3 aspectos interesantes de celebrar el día de llevar a tu hijito al trabajo

¿No te alcanza el tiempo para estar con tu hijo después del trabajo? Pues se acerca el 28 de Abril, prepárate para que tu hijo vaya a tu trabajo.

Erika Otero Romero

En la actualidad, padres y madres se ven forzados a trabajar fuera de casa debido a la difícil situación económica que experimentan muchos países del mundo. Es tal la cantidad de tiempo que los progenitores pasan en sus lugares de trabajo, que en algunos países se ha dedicado un día para permitir a los padres y las madres llevar a sus pequeños a sus lugares de trabajo. Ello abre a los niños de todas las condiciones económicas, la posibilidad de explorar el mundo de los adultos.

¿Cómo y por qué surgió la idea de llevar los hijos al trabajo?

El día de llevar a los hijos al trabajo empezó en el año 1993 en Estados Unidos. En un principio solo se pensó en las niñas, ya que fue una iniciativa de la fundación “Ms. Foundation for Woman”. Sin embargo, para el año de 2003 se empiezo a incluir a los niños en ese plan, por lo cual ahora el programa recibe el nombre de “Take our Daughters and Sons to Work Day“.

Lo interesante de todo es que el sistema educativo estadounidense apoya esa decisión, ya que la idea general consiste en que los niños vayan dando un vistazo al mundo profesional y comiencen a interesarse por expandir sus gustos vocacionales.

Otra de las intenciones de ese día es incluir a los niños con diferentes problemas sociales y aislados de la sociedad e incentivarlos para que exploren también sus intereses y posibilidades profesionales y no limiten sus sueños.

3 aspectos a resaltar del día de llevar a tu hijo al trabajo

1. No se trata de que a la larga tu hijo se dedique a lo mismo que tú haces

Aunque si bien estás llevando tu pequeño a expandir sus pequeños horizontes, eso no quiere decir que lo hagas con la intención de que a la larga tu hijo sea el heredero de tu oficio o que sea el ejecutor y responsable de hacer TUS sueños profesionales realidad.

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La intención es obvia pero vale aclararla: el fin de llevarlo a tu trabajo es darle la oportunidad a tu niño de que conozca un poco más de ti, sepa lo que haces para llevar el pan a la mesa y se dé cuenta de que el dinero no cae de los árboles, que conseguirlo cuesta y, por lo tanto, hay que saber invertirlo.

Además de lo anterior, se le abre un mundo de conocimientos que de otra manera no podría tener y se le ayuda a ver con sus ojos infantiles el complicado pero interesante mundo de los adultos.

2. Un día descansado

Es un día laboral, eso es claro. Pese a eso es fácil pensar que te sentirás mucho más relajada y divertida, si vives en los Estados Unidos, al tener a tus niños a tu lado mirando y cuestionando todo lo que haces. Sí, resulta un reto concentrarse pero el fin último no es solo que los niños sepan en qué trabajas, sino que ellos pasen un día especial a tu lado.

3. Los niños siempre sacan el verdadero adulto que eres

Hay muchas personas que no tienen paciencia con los niños, pero lo cierto es que ellos siempre tienen el don de hacer que muestres de verdad quien eres.

Es posible que muchos de los niños con los que compartas ese día especial no sean tus hijos y sean niños cuyos padres no tienen la oportunidad laboral que tú tienes. Igual eso te ayudará a mostrarte más generoso y paciente de lo que eres a diario, así que es una ocasión para ser de nuevo ese niño o niña que un día fuiste y que aún tienes en tu interior.

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No solo ello, sino que la oportunidad de tener un día de llevar a tu hijo al trabajo, es que pasarás tiempo de calidad con tu pequeño. Algo que a veces se complica debido a lo duro y difícil de la vida laboral. Así que saca el máximo provecho a esa celebración y ayuda a tu hijo a ampliar su visión de la vida.

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Erika Otero Romero

Psicóloga con experiencia en trabajo con comunidades, niños y adolescentes en riesgo.