8 señales que tienes el potencial de ser obeso (y cómo puedes revertirlo)
No dejes que la obesidad haga estragos en ti. ¿Te sientes identificado con estas señales?
Fernanda Gonzalez Casafús
La obesidad es un flagelo que azota a miles de personas en todo el mundo. Es decir, no está lejos de nosotros. Más allá de la cuestión estética, el exceso de grasa corporal acarrea un sinfín de problemas para la salud. A pesar de que el estilo de vida actual hace que muchas personas sean proclives al aumento de peso, es necesario reflexionar acerca de nuestros hábitos cotidianos que hacen que tengamos el potencial de ser obesos.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), la obesidad se ha triplicado en el mundo entero desde el año 1975; y hasta el año 2016, más de 650 millones de personas eran obesas. Esto coincide con las grandes transformaciones sociales y culturales de las últimas décadas, que han hecho que llevemos una vida sedentaria, y que han cambiado nuestra alimentación de forma drástica.
La obesidad es un gran desafío para las políticas públicas de los gobiernos actuales. Los planes de acción contra la obesidad deberían de implementarse de forma integral, para asegurar una correcta prevención y tratamiento de la obesidad. En México, en el Estado de Sonora, el Presidente Municipal de Hermosillo, Manuel Maloro Acosta, ha aunado esfuerzos con su equipo para mejorar la salud de la comunidad al poner en marcha programas como “Médico en tu Colonia“, en el que más de 27 mil personas ya cuentan con asesoramiento gratuito y de calidad en el tema de la salud.
Señales que indican que tienes potencial de ser obeso
Asimismo, hay algunas señales cotidianas en nuestra vida que pueden indicarnos que tenemos ciertas probabilidades de convertirnos en obesos. Revísalas a continuación:
1. Dejas la luz encendida de noche
Al parecer, dejar la luz encendida de noche puede hacer que esto afecte el horario de las comidas, y en consecuencia, derive en sobrepeso. SegúnLive Science, y de acuerdo con un estudio hecho con ratones por la Universidad Estatal de Ohio, los ratones expuestos a una luz tenue en la noche ganaron un 50 por ciento más de peso durante un período de ocho semanas que los ratones que pasaron la noche en la oscuridad total. Los científicos aseguran que esto mismo podría suceder en los humanos.
2. Has perdido tu empleo
Ha afirmado la revista Forbes, y según una investigación, son tres factores los que inciden en el aumento de peso tras la pérdida del empleo: carencia de la autoestima, un estilo de vida más sedentario, y menos dinero para gastar en comida y membresía en un gimnasio. No suena descabellado si tenemos en cuenta que el estilo de vida actual relaciona el éxito en la vida únicamente con el éxito profesional. Así, una persona que pierde su trabajo se sentirá excluida y probablemente, en un efecto de compensación, coma de más.
3. Llevas una vida social pobre
La interacción personal con nuestros pares es sumamente beneficiosa para nuestra salud física y psíquica. Cuando alguien no tiene amigos o simplemente le cuesta hacer relaciones, encuentra muchas veces refugio en la comida y esto puede aumentar las posibilidades de que la persona se convierta rápidamente en un ser obeso.
4. Comes estando distraído
La alimentación consciente es un camino seguro a una vida más saludable. Masticar los alimentos correctamente, saborearlos y comer en forma pausada y tranquila es un buen antídoto contra la obesidad. Comer pensando en lo que estamos haciendo ayuda a dejar de lado una actitud compulsiva y nos brinda la posibilidad de darnos cuenta realmente de si lo que sentimos es hambre o ansiedad.
5. No duermes lo suficiente
Una investigación sobre sueño y obesidad, publicada por la Biblioteca Nacional de Medicina, sostiene que la mala calidad del sueño, así como la pérdida del sueño en general, son factores de riesgo para el desarrollo de la obesidad. El sueño es un importante modulador de la función neuroendocrina y el metabolismo de la glucosa, y la pérdida de sueño ha resultado en alteraciones metabólicas y endocrinas, lo que aumentan el riesgo de padecer sobrepeso.
6. Tu genética
Es uno de los factores al que más le atribuimos responsabilidad en el aumento de peso. De acuerdo con Live Science, un estudio científico identificó a 18 nuevos marcadores genéticos que pueden desempeñar un papel en la obesidad y a 13 nuevos marcadores que pueden ayudar a determinar si la grasa se acumula en la cintura o las caderas. Asimismo, existen genes que regulan el apetito, y otro que influye en la insulina en el cuerpo. Todos estos genes pueden heredarse.
7. Ingieres demasiadas comidas de dieta
Tal vez pienses que comiendo alimentos bajos en calorías estés comiendo sano. Sin embargo, la mayoría de los mismos sólo reduce tu ingesta calórica, pero hace que consumas porciones más grandes. Asimismo, muchas personas aumentan su ingesta cuando comen alimentos dietéticos, al no sentirse completamente satisfechos.
8. Estás estresado de manera constante
El estrés es un factor clave en el aumento de peso. El estrés, la tensión y la ansiedad pueden llevar a una persona a comer de más, y a comer entre horas, según la página Salud y Sicología. Muchas veces se confunde la sensación de ansiedad con el apetito y la persona consume calorías en exceso. Si llevas una vida demasiado estresada, tienes potencial de convertirte en obeso.
Revertir el aumento de peso
Según la OMS, son tres acciones básicas las que nos permitirán revertir el aumento de peso:
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Limitar la ingesta de grasas y azúcares.
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Aumentar el consumo de frutas y verduras.
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Realizar una actividad física periódica.
Si te sientes identificado con algunas o muchas de estas señales, es necesario que tomes las riendas de tu vida y comiences a poner a tu salud en primer lugar. La obesidad no es una mera cuestión de belleza, es por ello que le debemos brindar merecida importancia. Puedes comenzar asesorándote con un nutricionista acerca del mejor plan alimenticio para ti, así como comenzar a llevar una vida más saludable, haciendo ejercicios y llevando un control de lo que comes.
En Hermosillo, Sonora, los ciudadanos pueden acceder al programa “Médico en tu Colonia“, para asesorarse acerca del cuidado de su salud integral, así como a tratamientos gratuitos y de calidad. El programa ha hecho que miles de personas tengan acceso a la atención sanitaria, partiendo de estrategias competitivas basadas en la equidad y en un mejor servicio para la comunidad en general.