Hay una aventura amorosa (infidelidad) que todos los hombres deben tener

Cada esposo tiene que tener una aventura amorosa o de lo contrario su matrimonio fracasará.

Alex Phippen

Cada esposo tiene que tener una aventura amorosa o de lo contrario su matrimonio fracasará.

Repito: Cada esposo tiene que tener una aventura o de lo contrario su matrimonio fracasará. Antes de que entres en cólera ante esta declaración, déjame explicarme.

Estamos en el año 2016 – un tiempo lleno de distracciones, y luego, más distracciones. El dinero, los deportes, los teléfonos inteligentes, las redes sociales, la política, Netflix, los acontecimientos mundiales, fitness, el éxito y sí, incluso Pokémon. Todos compiten por nuestra atención.

Por favor, no malinterpreten lo que estoy tratando de decir. Estas son todas cosas buenas en sí mismas y ninguna de ellas son malas, pero no obstante, son distracciones (lo siento, Pikachu). Y la realidad es la siguiente: Estas cosas no sólo compiten por nuestra atención, sino que están ganándola a diario.

Los hombres, que sin exagerar la verdad, podemos decir que pasan más tiempo con una o más de estas distracciones de lo que pasan con su esposa. Y aunque este artículo se dirige principalmente a los hombres, este problema va en ambos sentidos y también puede ser perjudicial para las mujeres.

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Entonces, ¿Con quién estamos casados? ¿Con nuestros teléfonos? ¿Con el trabajo? ¿ESPN? ¿Con los medios de comunicación social? ¿O estamos comprometidos con la mujer a quien le juramos amor y hacerla feliz todos los días durante el resto de nuestras vidas?

Las estadísticas modernas dicen que aunque la mayoría elegiría a su esposa como la persona con quien están casados, no es lo que sucede en la realidad. Los estudios revelan que estamos, de hecho, casados con esas distracciones que nos traen alegría instantánea, sin embargo, no tienen forma de felicidad a largo plazo.

Mentirnos a nosotros mismos y actuando como esta no es la realidad en que vivimos no es una solución. Podría hacernos sentir mejor, pero eso no cambia nada. La única manera de solucionar este problema, que crece a pasos agigantados, es teniendo una aventura con tu esposa.

De todas las “cosas” en el mundo, tu esposa debería ser tu único centro de atención; ella es tu todo, o al menos debería ser. Ella es un ser vivo, ser humano que tiene necesidades, sentimientos, deseos y aspiraciones como tú. Los otros objetos inanimados con los que pasamos nuestro tiempo, no tienen ninguna de estas cualidades. No requieren ningún amor y seguirán funcionando sin tu cuidado y atención, pero tu esposa te necesita.

Ve la aventura que vas a tener con tu esposa como una oportunidad para volver a conectarte y para devolverle la vida a tu matrimonio. Demuéstrale que tú quieres que sea tu prioridad número uno. Juntos, pueden hacer planes de cómo pueden pasar más tiempo juntos. Decide qué es lo que vas a hacer para liberarte de las distracciones que no enriquecen tu vida.

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Cada día será una batalla y esta aventura recientemente descubierta no va a suceder de la noche a la mañana. Te demandará autocontrol y disciplina si es que en realidad quieres tener esta aventura con tu esposa, sin que el mundo se dé cuenta.

Dentro de unos años podrá mirar hacia el pasado y verás un matrimonio feliz y te darás cuenta de que esta aventura es una de las mejores decisiones que he tomado.

Por supuesto, nadie es perfecto y, sin duda, a veces te enfrentarás a ti mismo tratando de reavivar la llama de tus antiguas distracciones. Estas tentaciones que te atrapan no van a desaparecer sólo porque dejaste de prestarles atención. Siempre habrá distracciones nuevas, más grandes, mejores y más llamativos que tratarán de seducirte y de encontrar una manera para que dejes de amar a tu esposa. No cedas. Tú puedes hacer esto.

La unidad entre una pareja requiere sacrificio. Esto significa renunciar a una cosa por otra. Después de leer este artículo, ¿crees que serás capaz de identificar la respuesta a esta poderosa pregunta: A qué estás dispuesto a renunciar para ser más fiel a tu esposa?

Recuerde que las relaciones no son reemplazables, especialmente el vínculo entre tú y tu esposa. El matrimonio es diferente a todas las demás reacciones. No se puede simplemente comprar una nueva, renovar la suscripción o actualizar a una versión mejor si se rompe.

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Winston Churchill dijo una vez: “Mi logro más brillante fue mi capacidad de ser capaz de convencer a mi esposa de casarse conmigo”.

Si llevamos las palabras de Churchill un paso más lejos, la cuestión más importante entonces es: ¿Qué estás haciendo ahora para convencer a tu esposa para que se quede contigo? ¿Está mostrándole el mismo tipo de amor que le demostrabas al principio, o has dejado que las cosas superficiales de tu vida te hayan dejado caer en la complacencia?

Olvida, renuncia, y desecha cualquier cosa que esté drenando tu amor y dejando poco tiempo para pasar con tu esposa.

Ponle fin a tu matrimonio con el mundo y centrarse en el fortalecimiento del vínculo que tienes con tu esposa. Esta es la única relación que no se desvanecerá con el tiempo y la única aventura amorosa que cada hombre debe tener.

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Traducido por Mariel Reimann de su versión original There’s one affair that every husband should have, de Alex Phippen.

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