6 malestares típicos de ser mujer que has padecido (o que padecerás) y te avergüenza hablar de ello
Descubre algunos malestares que quizás has sufrido y no has sabido a quién recurrir para saber más de ellos y curarlos.
Erika Otero Romero
Como mujer, debo admitir que la naturaleza femenina nos pone numerosas veces en situaciones de mucha vergüenza. Y es que, ¿quién no ha dudado varias veces en programar la cita con el ginecólogo? Lo triste es que, sí o sí, son situaciones que se deben enfrentar en algún momento de la vida, pues ello hace la diferencia entre el bienestar físico y la enfermedad.
A razón de ello pongo a tu consideración seis condiciones de salud (malestares típicos) que generan bochorno en una mujer, pero ante las cuales se vuelve imprescindible acudir con el especialista:
1. Vaginosis bacteriana
Es una infección leve de la vagina que se genera cuando hay un desequilibrio entre las bacterias “buenas” o colaboradoras y las bacterias “nocivas” que todas tenemos. Este desequilibrio provoca algunas incomodidades como dolor, picazón en la zona y presencia de flujo con mal olor.
Muchas mujeres no presentan los anteriores síntomas, sin embargo, eso no hace que sea menos riesgoso, ya que de no tratarse a tiempo los problemas pueden ser mayores y predisponer el cuerpo a contraer enfermedades de trasmisión sexual; por eso, como se trata de una infección debe ser curada con antibióticos.
Para evitarla, no uses duchas vaginales, no fumes y cuida tus relaciones íntimas, porque no se transmite por entrar en contacto con asientos de inodoros, sábanas, toallas o el agua de las piscinas.
2. Rosácea
Es una afección de la piel que causa que ésta luzca de color rojo. Puede ocasionar pequeñas ulceras e inflamación en la zona afectada. Lo que ocurre es que los vasos sanguíneos superficiales se inflaman y a ello se debe la coloración. Va acompañada muchas veces de acné o pitiriasis (seborrea), o enfermedades oculares como blefaritis o queratitis.
Si eres mujer, tu tez es muy blanca y tienes de 30 a 50 años, entonces formas parte del grupo de féminas más propensas a padecerla. Lo complejo del asunto es que no se cuenta con un tratamiento médico conocido y depende de cada caso la manera en que debe ser tratado.
3. Mastitis
Este padecimiento es habitual en mujeres que recientemente han dado a luz y están pasando por el periodo de amamantamiento. La mastitis es una infección que afecta los pechos de las madres lactantes y que hace que se presenten inflamación, enrojecimiento, dolor al tacto, fiebre de más de 38 grados centígrados y fatiga.
Cuando la mastitis no se debe a una infección, podría ser causada por acumulación de leche en los conductos mamarios. Cuando sí se trata de una infección quizá se deba a la situación descrita antes o bien a gérmenes que invaden el tejido mamario a través de grietas o fisuras en los pezones.
Una buena forma de prevenirla es aplicarte compresas de agua tibia sobre la zona afectada, dar de comer al bebé y sobre todo, si es provocada por una infección, ingiere antibióticos recetados por tu médico de cabecera.
Evítala con descaso y buena alimentación, ya que si entras en un estado de alteración estarás más susceptible a infecciones. Y de contraerla, te recomiendo no dejarla desatendida, porque si no consultas a tiempo a tu medico tendrás que someterte a una cirugía para drenar un posible absceso mamario.
4. Hemorroides
Son venas varices que se pronuncian en el ano. Cuando se padecen y son crónicas pueden causar dolor y sangrado. La mejor forma de tratarlas es teniendo una buena dieta, una vida menos sedentaria y no postergar la ida al baño.
5. Vaginitis
Es una inflamación de la pared mucosa de la vagina, normalmente se acompaña de afectación vulvar, por lo que es más común hablar de vulvovaginitis.
Es muy frecuente durante la infancia y la adolescencia. Además, se diagnostica en más de 25 por ciento de las pacientes que acude al especialista por problemas ginecológicos, y se estima que 90 por ciento de las mujeres padece algún tipo de vaginitis a lo largo de su vida.
Puede deberse a una causa específica, pero hasta en 10 por ciento de los casos no se puede establecer su origen.
6. Incontinencia urinaria femenina__
Consiste en la pérdida involuntaria de orina y es causada por varias situaciones: por un aumento en la movilidad de la uretra, lesiones neurológicas o del esfínter uretral o por inflamaciones locales infecciosas como la cistitis.
Puede ser tratada de varias formas: bien sea por fármacos anticolinérgicos que favorecen la retención urinaria como oxibutina, propantelina y flavoxato, aunque tienen efectos secundarios como confusión, agitación, sequedad de boca e hipotensión.
La estimulación eléctrica es otra opción que tiene mejores resultados.
Como puedes ver, estas seis situaciones médicas típicas de la mujer pueden afectarte a cualquier edad, unas son menos graves que otras, pero lo que sí es seguro es que si no tomas las medidas necesarias, a la larga vas a sufrir las consecuencias de no haberlas tratado a tiempo. Evítate más bochornos y busca ayuda ahora que es tiempo.