7 razones para que tu bebé no utilice el andador
Si tu hijo está empezando a gatear, por favor lee este artículo.
Camila Ignacia Gómez González
Hasta hace muy pocos años atrás era absolutamente normal pensar en la compra del andador para aquellos bebés que estaban aprendiendo a caminar. Se creía que era la mejor opción para que aprendieran a estabilizarse, sin embargo, con el pasar de los años algunas asociaciones descubrieron que su uso perjudica a los pequeños. ¿Cuáles son los motivos que llevan a algunos especialistas a no recomendar su uso? Te cuento a continuación:
1. Accidentes caseros
Ya sea producto del choque con algunos muebles, caídas desde alturas (como las escaleras) o por descuido de un adulto, muchos niños resultan gravemente heridos.
2. Enemigo del gateo
Lejos de favorecer el desarrollo muscular, el andador provoca que los niños sean sentados en una posición que no favorece una la postura correcta y que tampoco les permite desarrollar de manera adecuada los músculos, pues se ven “atrapados”, sin poder desplazarse por ellos mismos mediante el gateo.
3. Priva de experiencias sensoriales
El gateo, permite que los niños puedan desarrollar los sentidos de manera autónoma, fortalece sus músculos y les permite conocer el mundo a su ritmo. El uso del andador obstaculiza todo ello.
4. No permite desarrollar el equilibrio
Tal como lees: el uso del andador retrasa enormemente el desarrollo del equilibrio, lo que lleva a los niños a pararse por sí mismos con notable diferencia de quienes no lo han usado nunca.
5. Responsable de lesiones en rodillas y pies
Al estar sentados en una posición poco cómoda, los niños cargan su peso en las rodillas y como consecuencia se vuelven vulnerables a sufrir lesiones que pueden afectar su crecimiento.
Lo mismo con los pies, al andar en puntillas no les permite apoyar como es debido el pie, haciéndoles susceptibles a malformaciones futuras.
6. No logran controlar la velocidad con que se desplazan
No es necesario que los niños pasen mucho tiempo dentro del andador para que noten que pueden “jugar a correr”. Y como es lógico, no miden los riesgos a los que se exponen al lanzarse en contra de los objetos, tirar los manteles de la mesa y botar algunos adornos de gran peso. De hecho, los indicadores muestran que los niños en andadores son más propensos a quemarse que los otros que no lo usan.
7. No reporta ningún beneficio
Al menos así lo han notado diferentes especialistas, logrando prohibir su uso, comercialización y exportación en países como Estados Unidos, Canadá y algunos otros tantos de Europa.
Alternativas al andador
Entonces, ¿cómo fomentar el desarrollo de tu bebé?, pues es sencillo:
-
Permítele estar libre, más allá de buscar algún tipo de aparato que pueda ayudarle a “divertirse”.
-
Ofrece la posibilidad de estar en el suelo, por supuesto en un área limpia, sin peligros y deja que pueda moverse con libertad.
-
Ayúdale cuando notes que ha comenzado el tiempo de ponerse de pie, pero no le fuerces a estar parado más tiempo del que tu bebé demuestre que es el correcto. Notarás que está cansado cuando luego de algunos segundos, prefiera sentarse a seguir avanzando.
-
No le enseñes a correr antes que a caminar.
Esta etapa en el desarrollo de tu bebé puede ser agotadora, pero disfrútala, cuando te detengas a mirar ya estará corriendo por sí solo.