Amor tóxico, ¿podrías reconocerlo?
Amar es hermoso, pero a veces obnubila a las personas. Por ello, se hace necesario que sepas distinguir entre amor de verdad o un amor enfermizo.
Erika Otero Romero
¿Es amor lo que sientes, o solo una distorsión del mismo? Puede ser muy fácil confundir los sentimientos y más cuando se habla de amor. Darle una definición a ese sentimiento puede resultar difícil, más no es imposible, incluso la Biblia lo describe, en 1 Corintios 13:4-7:
“La caridad es sufrida, es benigna; la caridad no tiene envidia, la caridad no se jacta, no se envanece; no se comporta indebidamente, no busca lo suyo, no se irrita, no piensa el mal; no se regocija en la maldad, sino que se regocija en la verdad; todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta.”
La Biblia no se refiere al amor de pareja como tal, sino al amor altruista que los seres humanos debemos sentir unos por otros; pero sí que tienen similitudes. Por ejemplo: tú esperas de tu pareja que sea paciente, amable, generoso, pacífico y que no se regocije en la maldad o el sufrimiento, entre otras cualidades. Con eso presente puedes ir dándole un “cuerpo” a esa emoción a veces tan etérea y mágica.
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Pero te tengo una mala noticia, el amor puede llegar a verse distorsionado y como tal dañarte de maneras que no puedes imaginar. El amor toxico (como se llama) te genera dependencia, obsesión y una completa anulación de tu identidadal punto que permites que el otro te humille, dañe y lastime; pero estás tan obnubilada que tomar el control de tu vida se hace difícil.
Aunque sabes que “amar” de esa manera es lo más insensato, parece que la lección no se aprende bien, así que siempre es un buen momento para recordar las maneras de reconocerlo. Ten presente que poder identificar si tu amor es tóxico, es la mejor manera para superarlo.
1. Toxicidad contra romanticismo
Debes lograr establecer una diferencia entre AMOR DE VERDAD y AMOR TÓXICO; al hacerlo, vas a empezar a ir por un buen camino. Amar no es “sentir mariposas en el estómago” o creer que sin él no puedes vivir. Es todo lo contrario: lograr amar sin dependencias, sin desconfianzas, con madurez y respeto por el otro.
2. No estás en último lugar
Para saber si amas debes empezar amarte a ti misma. Parecerá obvio, pero no lo es, ya que el amor propio es lo que primero que sale por la puerta de adelante cuando entra el amor tóxico. Amarte a ti misma es la defensa más poderosa que tienes para protegerte de un mal amor.
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3. Correspondencia
Amar no es unilateral; sin embargo, hay personas que piensan que con el afecto de una sola de las partes basta para decir que se aman. Amar es igual a ser correspondido, se trata de respeto mutuo, sin posesión ni imposición. Si eres poseedora de una gran dignidad sabrás que no eres bien amada, ya que ésta es la primera en herirse; no permitas que te obliguen a traicionarte a ti misma.
4. Miedo
Si tienes miedo a ser herida, a ser engañada o a perder a tu pareja, estás en algo muy diferente a una relación con amor.
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5. Ilusión
Dicen que “el amor es ciego y va de la mano de la locura”. Si crees en ello, permíteme que te baje de la nube pues no hay nada más lejano a ello. Una relación donde se va de un lado para otro, como llevada por un huracán, no termina jamás bien, pues pierdes el control de tu vida.
6. Amor platónico
No hay nada más doloroso que amar a alguien que ni sabe que existes. Si a veces amar trae algo de dolor, imagina lo que es amar a alguien de manera platónica. Amar a alguien de esa manera hace que pierdas el respeto por ti misma, que pierdas tiempo y el control de tu vida, evita a toda costa que esto te ocurra.
Por favor, no olvides nunca que no vale la pena estropear tu dignidad por una simple fantasía.