6 comportamientos que destruyen tu matrimonio
Puede existir mucho amor, pero si comienzan a comportarse de esta manera, la relación se irá a pique.
Adriana Acosta Bujan
Todos deseamos vivir una vida de pareja llena de felicidad y armonía, donde el amor reine para siempre; sin embargo algunas veces es complicado debido a que todos pensamos y somos diferentes, por lo que es totalmente normal tener algunos desacuerdos. Pero cuando estos conflictos matrimoniales son frecuentes y no dan cabida a una reconciliación, al grado de dañar tu integridad, dignidad y salud física, se trata de una relación totalmente tóxica.
Existen personas que aunque estén unidas por el amor, la familia o cualquier otra circunstancia, pueden ser perjudiciales. Como decía mi padre “No hay peor ciego que el que no quiere ver”; lo que quiere decir que a pesar del dolor y sufrimiento que causa una persona a su pareja, le es imposible romper ese vínculo emocional, dejando su vida pasar, pensando en que algún día cambiarán.
El doctor en psicología Walter Riso afirma que será inútil desear que la pareja cambie totalmente, ya que su personalidad, identidad y educación están muy arraigadas desde la infancia. Puede ser que una persona modifique algunos hábitos o costumbres para mejorar la convivencia, pero nunca se debe esperar a que cambie tal cual queremos, puesto que estaríamos destruyendo la esencia y autenticidad que nos hace ser únicos y especiales.
¿Por qué dañamos a quien amamos?
Nadie se compromete pensando o deseando perjudicar a su pareja, puesto que el amor es el sentimiento que los fortalece día a día. Pero inconscientemente nos equivocamos, dañando a quien más queremos.
Por ello es que te comparto estos tipos de personalidad,que hacen daño a su pareja, para que puedas identificarlos y así poder arreglar tu relación de pareja.
1 El que nunca toma decisiones
Ya sea por temor a equivocarse o perjudicar la estabilidad familiar, esta persona nunca toma decisiones por más sencillas que sean. Su mundo girará dependiendo de lo que los demás quieran hacer o no, en este caso su pareja. Este comportamiento, en algunas situaciones hará que el cónyuge se sienta empoderado, fuerte e indispensable; sin darse cuenta del gran peso que recae en sus hombros.
Pero, ¿por qué puede dañarte?, simplemente porque son una pareja que tienen que tomar decisiones en conjunto, ya que en caso de que el cónyuge se equivoque toda la culpa será suya, generando sentimientos de frustración, odio y repulsión. Por tal motivo, será importante involucrarse en todas las decisiones y no dejar que solo uno de los dos las tome.
2 Los impulsivos
En este punto es todo lo contrario; como lo explicaba Sigmund Freud, la impulsividad es la fuerza que el Ello tiene sobre el Yo y el Superyó. Es decir,
No toleran la espera, son impacientes, usualmente dejan a un lado las responsabilidades y obligaciones, son propensos al enfado y a generar conflictos innecesarios creyendo que ellos tienen la absoluta razón en todo.
Algunas veces se arrepienten cuando las cosas se han salido de control, sin embargo, siguen con las mismas conductas una y otra vez, perjudicando la estabilidad física y emocional de la pareja.
3 El que controla todo
Son personas que siempre luchan por lo que piensan y sienten que nunca se equivocan, siempre extenderán su punto de vista convenciendo a cualquiera de que lo que decide es lo mejor, sin importar la opinión de su pareja. Algunas veces son chantajistas, provocando que su cónyuge actúe con sumisión.
Tal vez escuche las opiniones de su pareja, sin embargo siempre terminará haciendo lo que él o ella decida. En ocasiones, esta conducta no es visiblemente dañina, pero con el tiempo pueden llegar a perjudicar al otro, hiriendo su autoestima, seguridad y confianza.
4 Los infieles
No solo la infidelidad es tener una relación extramarital, sino que se puede llegar a ser infiel de otras formas; por ejemplo: tener pensamientos íntimos con otra persona sin llegar a tener contacto físico ya sea virtual o no; o ser infieles de manera afectiva, que se refiere a crear un vínculo emocional fuerte con alguien que no sea la pareja, entre otras.
Toda infidelidad daña al cónyuge, a la familia, a los seres queridos, amigos y a todas las personas que rodean a la pareja. Aquí en este punto, sería conveniente evaluar la relación y aceptar la parte de culpabilidad; en muchas ocasiones el perdón y arrepentimiento da paso a salvar la relación.
5 Los irrealistas
En toda relación matrimonial debe existir un equilibrio, cuando se carece de esté es lógico que la relación se vaya a pique. Cuando una persona es demasiado optimista sin ser realista, es posible que se generen conflictos maritales, ya que no será capaz de ver las consecuencias de cada decisión.
Es bueno ser positivo, actuar a favor de cada situación, encontrando un aprendizaje a las adversidades, sin embargo el problema puede dañar a la pareja cuando no se actúa y solo se piensa.
6 Los que no aceptan su responsabilidad
Una de las características que hacen que el matrimonio sea todo un éxito, es no descuidar el rol que cada uno tiene que ejercer para lograr la estabilidad familiar. Cuando la pareja comienza a ser irresponsable con sus obligaciones, es lógico que dañe y lastime la relación.
Recuerda que son una pareja que tienen que trabajar unidos para encontrar la felicidad, realizar metas y sueños en conjunto; de lo contrario será casi imposible tener un matrimonio sólido y exitoso.
Estas personalidades o comportamientos mencionados anteriormente son dañinos para el matrimonio; por lo tanto es recomendable comenzar a comunicarse en pareja, así encontrar soluciones a los problema; incluso es válido pedir ayuda a un especialista en la materia. Ten en mente que en toda relación existen conflictos, que es normal; sin embargo evita que ciertas actitudes dañen tu integridad como persona.