Cómo salir adelante cuando la crisis invade nuestra vida
¿Has tenido dificultades ante los cambios de tu vida? ¿sabes qué es lo que lo hace difícil? ¿quisieras saber cómo transitar una crisis con más elementos?
Danitza Covarrubias
La palabra crisis la hemos escuchado bastante, y seguro entiendes el concepto. De cualquier manera, quisiera iniciar por definirla, puesto que damos por hecho que hablamos de lo mismo, y puede ser que no sea así.
Proviene de una palabra griega que se refiere a un punto de inflexión, es decir, un momento decisivo. El punto en el que un camino se modifica y toma otro rumbo diferente.
En la vida, hay muchos momentos donde la vida se transforma. Es en estos momentos que entramos en crisis, puesto que el camino conocido desaparece, y es momento de emprender nuevas rutas.
El sistema homeostático
Los seres humanos somos un sistema, y también las familias lo son, las comunidades, las ciudades. Todos formamos parte de un sistema, y a la vez somos un sistema. Los sistemas tienden a encontrar un funcionamiento y a hacer que permanezca para sobrevivir. Esto se define como “homeostasis”.
Una crisis amenaza esta manera de sobrevivir, este flujo de movimiento de un sistema necesita modificarse. Sin embargo, un sistema siempre va a buscar permanecer en lo conocido, en lo que ya sabe que funciona. Es por esto que, ante una crisis, hay mucha resistencia al cambio.
La entropía
La entropía puede definirse como la medida del desorden de un sistema. Este desorden es natural en cierta medida. Todos los sistemas entran en desorden, y su tendencia a sobrevivir y funcionar (homeostasis) hace que vuelva a entrar en orden.
Ante una crisis, el desorden es mayor. Y si sumamos la resistencia a modificar el funcionamiento del sistema, el desorden y caos aumenta.
Ante este paradigma, una crisis es ese momento en el que el sistema debe modificar su funcionamiento. Generar nuevas estrategias, recursos, comportamientos para sobrevivir. Paradójicamente, lo que le hace vivir -su homeostasis- le dificulta los cambios que requiere para sobrevivir ante las crisis.
La ruptura psíquica ante la crisis
Ante una mayor resistencia, hay una mayor probabilidad de quiebre. Aceptar la realidad es parte fundamental de cambio. Es esta nueva realidad la que requiere modificaciones para adaptarse. Encontrarse ante una crisis es encontrarse ante el dolor de perder aquello que antes era para lo que ya estabas habilitado.
Por ejemplo, cuando tienes un trabajo, ya sabes cómo manejarte ahí, las reglas, horarios, tus tareas. Cuando lo pierdes, hay primero una resistencia, un dolor de perder aquello conocido y que era la manera habitual de sobrevivir. Para buscar un nuevo trabajo, e incluso para iniciar otro, es necesario nuevas reglas, nueva vestimenta, tal vez nuevos horarios y nuevas tareas. Nuevas personas con quienes relacionarse. Es volver a aprender. Es volver a verse vulnerable en la curva de adaptación.
La reconstrucción personal
Muchas de las dificultades ante estas crisis es cuando nuestra identidad está mezclada con aquello que se pierde. Volviendo al ejemplo anterior, muchas veces al perder un trabajo, no solo se pierde una actividad. A veces las personas se identifican con la empresa, con sus valores, incluso al decir quién son, nombran ese puesto que tienen. Es decir, ya no son la persona, son ese trabajo.
Es por este motivo que las crisis toman mayor fuerza, y dificultad en reorganizarse. No solo reorganizan su vida, sino su propia estructura de personalidad e identidad.
El duelo
Uno de los elementos fundamentales para poder superar una crisis es el proceso de duelo, poder nombrar las pérdidas permite despedirse de ello, y dejar el espacio disponible para nuevos caminos. Sin despedirte del antes, será difícil que puedas proyectar y preparar el camino para lo que el presente y futuro te demandan. Expresa tu dolor, tu tristeza. Dale espacio a tus emociones.
La nueva vida
Poder generar nuevos recursos es fundamental para afrontar una crisis. Estar dispuesto a aprender algo nuevo. Incluso, una nueva imagen personal. Quién quieres ser, qué quieres vivir en la nueva etapa de vida. Crear nuevos proyectos, nuevos sueños, nuevas ideas.
Algunas creencias se verán tambaleantes. Cuando eso sucede a veces es necesario el acompañamiento profesional, puesto que son estas creencias -y que tienen que ver en mucho con la identidad- la que dificultarán aún más la adaptación al cambio.
Esta nueva vida es una nueva oportunidad. Es por eso por lo que se suele relacionar el concepto de crisis con oportunidad. Es aprender de los errores de antes, y evaluar el pasado para mejorar el presente y la construcción del futuro.
Crecimiento
Las crisis siempre nos invitan a crecer. Afrontar nuevas realidades siempre requieren más de nosotros. No sólo en el tema de nuevos aprendizajes y recursos. Siempre el renunciar a lo que estamos acostumbrados a nuestra vida, implica un crecimiento y maduración emocional.
Incluso, un desarrollo espiritual, puesto que preguntas existenciales devienen junto con esas crisis. Poder nombrarlas y buscar responderlas generará también un enriquecimiento personal. También requerirá que aceptes con confianza ese cambio, que aunque no elegiste, se abre ante ti. Miles de posibilidades se abren a partir de ello. Tómate tu tiempo para poder elegir tu nuevo camino.
En resumen, para superar esta crisis es necesario hacer los siguientes pasos:
1 Despídete: toma espacio y tiempo para tu duelo.
2 Evalúa la vida pasada y plantéate qué vida deseas construir.
3 Toma espacio para los aprendizajes necesarios y los recursos que necesitarás.
4 Ve un paso a la vez, una meta pequeña en esa transformación.
5 Da espacio para tu espiritualidad.
Está en tus manos el cambio. Con propósito y voluntad podrás lograrlo.
Danitza Covarrubias
Danitza es originaria de Guadalajara, Jalisco, en México. Licenciada en psicología y maestra en desarrollo transgeneracional sistémico, con certificación en psicología positiva, así como estudios en desarrollo humano, transpersonal y relacional. Psicoterapeuta, docente, escritora y madre de 3. Firme creyente que esta profesión es un estilo de vida.
