5 frases para calmar a un niño enojado
Aprende qué frases puedes aplicar para que tus hijos se calmen después de hacer una rabieta.
Adriana Acosta Bujan
Los hijos son una bendición para todos los padres, ellos son una extensión de nosotros y por ello es que los amamos incondicionalmente. En ocasiones, el amor que sentimos por ellos puede hacernos cometer errores al momento de educarlos, pues al final de cuentas no existe un manual que nos guíe para criarlos.
Decirles a nuestros hijos cuando hacen alguna rabieta o berrinche frases como “Eres un niño malo”, “Eres odioso”, “Nadie te va a querer”, “Eres una vergüenza para mí”, entre otras, puede perjudicar su autoestima, seguridad y confianza.
Por tal razón es importante conocer algunas frases apropiadas que podemos utilizar en esos casos, para así evitar consecuencias graves.
Frases correctas para los niños traviesos
Sin temor a equivocarme, puedo afirmar que todos los niños en alguna ocasión hacen rabietas y berrinches, es algo común porque desean llamar la atención. Sin embargo, ese momento crucial donde el niño llora haciendo un espectáculo enfrente de toda la gente, es una situación vergonzosa para todos los padres.
Por tal razón debemos aprender cómo calmar a nuestros hijos así lograr que esos momentos se conviertan en aprendizajes y no en estrés o desesperación.
Es importante comenzar por enseñar a nuestros hijos pequeños a controlar sus emociones en cualquier situación y contexto. Nuestra responsabilidad será enseñarles a identificar el nombre correcto de cada emoción que experimentan, para así hacerlos conscientes de lo que están sintiendo y puedan comunicarse de manera asertiva.
Una vez que los niños reconozcan las emociones entonces podrás comenzar a calmarlos con las siguientes frases:
1. “Respira hondo para relajarte”
Enseñar a nuestros hijos varias técnicas de respiración y relajación en momentos de enojo y berrinches es útil para controlar las emociones negativas que generan algunas situaciones.
La respiración controlada y consiente está relacionada con la relajación, pues al momento de hacer respiraciones profundas y tomando grandes bocanadas de aire, lograremos que se oxigene nuestro cerebro y así los niños podrán calmarse.
¿Cómo hacerlo? Pide a tus hijos sentarse con la espalda recta, ambos pies deben estar completamente apoyados en el suelo, después diles que inclinen levemente la cabeza hacia delante, colocando sus manos, una en su vientre y la otra en el pecho.
Ahora sí, pídeles que tomen aire por la nariz, lento y profundamente mientras se cuenta hasta tres llenando bien de aire los pulmones, luego deberán retener el aire por tres segundos y soltarlo lentamente por la boca. Esto se debe hacer hasta que los niños se calmen.
Después de que los niños estén más tranquilos, será momento de conversar con ellos y hacerles saber que respirar hondo los hará calmarse.
2. “Si continúas gritando, no podré ayudarte”
Es común que los niños enojados griten para llamar la atención de sus padres, sin embargo decirles “No grites”, no es una buena opción porque el niño seguirá gritando y más fuerte. Así que te recomiendo utilizar esta frase para hacerle entender a tus hijos que necesitan calmarse para que puedas escucharlos y apoyarlos.
Cuando los niños tratan de explicar y comunicar lo que quieren utilizaran su razonamiento y por ende distraerán su mente y dejarán de gritar y llorar. Recuerda utilizar un tono de voz firme pero autoritario para que ellos te hagan caso.
3. “Está bien enojarse, pero hay otras maneras”
Es inevitable que todos nos enojemos en alguna ocasión, pero la idea es que esa emoción sea controlada para evitar afectar a los que nos rodean. Por ello es importante que tus hijos aprendan a enojarse de manera asertiva, controlando sus emociones.
¿Cómo lo puedes enseñar? Les puedes decir a tus hijos que cuando se sientan enojados lo que pueden hacer es hablarlo, sin temor a ser juzgados o castigados, la idea es que ellos aprendan a expresar lo que sienten.
Incluso también puedes utilizar algunas estrategias como: dibujar, ver la televisión, hacer algún deporte, escuchar música o cualquier cosa que les guste, de esa manera su mente se distraerá y su enojo disminuirá.
4. “Entiendo que no es agradable, pero tienes que lidiar con ello”
Es importante explicar a los niños que habrá muchas cosas que no son agradables, que no les gusten. Pero que de alguna manera tendrán que lidiar con ello, porque así son las reglas. En este punto puedes considerar enseñarles a los niños a ver las cosas que no les gusta con otra perspectiva, sacando de esa situación molesta y poco agradable cosas positivas.
Recuerda que siempre habrá cosas positivas y agradables en cualquier situación mala; así que te invito a encontrar lecciones de vida con tus hijos, para que tengan otra perspectiva distinta.
5. “Piensa qué soluciones puedes encontrar”
Dejar que los niños piensen y expresen en cómo pueden solucionar cualquier situación, sin duda hará que se calmen. Recuérdales que estas dispuesta a negociar y a llegar a acuerdos donde ambas partes involucradas estén conformes.
Es importante que tus hijos aprendan a controlar sus emociones. Recuerda que tú pones el ejemplo para que ellos te imiten; así que piensa bien cómo actúas y cómo te comportas enfrente de tus hijos.
Ahora ya lo sabes, aplica estas frases poderosas para evitar consecuencias graves como la pérdida de la autoestima, seguridad y confianza ¡Educa con amor y sabiduría!