La bandera de lucha que levantó esta madre por su hijo no puede dejarte indiferente

Se dice que cuando a una madre se le cierra una puerta, es capaz de llegar al fin del mundo buscando una ventana. Este es sin duda, uno de los mejores ejemplos.

Camila Ignacia Gómez González

El sueño más grande de Luis Espinoza y Olivia, su esposa era convertirse en padres. Sin embargo, todos los planes se vinieron abajo cuando se enteraron que por una condición de salud de Olivia, las posibilidades de convertir su sueño en realidad, eran prácticamente nulas.

Sin embargo, 9 años más tarde y contra todo diagnostico médico, Olivia quedó embarazada. Ante tal milagro, decidieron llamar a su hijo Matthew (Mateo, en español) que significa “Regalo de Dios”.

El embarazo llegó a su fin y Matthew llegó al mundo lleno de salud, pero cuando cumplió 10 meses, Olivia notó que había algo extraño en su actuar que llamaba fuertemente su atención. “Como madre primeriza no tenía experiencia, pero noté que él no hacía ciertas cosas, como señalar con el dedo, y tenía un aleteo en sus manos”. El presentimiento de madre tenía razón, a los 20 meses Matthew fue diagnosticado con autismo por parte de un neurólogo.

“En ese momento, tienes dos pociones: o caes en una depresión o sigues adelante en busca de ayuda para que tu hijo pueda tener una mejor calidad de vida. Nosotros optamos por la segunda”, dijo al portal serpadres.com

Pero las dificultades no se hicieron esperar, ellos vivían en un pueblo en Nevada, donde no se contaba con los recursos suficientes para que su hijo pudiera salir adelante. Por lo que tuvieron que mudarse a Las Vegas, con la esperanza de que en aquel lugar podrían encontrar la información necesaria para que el niño pudiera integrarse a la sociedad.

Advertisement

No estaban errados, pero había una barrera aún más grande, el idioma. A pesar de haber material disponible, estaba absolutamente todo en inglés y las veces que solicitaron poder llevar a un intérprete pagado por ellos mismos, la respuesta era siempre la misma IMPOSIBLE.

Sin embargo, esto no fue suficiente para que Olivia bajara los brazos en la lucha que había comenzado para Matthew, por lo que optó por crear una organización de ayuda en español.

Y si bien no fue una decisión fácil, pues necesitaban de más familias para poder comenzar a trabajar en la causa y algunos cuantos profesionales dispuestos a compartir su conocimiento de manera gratuita, las cosas se comenzaron a dar positivamente para todos quienes decidieron aceptar el reto de ayudar a cientos de niños autistas de habla hispana.

Así fue como en el año 2010 nació AZULBLUE, una organización sin fines de lucro que lleva or nombre el color distintivo del autismo, y que basa sus funciones en entregar charlas, conferencias, revistas bilingües, asistencia psicológica familiar y actividades recreativas para los niños y sus familias.

Hoy Olivia y Luis, quieren transmitir su historia para que los padres que están viviendo el mismo procesos que ellos debieron enfrentar, no bajen sus brazos, si no que unan sus fuerzas con los padres que están viviendo su misma realidad. Pues el poder de los padres es la clave para sacar adelante a los hijos.

Advertisement

Si necesitas información acerca de esta organización o bien hacer un donativo a su causa, entonces visita azulblue.org

Toma un momento para compartir ...

Camila Ignacia Gómez González

Camila, es Relacionadora Pública, con orientación en Marketing, actualmente reside en Villa Alemana, Chile. Es esposa y madre, y ama escribir para ayudar a fortalecer los lazos familiares.