8 formas de saber si tu esposo está sólo FÍSICAMENTE contigo, pero su CORAZÓN ya te dejó …

Si estas señales están presentes, el amor se ha acabado. Si sólo algunas están presentes, es hora de que SALVES tu relación.

Mariel Reimann

A veces el amor en una relación se acaba y por más que tratemos de tapar el sol con un dedo, tarde o temprano, vamos a tener que enfrentarnos a esta dolorosa verdad. Lo bueno de saber qué es lo que en realidad está pasando con nuestra pareja, es que muchas de estas cosas pueden ser remediadas, si son detectadas a tiempo.

Aún más frecuentemente de lo que nos gustaría, tanto hombres como mujeres, casi como sin darnos cuenta, dejamos de amar a esa persona con quien alguna vez soñamos pasar el resto de nuestra vida juntos. Sin embargo, nos seguimos quedando juntos por los hijos, las cosas materiales, miedo, costumbre, comodidad, etc.

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Equivocadamente, esta no es la solución. Si ya no amas a alguien, pero decides quedarte de todos modos, más vale que trabajes en enamorarte nuevamente de esa persona y en ser felices otra vez. Nadie merece que le mientan amor y que se queden a su lado mientras no le dan la libertad para encontrar a alguien que realmente puedan amarla/o.

¿Cómo saber si el amor murió?

1. El contacto físico desaparece

Sí, una de las señales más evidentes de la presencia o de la ausencia del amor en un matrimonio, es el contacto físico. Aunque muchos piensen que se puede tener intimidad sin sentir nada, este concepto es totalmente equivocado, al menos para las parejas entre las que alguna vez hubo amor.

Si alguna vez se amaron, es imposible tener intimidad sin sentir nada. Por ello, uno de los primeros cambios que notarás será la falta de contacto físico, la ausencia de besos, y hasta el rechazo, cada vez que tú trates de acercarte.

2. Exclusión de los círculos sociales que antes compartían

La separación emocional viene acompañada de separación social. Cuando una pareja ha estado junta por mucho tiempo, es muy común que hayan creado un círculo social que comparten. Cuando uno de los dos ha dejado de amar al otro, es muy común que se comiencen a hacer cambios en esas relaciones.

Ha dejado de amarte, pero eso no significa que no ame a sus amigos. Si comienzas a ver que él hace reuniones en las que no estás incluida o deja de frecuentar a un cierto grupo de los amigos que antes tenían en común, es muy probable que él no sienta lo mismo que antes sentía por ti.

3. Mayor independencia y menos necesidad de ti

Es casi como si fueran compañeros de vivienda, o como si él fuera un inquilino en tu casa. Te habla y es amable contigo (o no), pero cada vez que comenta un problema y tú le ofreces ayuda, él te la rechaza y prefiere pedirle ayuda hasta a sus compañeros de trabajo, antes de sentir que tiene alguna obligación contigo.

4. Vive como si no hubiera un mañana

Ya no habla del futuro, y si lo hace, sientes como si lo estuviera haciendo por obligación. No le interesa hacer ningún tipo de planes a largo plazo contigo, no le interesa ayudarte con las cosas que se rompen en la casa, no le entusiasman las vacaciones, ni hablar de proyectos juntos.

Hay una separación emocional obvia entre cómo tu vives la relación y cómo la vive él.

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5. Si te dice que te ama, se siente totalmente forzado

O se lo tienes que preguntar tú, o si él lo dice es simplemente por qué tú se lo dijiste primero. Atención, si aún te contesta que te ama, aunque tú seas quien lo inició, es una buena señal, es decir, aún algo del vestigio de ese amor queda entre los dos.

6. Pasa más tiempo fuera de la casa que con la familia

Tiene miles de excusas que a la vez pueden sonar como muy buenas razones para no verte y no pasar tiempo con la familia. Muchos, hasta buscan un segundo trabajo, que si bien ayuda monetariamente, no ayuda para nada a la relación.

Por lo general las excusas que se usan son tan buenas que te pueden parecer como razones validas, y lo serían, pero en otro tipo de circunstancias, no cuando nunca pasa más que la noche en la casa, y a veces, ni siquiera eso.

7. Hace cosas con tus hijos, pero tú no estás incluida en el paquete

Es obvio que aún ama a sus hijos y pasar tiempo con ellos es importante, pero no quiere que tú estés incluida en esos planes.

8. Le da igual lo que tú hagas o dejes de hacer

Lo que antes le daba celos o le causaba inseguridad, ahora no parece ni siquiera notarlo. No le importa si te vas o si te pasas todo el día en la casa; si sales con tus amigas no te pregunta a dónde van o qué hicieron; no le importa lo que llevas puesto, ni siquiera nota qué es lo que tienes puesto.

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Mariel Reimann

Mariel Reimann estudió leyes en la Universidad de Córdoba, Argentina y vive en Salt Lake City, Utah. Es madre de dos hijas que son la luz de su vida.