Una mujer prohíbe que la bebé de su cuñada vaya a su cumpleaños por una razón desgarradora

A veces un profundo dolor puede producir una situación demasiado tensa en la familia ¿harías lo mismo que hizo esta mujer?

Fernanda Gonzalez Casafús

Para quienes tenemos hijos, compartir momentos en familia es algo sumamente agradable. Sin embargo, aquellas personas que no logran concebir un hijo propio puede resultarles ciertamente doloroso ver a una madre con su pequeño bebé. Y cuando esa madre es tu cuñada, puede ser aún más desolador.

Mirror recoge la historia de una madre que pidió una opinión acerca de una situación acontecida en su familia a través del famoso foro de madres llamado Mumsnet. En la misma, compartió su historia buscando apoyo, pues se siente devastada que su pequeña bebé sea excluida de las fiestas familiares. Y la razón es simplemente desgarradora.

La infertilidad que duele

La usuaria que publicó el mensaje contó que es la menor de 4 hermanos y que tiene una bebé, la cual es la primer nieta de sus padres. Su hermano y la esposa han estado tratando de concebir un hijo durante los últimos 4 años, sin éxito, por lo que ahora poco a poco la han ido excluyendo a ella de los eventos familiares.

Estoy muy cerca de mi hermano y es muy complaciente con la gente. Su esposa me ignoró por muchos eventos familiares, a lo que mi hermano me dijo que era difícil para ella (algo que yo entiendo)” dijo la mujer en el foro, y continuó: “Mi hermano cumplirá 40 años y tendrá un fin de semana lleno de celebraciones. Es una gran fiesta familiar donde todos los niños de su lado han sido invitados, incluyendo sus sobrinas y sobrinos. Mi pareja y yo hemos sido invitadas pero no mi hija, ya que es muy difícil para ella verla” dijo. Y contó que su hermano ve a su sobrinita pero solo, sin la compañía de su mujer porque para ella es muy doloroso ver la bebé.

Para finalizar, la mujer escribió “¿No sería razonable tomar esto personalmente? Obviamente no iré a ningún lado sin mi bebé”. Y a partir de allí, una catarata de comentarios se hicieron presentes, apoyando a esta mujer que no puede entender cómo su cuñada no puede incluirla en los festejos familiares.

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Es entendible que para la mujer del hermano sea tan doloroso ver a la bebé, sabiendo que no consigue quedar embarazada. Sin embargo, es lógico también que la madre se lo tome como algo personal porque todos los niños de la otra parte de la familia fueron invitados, pero no su hija. ¿Por qué le dolería ver a su bebé y no a los demás niños?

Las madres que respondieron al hilo de la conversación dieron su opinión al respecto. Algunas dejaron entrever que sospechaban acerca de los verdaderos motivos de la exclusión , puesto que podría ser una cuestión que va más allá de la cuestión dolorosa de la infertilidad. Una mujer coincidió con esta madre en que se trata de una cuestión personal, y escribió “¿Prohibir a tu bebé de 4 meses e invitar a otros niños? ¿Cómo se supone que no debe tomarlo personalmente?”

Una madre, reflexionó aún más profundamente y acotó “También me pregunté si tu embarazo coincidió con un embarazo que ella perdió. Eso explicaría por qué está enfocando su dolor en tu hija”. Y otra madre, siendo más empática dijo “Esto es horrible para tí, pero seguramente también lo sea para ella”

El dolor emocional de no poder concebir

Tengo dos hijos y me siento sumamente bendecida por ello. Puedo ponerme en la piel de alguien que anhela con alma y cuerpo llevar un bebé en su vientre, y que al no lograrlo durante tanto tiempo sus fuerzas y su voluntad se vean doblegadas.

El impacto emocional que causa en una mujer el hecho de no poder concebir un hijo es tal que no afecta sólo su plano individual sino también social y de pareja. Se nos inculca desde pequeñas que nacimos para ser madres y en muchos casos, cuando este mandato social no se cumple nos sentimos frustradas y con la sensación de que no estamos “completas”.

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Las presiones sociales juegan en contra muchas veces en la carrera por tener un hijo. Además, en muchas ocasiones la sociedad misma es la que minimiza el dolor que causa el no poder concebir un hijo o perderlo.

Causas de la infertilidad

De acuerdo a la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, las causas de la infertilidad en una mujer van desde lo físico hasta lo emocional. Entre las causas físicas, se pueden mencionar:

  • Trastornos autoimmunitarios

  • Defectos congénitos modificadores el tracto reproductor

  • Cáncer o tumor

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  • Trastornos de la coagulación

  • Diabetes

  • Consumo excesivo de alcohol

  • Ejercicio excesivo

  • Trastornos alimentarios o desnutrición

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  • Neoplasias en el útero y el cuello uterino

  • Desequilibrios hormonales

  • Obesidad

  • Edad avanzada

  • Quistes ováricos y síndrome de ovario poliquístico

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  • Infección pélvica o enfermedad inflamatoria pélvica

  • Cicatrización a raíz de infección de transmisión sexual

  • Endometriosis

  • Tabaquismo

  • Enfermedad tiroidea

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Una mujer alcanza su máxima capacidad fértil en el lapso etario de los 20 a los 25 años. Y luego, a partir de los 35 años las posibilidades de quedar embarazadas bajan drásticamente año a año.

Existen muchos tratamientos en la actualidad que pueden hacer que las parejas logren concebir un hijo. Sin embargo esa posibilidad no está abierta a toda la sociedad en algunas partes del mundo, pues suelen ser tratamientos demasiado caros. Según el sitio Baby Center, en Estados Unidos por ejemplo, el costo promedio para una fertilización in vitro ronda los 12 mil dólares, y no siempre quedan embarazadas en el primer intento.

No bajar los brazos

Aunque a veces las parejas tiendan a sentir una gran desilusión cuando buscan un hijo una y otra vez sin conseguirlo, nunca se debe bajar los brazos pues el milagro de la vida sólo lo maneja Dios.

En mi familia hay una historia que siempre me gusta contar. La madre de mi esposo contaba siempre cuánto había buscado a su primer hijo (mi esposo). Lo buscó infructuosamente durante más de 5 años y no lograba embarazarse. En aquella época no existían demasiados tratamientos, o eran muy costosos. Hasta que un día el médico le dijo que además de seguir buscando comenzara a despejar su mente e hiciera algo “distinto”

Fue entonces cuando mi suegra se anotó en un curso con su marido y comenzó a enfocar su mente en ello. Estaba distraída con el estudio y los exámenes. Además, salían a caminar y hacían cosas que no la dejaran “pensar” demasiado. Hasta que un día descubrió que su milagro se había producido, y la primer persona que lo supo fue el sacerdote de la Parroquia, quien la había acompañado en todo este trance. Con lágrimas en los ojos mi suegra contaba esta bella historia una y otra vez, pues los milagros de la vida no sólo no tienen explicación, sino que son dignos de dar a conocer.

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Si estás teniendo problemas para quedar embarazada, no dudes en consultar con un especialista, pero sobre todo, no dudes en confiar que en algún momento tu milagro llegará.

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Fernanda Gonzalez Casafús

Fernanda es Licenciada en Periodismo, especialista en Redacción Digital y Community Managment. Editora de contenidos y redactora en Familias.com. Nacida en Argentina y mamá de dos, ama los animales, la danza, la lectura y la vida en familia. Escribir sobre la familia y la maternidad se ha convertido en su pasión.