Todo lo que necesita el mundo es amor

¿Cansada de vivir en medio de la violencia del mundo actual? Lee este artículo y descubre cómo un poco de amor puede cambiar tu realidad.

Erika Otero Romero

Si eres como yo, entonces eres de esas personas a las que las injusticias, la violencia y el maltrato las conmueve al punto de llegar al límite de sus emociones, dañando por completo un día que hasta ese momento era hermoso. Lo tedioso del asunto es que vivimos en un bombardeo constante de noticieros y otros medios de comunicación empeñados en restregarnos en la cara el lado gris de la vida. Por eso, cada que recibo una buena noticia, veo un vídeo que de una u otra manera restaura la fe que se debe tener en la humanidad, mostrando actos de amor y bondad hacia quien lo requiera, no dudo ni dos segundos en poner mi atención en ello y compartirlo con quien quiera ser receptor del mensaje.

La letra de una canción de The Beatles dice: “Todo lo que necesitas es amor”. Si te detienes a pensarlo, encontrarás que cada día de tu vida es activado por una fuerza invisible que hace que sigas adelante. Quizás mires los ojos de tus pequeños y te des cuenta que cada sacrificio que haces lo haces por amor a ellos. Así mirado, esa fuerza invisible te mueve a poner tu grano de arena para cambiar lo que te rodea y es eso lo que te activa a vivir a pesar de los duros embistes de la vida: el amor, siempre el amor.

A los niños les queda fácil comprender este concepto y es que ellos están menos contaminados de los problemas del diario vivir. Pese a eso, se puede aprender un poco de ellos y abrir nuestras mentes y corazones para dar al mundo esa cuota de amor que necesita, de modo que sea un mejor lugar para vivir. Te preguntarás entonces, ¿cómo puedo dar amor al mundo? Bien acá te daré tres ideas de cómo hacerlo.

1. Ayuda y respeta a tu prójimo

¿Cuántas veces has ido por la calle y has visto que a alguien se le cae un paquete? Ahora, ¿cuántas veces le has alcanzado lo que se le ha caído? Pues déjame felicitarte si eres de esas personas que lo ha hecho y, si no, pues te invito a hacerlo tanto como puedas.

De la misma manera, si cedes tu silla en el transporte público, o si tratas a todo el mundo bien -sea el portero del edificio, así como el dueño de la compañía-, entonces vas por buen camino. No olvides que tu prójimo no solo son los seres humanos: animales y plantas hacen parte de la naturaleza y, para bien o para mal, necesitas de todo lo que existe. Así que cuídalos, respétalos y tiende tu mano, en algún momento podrías ser tú quien requiera esa valiosa ayuda.

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2. Cuida de la naturaleza que te rodea

Hace poco vi un vídeo donde un elefante ingresaba a una propiedad en algún país de África, y allí el animal miró un cesto de la basura y que al lado de éste había un par de botellas, así como algunos desperdicios en el suelo. El elefante se acercó, con su trompa y la ayuda de una de sus patas levantó ambos objetos, los puso en el cesto, y luego se fue como si nada. Otro vídeo similar muestra a un cuervo haciendo exactamente lo mismo. Si a ti no te lleva a maravillarte la noble conciencia que estos “seres inferiores” tienen acerca del cuidado del planeta y piensas que la naturaleza está al servicio del hombre, te invito a tomar repensarlo. Cuida del agua, los árboles y la ciudad donde vives.

Nuestro planeta es un ser vivo y cuando entra en desequilibrio encuentra la manera de equilibrarse de nuevo. Cuando lo hace, los seres humanos somos los afectados por terremotos, tsunamis y otros fenómenos de la naturaleza altamente destructivos. Así que piénsalo dos veces antes de arrojar ese pequeño papel de caramelo al piso.

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3. Expresa afecto a tu familia y seres amados

Muchas personas van por el mundo con muchos problemas, incluso quienes más amas. Así que te invito a que por un momento dejes de pensar solo en tus asuntos y te preocupes con sinceridad de los inconvenientes de los demás. Ayúdalos -si es que puedes- con un consejo a tiempo, con una voz de aliento o expresándoles cuánto les amas y que estarás ahí a pesar de todo. Y a quienes no conoces, solo hazles la vida más agradable siendo cortés, saludando, sonriéndoles y tendiendo la mano si se presenta la oportunidad de hacerlo.

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Dar amor nunca fue más sencillo, es solo cuestión de librarte de prejuicios y temores. Vence la timidez y sal de tu zona de comodidad; no te dejes envenenar con el pesimismo y haz tu parte, que muchas personas por su lado están trabajando en lo mismo que tú.

Erika Otero Romero

Psicóloga con experiencia en trabajo con comunidades, niños y adolescentes en riesgo.