¿A qué edad es conveniente que una niña comience a maquillarse? Esto dicen los expertos
Las niñas muestran su deseo de parecerse a mamá, y ello implica maquillarse ¿las dejamos o no?
Fernanda Gonzalez Casafús
Quienes tienen hijas mujeres se habrán preguntado alguna vez o se estarán preguntando ésto ¿es apropiado que mi hija quiera maquillarse? Más de una vez le has prestado tus pinturas o has sucumbido a sus pedidos de sonrojar sus mejillas mientras tú te estabas maquillando. Y si tienes miedo de saber si estás haciendo lo correcto, sigue leyendo para saber qué opinan los especialistas.
Para muchas madres es divertido ver a su hija jugar con los maquillajes. Las pequeñas colorean su rostro de una forma felizmente desproporcionada e improvisan poses frente al espejo. La situación puede caerte en gracia o puede hacerte reflexionar: ¿están las niñas de hoy hipersexualizadas?
¿Juego o costumbre?
Cada vez que me maquillo, mi hija de casi 5 años se para al lado mío y revisa mi maletín de maquillajes. Me pregunta para qué es cada cosa y me pide que la pinte. De acuerdo a la situación y al momento, accedo a su pedido. Le explico que sólo puedo pintarla muy poquito porque son maquillajes para “grandes” y que a su piel sensible le haría mal. También le explico que las niñas sólo se pintan para jugar pero no para salir a la calle o salir a pasear.
Mi hija parece entender la diferencia, cuando le digo que no es momento de pintarse con mis pinturas, y que sí puede hacerlo con su set de maquillaje de juguete. Le muestro que las pinturas que ella tiene son más suaves y que se salen con el agua. A veces parece no conformarse del todo, y quiere que le ponga un poco de rímel en sus pestañas. Ella me ve a mí maquillarme y quiere parecerse “a su mamá”.
Cuando el maquillaje es sólo una cuestión lúdica del momento, y la niña así lo entiende, no debería representar ningún problema. En cambio, cuando una niña toma como hábito y costumbre maquillarse para salir o para ocasiones especiales está saltando una etapa que no debería pasar por alto.
Ser madres es una tarea harto difícil. Es por ello que es imprescindible contar con opiniones especializadas respecto de algunos aspectos de la crianza de nuestros hijos, para abordar algunas temáticas sensibles, como por ejemplo la hipersexualización de las niñas. Hoy, las pequeñas quieren vestirse como grandes, bailar canciones de grandes, comportarse como grandes, y maquillarse como grandes. Es parte del crecimiento, del juego mismo, pero no debería ser un fcomportamiento cotidiano en las pequeñas.
La opinión de los expertos
Nadie va a decirte si debes dejar o no debes dejar que tu hija use un poco de maquillaje. Pero los especialistas, como los sociólogos y psicólogos, pueden orientarnos a comprender el comportamiento infantil de otra manera, para encauzar y tener sólidas herramientas para un buen crecimiento emocional de nuestros hijos.
No pasa sólo por el maquillaje. La ropa, los juguetes y la música de la sociedad actual demuestra cómo las niñas se van alejando de aquel modelo de niñas que éramos hace unas décadas atrás. De acuerdo al diario El País, y según un documento de la Asociación de Psicología Americana, existe una tendencia sexualizadora de los niños en las sociedades modernas.
Lo preocupante, según los expertos, es la edad temprana en la que las niñas se van sumergiendo en el mundo del erotismo. Si nos ponemos a analizar, muchos de los juguetes, las series de tv, las canciones y los juegos que consumen los niños tienden a mostrar una conducta sexualizada en las niñas.
De acuerdo a La Vanguardia, y según Amalia Gordóvil, profesora de Psicología y Ciencias de la Educación, “desde edades muy tempranas se atisba el peligro de crecer bajo la falsa creencia de que el éxito social está vinculado a la imagen y se corre el riesgo, en estas edades, de perder una serie de valores fundamentales como la espontaneidad, el disfrute o la creatividad”
Según El País, uno de los síntomas alarmantes y derivado dela hipersexualización de las niñas es el aumento en los porcentajes de niñas afectadas por trastornos de alimentación, principalmente anorexia y bulimia, que comienzan entre los 5 y los 9 años. Bajo este panorama entonces, es fácil obtener una respuesta ante la pregunta ¿dejo que mi hija se maquille? Es espectro es muy amplio, pero como madres la respuesta debería ser “sí”, cuando es para jugar y cuando los límites están claros; y “no”, cuando la niña busca en el hecho de maquillarse una vía para acercarse más tempranamente a la sensualidad y sexualidad.
Cuando hablamos de hijas adolescentes, el panorama va cambiando, pues las jovencitas que van entrando en la pubertad desean maquillarse para salir los fines de semana y se encuentran bonitas y seguras frente al espejo. El límite de cuánto maquillaje y a qué edad comenzar exactamente lo tiene cada padre en particular; lo ideal es mantenerse firme en la idea de enseñarle a nuestras hijas que el maquillaje no la hará necesariamente “más mujer”.
Según un informe del Parlamento Europeo, “la sexualización supone la imposición de una sexualidad adulta a las niñas y los niños, que no están ni emocional, ni psicológica, ni físicamente preparados para ello”. La reflexión acerca de la erotización de las niñas debería acercarnos al debate de cómo estamos alejando a nuestras hijas de su propia infancia.
Ni blanco ni negro, sino gris
No podemos prohibir rotundamente a nuestras hijas que se acerquen al maquillaje. Ellas quieren explorar, investigar y saber qué es eso que tú haces que te hace sentir tan bien. Puedes acercarla al mundo del maquillaje cuando entre en la pubertad, y enseñarle a elegir aquellos maquillajes y colores que destaquen sus rasgos naturales.
Mientras tanto, si tienes una niña pequeña a quien le encanta maquillarse, no está mal que en alguna ocasión especial, como su cumpleaños, accedas a maquillarla muy suavemente. También, no está mal que tenga sus pinturas de juguete y que entienda que sólo se trata de eso, de un juego.
Recuérdale a tu hija que hay un tiempo para todo y enséñale a disfrutar de su niñez. Y si quieres pasar un tiempo ameno junto a tu hija, pueden improvisar un día casero de spa donde ambas se maquillen con sus pinturas de juguete. Así, podrá identificar fácilmente de a poco que el maquillaje durante la infancia es sólo para divertirse y jugar.
Y a tí ¿te parece conveniente que una niña se maquille?