los hombres también pasan por altos y bajos en cuanto a sus deseos sexuales durante el embarazo de sus esposas. “Van desde querer tener intimidad todo el tiempo con sus esposas hasta perder el deseo sexual por completo”, explica Michael Castleman en Psychology Today.
El placer incrementa para la mayoría
Para la mayoría de las mujeres, los embarazos hacen de la intimidad algo más placentero (al menos en el segundo trimestre). “El aumento de flujo sanguíneo en el área genital ayuda a que esto suceda”, señala Winks en su libro.
Sin embargo, el incremento de sensibilidad en estas áreas es tanto que en muchos casos las mujeres experimentan malestar.
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¿Es el sexo durante el embarazo peligroso para el bebé?
Es un miedo común y generalizado el pensar o preguntarse si el sexo durante el embarazo puede afectar al feto. Sin embargo no hay nada que temer, si la intimidad durante el embarazo es algo que te apetece, tiene más beneficios que perjuicios.
Uno de los miedos más grandes es que el sexo durante el tercer trimestre puede producir un trabajo de parto prematuro, sin embargo la ciencia sugiere algo diferente.
El Instituto Nacional del Medio Ambiente y Salud estudió 596 mujeres embarazadas en Carolina del Norte, concluyendo que la intimidad en el tercer trimestre baja el riesgo de un parto prematuro en un 66 por ciento de los casos (teniendo en cuenta que los embarazos eran normales y sin complicaciones).
¿Qué produce un parto prematuro?
El fumar, saltearse las comidas, pocas horas de sueño, las comidas picantes, el uso de cocaína, alta intensidad de actividad física y alto consumo de alcohol. La intimidad no es uno de los elementos en esta lista.
Tratando de volver a la normalidad
De acuerdo a cómo fue el parto el tiempo que debes esperar para reanudar la intimidad con tu esposo varía desde entre un par de semanas hasta un par de meses.
Esta es una de las partes más complicadas para las parejas. Los cambios no sólo han tomado lugar para la mujer, y es muy importante que lo tengas en cuenta. Tu cuerpo ha cambiado y tu esposo también pasará por un proceso de adaptación. Él sabe que ahora no sólo eres mujer, te has convertido en madre y las cosas han cambiado para siempre.
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Los deseos de tener intimidad por lo general se encuentran sumamente bajos para la mujer, y por el otro lado tu esposo quiere tu atención, mientras se adapta a esta nueva personita que ahora captura absolutamente todo tu tiempo.
Los niveles de estrógeno caen, y los de prolactina y oxitocina, aumentan para que la mujer pueda producir leche. Estas hormonas sacan el deseo sexual, y a esto hay que sumarle el cansancio.
Cómo manejen estos cambios determinará el éxito o fracaso de la intimidad
Eres madre, y nadie cambiará esto, pero también eres mujer y nada es más lindo que esto. La clave está en regresar de a poco a las relaciones sexuales, pero eso no significa que debes dejar de tener ‘intimidad’ con tu esposo.
Es sumamente importante que mantengan su cercanía y conexión como pareja. Los besos en la boca, los masajes, las caricias y hasta una ducha juntos son formas de sentirse cerca para no dejar que los cambios que ocurrieron tengan un impacto negativo. Cómo actúen ahora determinará el impacto real que estos cambios tendrán durante el resto de su matrimonio.
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“La paternidad hace meojores amantes”
Aunque la paternidad puede poner mucha presión en la intimidad de la pareja, Semans explica que también “los convierte en mejores amantes: Las cualidades que la paternidad requiere – generosidad, paciencia, protección, imaginación, compañerismo- todas se reflejan en la intimidad de la pareja. Muchas personas comparten que la paternidad ha hecho que sus relaciones sean más íntimas”.
Mariel Reimann
Mariel Reimann estudió leyes en la Universidad de Córdoba, Argentina y vive en Salt Lake City, Utah. Es madre de dos hijas que son la luz de su vida.
