A las mujeres obstinadas, les va mejor en la vida, según un estudio
Si eres testaruda, la ciencia tiene una buena noticia para ti.
Fernanda Gonzalez Casafús
La obstinación o terquedad parecen malas palabras cuando nos referimos al comportamiento de un hijo. Sin embargo, esta cualidad puede llevar a un niño a ser un adulto exitoso, según un estudio.
Según recoge el diario El País, y de acuerdo a lo publicado por la revista científica Psicología en desarrollo, los niños que sean obstinados y les guste romper las reglas, serán adultos que ganen mejores salarios y tendrán mejores trabajos.
Niñas tercas, mujeres obstinadas
El estudio se basó en unos 700 niños, que fueron evaluados desde los 12 hasta los 52 años. Los resultados arrojaron que los adultos que de niños habían sido obstinados, habían conseguido de grandes mejores sueldos y más rendimiento académico, así como éxito profesional.
Pero el dato llamativo es que de ese grupo, el 56% eran niñas. Por lo tanto, aquellas mujeres que hoy son desafiantes y testarudas, seguramente lo hayan sido de pequeñas, y también seguramente esto le reporte ciertos beneficios en la vida, a pesar de lo que haya tenido que renegar su madre con ellas.
Por lo tanto, cuando veas insistir a tu niña hasta el hartazgo, recuerda que está desarrollando su personalidad, y que ésta puede llevarla a ser una mujer que lucha por lo que quiere en la vida. Claro, que deberás saber cómo lidiar con ello y los sanos límites que deberás imponerle, para que su obstinación no le traiga problemas.
¿Obstinación o capricho?
Lo que dice el estudio tiene sentido. Un niño que crece sabiendo hacer frente a los obstáculos o luchando contra los demás para lograr lo que busca, será un adulto que sepa pelear por lo que le corresponde.
El punto es saber diferenciar una personalidad obstinada de alguien que no entra en razones, pues ciertamente ésto último no será una cualidad positiva en la vida. Ser perseverante en la vida es bueno, pero cuando esa obstinación no nos deja ver nada “más allá”, puede convertirse en un martirio.
Aunque ser tenaz en lo que perseguimos nos ayude a la concreción de nuestras metas, es fundamental tener los pies sobre la tierra para poder admitir que no siempre tenemos la razón en todo y que a veces, es necesario ceder. El equilibrio entre una cosa y otra es la que, a mi criterio, determinará el éxito en la vida.
Mujeres, al poder
Luchar por lo que queremos, y alcanzarlo, en un mundo preparado por y para los hombres, suele ser desde ya un gran mérito.
El éxito como tal, es entendido hoy de forma unilateral. ¿En qué imagen piensas cuando digo “mujer exitosa”? Seguramente hayas imaginado una señora correctamente vestida, empresaria, prolija y con su maletín en mano. Pero el éxito no necesariamente pase siempre por allí.
Las mujeres somos exitosas cuando logramos lo que queremos. Y cuando nuestra obstinación está puesta en ello, logramos lo impensado. La obstinación en lograr lo que quieres puede llevarte a cumplir tu sueño de ser madre, o de ser empresaria, o de volar por el mundo, o de ser rescatista de animales.
Una visión acérrima puede ser una cualidad que nos lleve a tener un buen trabajo, sí. Pero el éxito es mucho más que una abultada suma de dinero en la cuenta bancaria o un buen puesto laboral.
El éxito invisible
Una mujer es exitosa cuando logra lo que desea y anhela en su corazón. Muchas de nosotras lo somos, pero al no ir a la oficina a las 9 a.m, simplemente ese éxito pasa desapercibido.
El éxito invisible es el de aquellas mujeres que han logrado superar sus propios miedos, lanzarse a la aventura, o enfrentar las adversidades y lograr lo impensado.
El éxito es también el de aquellas mujeres que llevan adelante una familia y, al mirar hacia atrás, ven a sus hijos ya grandes, y les explota el corazón de orgullo.
Son exitosas aquellas mujeres que sirven , y alimentan a los demás con amor, humildad y servicio. Aquellas que son voluntarias y dan su vida por los demás.
Es invisible el éxito de aquellas mujeres que trabajan en el campo, o que crían solas a sus hijos, o que al final del día, al sentarse en un sillón, varios manitos regordetas rodean su cuello.
Las cualidades para el éxito
Como mujer, asegúrate de perseguir tus sueños, ser obstinada en tus metas, planificar y organizar tus tareas, y así conseguirás el éxito. Lo dicen los expertos, pero también lo dirá tu intuición.
No obstante, recuerda cultivar ciertas virtudes como la compasión, la empatía, la caridad, el amor, o la humildad, porque sin ellas ninguna mujer -y ninguna persona- puede ser totalmente exitosa.
Eres una mujer de éxito cuando amas y te dejas amar, cuando sigues tus metas pero respetas al prójimo, cuando luchas por tus ideales, y ayudas a los demás a alcanzarlos también. Y sobre todo, eres exitosa, cuando pones amor en cada cosa que haces.