Alguien de la familia tiene que irse a buscar trabajo lejos. ¿Cómo ayudarle a sentirse cerca?

Si algún miembro de tu familia ha emigrado en busca de un mejor porvenir, este artículo te ayudará a encontrar la manera de mantenerte unido con él a pesar de la distancia. No hay lugar como el hogar.

Erika Otero Romero

La situación económica actual de muchos países latinoamericanos obliga a numerosas familias a separarse por periodos de tiempo indeterminados, tanto dentro como fuera del país. Esta búsqueda de mejores oportunidades laborales, hace que los miembros que se quedan, como quien emprende el viaje, experimenten una serie de emociones y sentimientos opuestos que a la larga los lleva a hacerse la siguiente pregunta: ¿cómo permanecer unidos a pesar de la distancia?

Primero que todo, tengamos en cuenta que ninguna distancia es buena, sobre todo cuando en el matrimonio hay hijos pequeños. Quien se va, debe considerar que quien se queda asumirá por completo la responsabilidad sobre el porvenir de los hijos: los problemas escolares, las enfermedades, las tristezas y los llantos por el deseo de tener cerca al ausente, lo que sin duda traerá dificultades a los cónyuges. En medio de la distancia los problemas, en lugar de reducirse, podrían incrementarse y lo que antes era una solución puede llegar a convertirse en un problema mayor.

Cuando es uno de los hijos quien emigra en busca de un mejor provenir, es lógico que en medio de la soledad y los cambios va a procurar amistades y experiencias nuevas, lo que puede llevarlo a relacionarse con personas inadecuadas. Sin embargo, a los hijos hay que permitirles que asuman las riendas de su vida, confiando en los valores y las enseñanzas que se les impartieron en el hogar. Ofréceles la certeza de que pueden regresar a casa en el momento en que lo deseen o lo necesiten; recuérdales que la familia siempre estará para apoyarlos.

En vista de lo anterior y conociendo “en carne propia” lo antes dicho, expongo algunas alternativas a usarse si estás pasando por esta situación, con el afán de fortalecer los lazos del afecto a pesar de la distancia:

Echa mano de la tecnología

Sabido es que son pocos los modelos de teléfonos celulares que no cuentan con una cámara fotográfica o la posibilidad de conectarse a internet, y que muchos lugares públicos ofrecen gratuitamente señal web (Wifi). Y algunas tabletas y computadoras pueden ser usadas para el mismo objetivo, de modo que la falta de medios no es una excusa.

Correo habitual

El de todos los tiempos. Hay más “calor humano” cuando recibimos y enviamos cartas o paquetes con regalos, pues siempre es agradable saber que se toman el tiempo para hacernos llegar su amor a través de la distancia.

Planear vacaciones de regreso al hogar, o salir de viaje al encuentro de nuestro familiar

Se vuelve más divertido y emociona el saber que pronto se estará cerca de nuestro ser querido ausente.

Para quien ha emigrado

Para concluir: los medios de comunicación acortan las distancias, “acercan” a la gente a pesar de los kilómetros, nos hacen sentirnos amados y que no nos han olvidado; pero, en definitiva, no hay como estar con los nuestros. En lo personal siempre recomiendo no dar excusas cuando necesitas de los tuyos; donde sea que te encuentres o lo lejos que estés no importa, empaca tus maletas y ve a su encuentro. Como dijo Dorothy en la película El mago de Oz: “No hay lugar como el hogar”.

Erika Otero Romero

Psicóloga con experiencia en trabajo con comunidades, niños y adolescentes en riesgo.