6 valiosas lecciones que has aprendido a lo largo de tu vida y que DEBES compartir con tus hijos

Siempre deseas lo mejor para tus hijos y tú puedes enseñarles muchas cosas gracias a tus vivencias. Este artículo te orienta un poco acerca de lo que puedes enseñarles gracias a tus errores como tus aciertos

Erika Otero Romero

Hay situaciones y cosas en tu pasado de las que seguro te avergüenzas, y si pudieras retroceder el tiempo, -estoy por completo convencida-no volverías a hacer, lo sé porque yo he cometido muchos errores de los que me he arrepentido; pero si algún beneficio debo otorgarles es que he aprendido de ellos, en última instancia, de ese tipo de cosas está hecha la vida ¿De qué otra manera podríamos madurar si no?

Con todo eso, es inevitable no pensar en lo que podrías decirle a tu yo de hace unos 10 o 15 años si lo tuvieras en frente, desde luego que es improbable. Sin embargo, lo que sí no es imposible es la manera de cómo puedes utilizar todo ese conocimiento adquirido gracias a tus experiencias, errores y fracasos de antaño, y lo más relevante, con quienes lo puedes compartir.

Las anteriores son suficientes razones para concienciarte acerca de lo que puedes compartir con tus seres amados de tus valiosas experiencias. Por ello acá te ofreceré algunas ideas al respecto que espero te sean de utilidad.

Enseña sobre el amor

Al respecto sabes que no todo en ésta área es un camino de rosas pues ellas tienen sus espinas; aun así, al amor no se le debe tener miedo ya que bien experimentado puede ser una de las sensaciones más sublimes que un ser humano puede tener.

Aunque el amor no garantiza que se será feliz para siempre con alguien, sí asegura que siempre llega a la vida con mil caras, en mil personas y en cualquiera de sus formas se va a ser feliz por muchos momentos y eso en realidad vale mucho la pena.

Sobre la manera de llegar a ser una mejor versión de sí mismo

Es justo que hables a tus hijos sobre las pruebas de la vida, ya que de tu propia mano sabes que aunque unos días pueden ser muy felices y bendecidos, otros son muy duros al punto que se llega a pensar que las dificultades jamás pasarán, pese a eso, sabes que siempre se sale más fuerte y con una visión más amplia y positiva de la vida, ¡claro! si se sabe asumir con paciencia y humildad el momento de probación.

Acerca de las metas y los sueños

Es bueno que aconsejes acerca de éste tema ya que muchas veces el miedo, la inseguridad en las propias capacidades hacen que las personas se pongan barreras mentales que impiden ver más allá de las posibilidades. Sí, van a haber tiempos muy malos, pero también sabes que llegarán miles y cientos de bendiciones si se confía en si mismo, pero sobre todo en Dios.

Sobre la muerte

Tan natural como el nacimiento es un tema que muchos temen, la muerte no es una situación que se pueda negar o tapar con un dedo, ya que a la larga todos las personas tienen que pasar por ella y lo que se sienten perder a un ser amado.

Con todo lo que la muerte puede llegar a significar, lo que vale no es llorar por la pérdida de esas personas tan valiosas para uno, sino que lo valioso son los momentos que se viven cada instante con los seres amados, y que gracias a esos recuerdos y experiencias que ellos van a estar contigo para siempre.

Sobre la vida misma

La vida como tal es un laberinto que no sabes qué traerá al siguiente día por más que todo se tenga fríamente calculado. Es justo que tus pequeños sepan que lo que vale es que no se niegue a experimentar, pero que en ese aspecto sepa discernir lo bueno de lo malo y así no quedará atrapado en un camino sin salida.

La vida está hecha de vivencias y es gracias a ello que se crece, se madura y se disfruta en la vejez, al fin y al cabo lo que se vive y se aprende es lo único que las personas se llevan de esta existencia.

Sobre los sentimientos y emociones negativas

Algo importante que tus hijos deberían saber es que es natural sentir rabia, molestia, tristeza e incluso odio, pero una cosa es sentirlo por un corto periodo de tiempo y otra es permitir que anide dentro de uno.

Con ese tipo de emociones lo más adecuado es sentirlas y sacarlas tan rápido como sea posible, ya que a la larga, si se les permite quedarse dentro de sí, harán que la persona sea infeliz y lúgubre hasta el fin de sus días.

Enséñale también acerca del perdón, de aprender a amar pero sobre todas las cosas es necesario amarse a sí mismo, así se aprende a perdonar pero sin otorgar la posibilidad de que te dañen una y otra vez.

Por último, a ti que me estás leyendo, te recomiendo que sigas abierta a todo lo que vivas y que sigas enseñando con amor a los tuyos, esa quizás sea la mejor herencia que le puedas dejar a tus seres amados

Como siempre te deseo lo mejor.

Erika Otero Romero

Psicóloga con experiencia en trabajo con comunidades, niños y adolescentes en riesgo.