Claves para cuidarte y hacerle frente a la depresión
Salir de la depresión no es solo buscar ayuda médica, es poner de tu parte para seguir viviendo un día a la vez.
Erika Patricia Otero
Cuando una persona sufre depresión lo más común es que sea remitida a un psiquiatra. Estos profesionales son los más indicados para tratar médicamente enfermedades del orden emocional. Sin embargo, ningún tratamiento farmacológico funciona si la persona que sufre depresión no pone de su parte para recuperarse.
A pesar de estar enfermos, no podemos poner en pausa nuestra vida, tenemos que seguir adelante, trabajando y esforzándonos ; incluso las personas que sufren depresión deben seguir viviendo. Puede ser un desafío porque cuando se está deprimido no se tienen deseos de nada, solo queremos que todo el dolor acabe; a pesar de eso, tenemos rutinas que seguir y para esto debemos “hacer de tripas corazón”.
Claro que podemos seguir viviendo, es cuestión de dar un paso tras otro aunque tome fuerzas y tiempo, pero sí, se puede. ¿Cómo se puede conseguir? implementando lo que conocemos como rutina de autocuidado en la depresión. A continuación te explicaré en qué consiste.
¿Qué es una rutina de autocuidado en la depresión?
Se trata de la implementación de una estrategia que acompañe la terapia psiquiátrica o psicológica de la depresión.
El objetivo de esta consiste en mantenernos a flote y ocupados en actividades diarias que eviten que nos sumerjamos en la enfermedad.
Al “ponernos en marcha” evitamos caer en el aislamiento y la inactividad. Es una forma de terapia con reforzadores positivos que nos conectan con el mundo de manera compasiva y positiva.
Beneficios del autocuidado para personas con depresión
Básicamente, lo que busca es mantenernos motivados en seguir viviendo. Investigaciones como la publicada en la revista Neuroscience and Biobehavioral Reviews indican que la depresión altera los procesos cognitivos y emocionales. Implementar una rutina de autocuidado logra lo siguiente:
- Mejora nuestra autoeficacia.
- Fomenta nuestro autocontrol.
- Favorecer la actividad física.
- Ayuda a tomar decisiones.
- Beneficia el contacto con otras personas.
- Fortalece fuerza de voluntad.
- Ayuda a mejorar la regulación de las emociones.
- Estructurar nuestros días, rutinas y hábitos.
- Nos motiva a ponernos metas.
- Ayuda a que nos enfoquemos en la motivación y no en la negatividad.
- Mejora la autoimagen al descubrir que somos capaces de hacer cambios positivos en nuestra vida.
- Nos damos cuenta que somos capaces de tener el control de nuestra vida.
Rutina de cuidados personales para la depresión
Como ya se mencionó antes, junto con la medicina psiquiátrica y la terapia, la persona con depresión debe procurar ayudarse a sí misma. Esto solo lo logrará si pone de su parte para activar su vida y no enfocarse en su enfermedad.
A continuación se ofrecerán unas ideas que te ayudarán a establecer tu propia rutina de autocuidado para hacerle frente a la depresión:
1 Todos tus días deben tener una misma rutina
Cientificamente, nuestro cerebro funciona mejor si establecemos una rutina diaria repetitiva y organizada. Esto lo que hace es que nos sintamos más seguros y tranquilos porque de cierta manera “medimos” los pasos a seguir a lo largo de todo el día.
Por ejemplo:
- Despertar y acostarte cada día a la misma hora
- Come cada día en el mismo horario.
- Cuida que tu horario tenga espacio para tus actividades de entretenimiento. por ejemplo: a las 7 pm ver ese programa de tv de lunes a viernes.
2 Proponte metas pequeñas y celébralas
Ya sea que hoy te propusiste caminar 5 kilómetros y lo lograste sin parar una sola vez a descansar o terminaste un libro en 3 días. Todos estos son logros de los cuales sentirte feliz.
Cuando se tiene depresión, levantarse de la cama es un reto, limpiar es otro; esas pequeñas acciones como limpiar merecen ser celebradas porque es un avance hacia la luz.
3. Actividad física regular
Puede ser que no seas muy entusiasta de hacer deporte, pero no necesitas convertirte en levantador de pesas para sentir que haces deporte.
Caminar, montar media hora en bicicleta, hacer zumba en casa, correr o ir a nadar. Todo se vale como actividad física; el punto acá es no dejarse dominar por el vacío existencial.
4. Estimula tus sentidos
Hay personas que encuentran el escape perfecto al ir a ver obras de arte en museos. Otros más disfrutan de pasar tiempo al aire libre y observar aves y flores.
Tu puedes optar por escuchar música o ver películas y analizarlas. Tienes una gran gama de opciones que te brindarán amplitud de distracción y conocimiento.
5. Encuentra un nuevo hobbie
Sea el que sea: coleccionar estampas, pintar al óleo aunque no te salgan bonitas las pinturas, jugar ajedrez, lo que sea que te llame la atención y te entretenga. De todo se aprende un poco y el tiempo pasará más rápido.
6. Busca las técnicas de relajación que más se ajusten a ti
Ya sea practicar relajación siguiendo audios en youtube o televisión. Se trate ya de salir a caminar mientras haces ejercicios de respiración controlada. Cualquiera sea la técnica de relajación que se ajuste a tu estilo de vida, es bienvenido.
8. Sí a la conexión social
Cuando estamos deprimidos, lo que más buscamos es aislanos. Esto no es recomendable aunque sientas que te abruma estar rodeado de personas. Solo rodéate de las personas que quieras tener a tu lado y comparte algo de tiempo con ellos.
Por último, solo me queda recordarte que lograrás superar cada episodio depresivo solo si pones de tu parte. Ayúdate a superar la vida y tus pensamientos y emociones negativas y la vida será mejor a cada instante.
Erika Patricia Otero
Psicóloga con experiencia en trabajo con comunidades, niños y adolescentes en riesgo.
