6 trucos para estimular el movimiento de tu bebé durante el embarazo
Estimular el movimiento del bebé durante el embarazo servirá para desarrollar sus habilidades motrices desde muy temprano y brindará a la madre una de las sensaciones más placenteras de esta etapa.
Teresa Guadalupe Correa Pérez
Al enterarnos que estamos embarazadas nos llenamos de alegría y emoción, y a partir de estos primeros momentos en que somos conscientes de que hay un pequeño bebé que crece dentro nuestro, nos llenamos de dudas y expectativas, tales como su aspecto físico y parecido con los familiares, si es niño o niña, o cuándo empezara a moverse.
Por suerte, para nosotras esta última duda será de las primeras en resolverse, ya que desde la octava semana y cuando su cuerpo ya se está formando, el bebé empieza a moverse, pero aún es muy pequeño para que podamos sentirlo.
Las madres podemos empezar a percibirlo a partir del cuarto mes aproximadamente, y según los especialistas en medicina fetal, la mayoría de los bebés se mueven más al comienzo de la noche, ya que es cuando nos encontramos en posiciones más cómodas como estar acostadas o sentadas, las cuales proporcionan más espacio al bebé para moverse.
Además, pequeños gestos pueden estimular el movimiento del bebé dentro del útero, lo cual es muy útil, especialmente cuando es día de ecografía, ya que esto favorece que el bebé se mueva de un lado a otro y así se pueda ver mejor o se pueda descubrir si es niño o niña.
Por eso aquí te dejo algunas ideas para estimular a tu pequeño a moverse dentro de tu vientre.
Hablarle
Uno de los mejores estímulos, es conversar con el bebé, ya que así muy pronto reconocerá el sonido de tu voz y el de las personas cercanas a ti, como su padre, hermanos o abuelos, lo que incluso ayuda al desarrollo de su lenguaje y estrecha el vínculo con el exterior.
También es válido contarle cuentos o cantarle canciones de cuna, transmitiendo así la paz y seguridad que necesita para crecer sano y feliz.
Alimentos dulces
Es cierto que existe una idea popular de que el chocolate hace que los bebés se muevan mucho. Pero la realidad es que los alimentos con alto contenido de azúcar y ricos en carbohidratos tienen un índice de glucosa más alto; a causa de esto, el niño también siente ese aumento de energía en el cuerpo materno, y reacciona moviéndose con más ganas.
Audífonos sobre la barriga
Como el oído del bebé se desarrolla alrededor de la semana veinticinco de embarazo, es una excelente idea poner música instrumental tranquila o sonidos de la naturaleza sobre el vientre, lo cual hace que el bebé se relaje, y también lo ayudará a desarrollar con más éxito su lenguaje más adelante.
Incluso existe música especial para bebés que estimulan su desarrollo intelectual a largo plazo.
Caricias de mamá
Casi en el momento en nos sabemos embarazadas, las futuras madres acariciamos nuestra pancita, pues somos conscientes de que él sentirá nuestro contacto.
Este es uno de los gestos más amorosos y dulces que las mamás podemos hacer a nuestros hijos a cualquier edad y en cualquier momento, ya que en el vientre o fuera de este, el demostrar cariño es primordial para el desarrollo emocional de los seres humanos.
Además, con las tiernas caricias también mostramos al bebé que se encuentra protegido y seguro dentro de nosotras, reforzando así nuestro vínculo con ellos desde el principio de la gestación.
Ejercicios acuáticos
Ejercitarse en la piscina es una excelente opción para que las madres gestantes puedan practicar una actividad física de bajo impacto y relajarse al mismo tiempo que disfrutan el agua.
Una madre relajada es sinónimo de un bebé reconfortado y tranquilo, lo cual muy bueno, ya que hace que él bebé se mueva suavemente dentro del vientre materno.
El agua ayuda a aliviar la pesadez y la presión en las piernas, a causa de la gravedad en el cuerpo de la mujer, y así evitar la aparición de las terribles várices por insuficiencia venosa.
Colocar luces sobre el vientre
El bebé es capaz de notar la diferencia entre la luz y la oscuridad muy pronto.
Y si apuntas una fuente de luz como por ejemplo, una lámpara pequeña o un láser, a tu vientre entre la semana veintidós y la veintiséis, es muy probable que el bebé se mueva para intentar huir de la iluminación que le molesta en sus ojitos.
Por supuesto también es muy importante destacar que cada niño es un ser humano único, por lo que cada bebé tiene muchas maneras diferentes de responder a los estímulos externos, que aquí te presenté.
Con el paso del tiempo, las mamás vamos descubriendo qué es lo que más le agrada a nuestro pequeño hijo, y cómo es que este reacciona al estimular su movimiento, pues lo que funciona con algunos bebés, a otros no sirve de nada; así que ¡a disfrutar la hermosa etapa del embarazo!